Apagar el motor del vehículo mientras se conduce, aunque poco frecuente, puede acarrear serias consecuencias tanto para la seguridad del conductor como para el estado del vehículo. Esta situación, que puede deberse a un fallo mecánico, un error humano o una decisión consciente, interfiere con el correcto funcionamiento de varios sistemas que dependen del motor encendido. Elementos esenciales como la dirección asistida y los frenos podrían verse afectados, incrementando el riesgo de pérdida de control del vehículo. Expertos en automoción de Consumer Reports, una consultora enfocada en los derechos de los consumidores, han analizado la posibilidad de apagar el motor de un carro mientras está en movimiento y las implicaciones de dicha acción.
Este análisis es parte de los estudios realizados por Consumer Reports para evaluar la seguridad y el rendimiento de los vehículos modernos en condiciones no convencionales, brindando información crucial sobre el funcionamiento de sistemas clave como los frenos y la dirección ante un apagado inesperado del motor. Ryan Pszczolkowski, líder del programa de neumáticos y conductor de pruebas de Consumer Reports, realizó un experimento en el que puso a prueba dos versiones del Ford Maverick en escenarios extremos.
En primer lugar, Pszczolkowski condujo un Ford Maverick con motor de gasolina, equipado con una llave física, a toda velocidad en la pista de pruebas. Durante la conducción, apagó el motor mientras el vehículo aún estaba en movimiento. A pesar de que el motor se detuvo de inmediato, tanto la dirección como los frenos siguieron operando, lo que le permitió mantener el control del vehículo y sacarlo con seguridad al borde de la pista. Una vez detenido por completo y con la transmisión en modo de estacionamiento, pudo reiniciar el motor sin ningún inconveniente.
En una prueba paralela, Pszczolkowski repitió el experimento con un Ford Maverick híbrido, que utiliza un botón de arranque en lugar de una llave física. La finalidad de estas pruebas era comprender cómo reaccionan ambos tipos de sistemas de encendido en situaciones en las que el motor se apaga durante la conducción.
Los resultados fueron prácticamente los mismos que con el modelo de gasolina. Al mantener presionado el botón de arranque por unos segundos mientras el vehículo estaba en movimiento, el motor se apagó, pero tanto la dirección como los frenos continuaron funcionando en modo accesorio, permitiendo mantener el control. Incluso las luces del tablero se mantuvieron encendidas, lo que facilitó la supervisión del estado del vehículo mientras el motor estaba inactivo. Este comportamiento es importante en situaciones donde el motor puede apagarse inesperadamente, ya que permite al conductor llevar el vehículo a un lugar seguro.
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Mike Monticello, director de pruebas de carretera de Consumer Reports, destacó la importancia de esta funcionalidad. Según Monticello, aunque a primera vista puede parecer inusual que sea posible apagar el motor a velocidades de autopista, esta característica está diseñada con fines de seguridad. Si el vehículo sufre un incendio o una falla mecánica grave, la capacidad de cortar la alimentación del motor es crucial para evitar mayores riesgos.
“Apagar el motor en situaciones de emergencia permite al conductor estacionar el vehículo de manera segura al costado de la carretera y minimizar el peligro tanto para los ocupantes del vehículo como para otros conductores” comentó Monticello.
Entretanto, esta función de apagado intencional ofrece una capa adicional de seguridad, especialmente en vehículos modernos que dependen de sistemas electrónicos avanzados. La capacidad de mantener el control de los frenos y la dirección en modo accesorio asegura que el conductor tenga tiempo suficiente para reaccionar de forma adecuada ante una emergencia, lo que reduce significativamente el riesgo de accidentes.
El análisis concluye que es posible apagar un carro mientras se está conduciendo, tanto en vehículos con llave física como en aquellos con botón de arranque. Sin embargo, esta acción debe limitarse exclusivamente a situaciones de emergencia inusuales, como un incendio o una falla mecánica grave. Aunque los sistemas clave como la dirección y los frenos siguen operando en modo accesorio, lo que permite llevar el vehículo a un lugar seguro, apagar el motor en circunstancias normales o sin necesidad puede poner en riesgo la seguridad del conductor y los ocupantes.
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¿Por qué es malo apagar el carro cuando se está conduciendo?
Javier Rodríguez, mecánico experto de Niyurcan, advierte que apagar el motor mientras se conduce puede ocasionar problemas graves en los sistemas de seguridad del vehículo, particularmente en aquellos modelos que dependen de tecnologías asistidas. Al apagar el motor, se interrumpe el suministro de energía a componentes esenciales como la dirección asistida y los frenos, que podrían pasar a modo manual o accesorio, lo que reduce significativamente la capacidad de control sobre el vehículo. Esto aumenta el riesgo de perder estabilidad, sobre todo a altas velocidades, donde una respuesta rápida es crucial para evitar accidentes.
El apagado del motor afecta el sistema eléctrico del vehículo, desactivando el alternador y, en muchos casos, limitando el funcionamiento de los sistemas electrónicos. Esto incluye la asistencia de frenado y el control de tracción, que son vitales para mantener la seguridad durante la conducción. Asimismo, al detener el motor, también se pierde la capacidad de alimentar el aire acondicionado, los sistemas de navegación y cualquier otro equipo que dependa de la energía generada por el motor en funcionamiento.
“Apagar el motor en pleno movimiento puede generar fallos en el sistema de transmisión y otros elementos críticos, lo que podría derivar en reparaciones costosas. Esta acción debería limitarse solo a emergencias graves donde apagar el motor sea una medida de seguridad necesaria”, señala Rodríguez.
Apagar el carro en movimiento podría ser necesario en casos graves como una falla mecánica severa, donde cortar la alimentación del motor sea la opción más segura para detener el vehículo. Sin embargo, fuera de estas situaciones excepcionales, apagar el motor mientras se conduce no es recomendable debido a los riesgos que conlleva para la seguridad del conductor y los ocupantes.