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A medida que un embrague comienza a fallar, emite una serie de señales que pueden alertar al conductor sobre la reparación o incluso la necesidad de un cambio inminente. Desde cambios de comportamiento en la palanca de cambios hasta ruidos inusuales y dificultades para cambiar de marcha, reconocer estos indicios a tiempo puede ayudar a abordar el problema antes de que se convierta en un dolor de cabeza.
¿Cada cuánto se debe cambiar el embrague?
Según Fredy Rojas, mecánico y experto automotriz, es importante destacar que el intervalo de tiempo para cambiar el embrague de un carro manual puede variar significativamente según varios factores, como el estilo de conducción, las condiciones de manejo y la calidad del embrague instalado. Sin embargo, en términos generales, se recomienda considerar un cambio de embrague cada 100.000 a 150.000 kilómetros recorridos.
Además, indica que es necesario estar atento a las señales de desgaste, como la dificultad para cambiar de marcha, el deslizamiento del embrague o ruidos anormales, ya que estos pueden indicar la necesidad de un reemplazo antes del intervalo mencionado. “Realizar un mantenimiento regular del embrague, como la revisión del sistema hidráulico y la inspección de las piezas relacionadas, puede prolongar su vida útil y prevenir averías costosas”, sostiene.
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Motivos que indican que el embrague del carro está presentando fallas
1. Dificultad para cambiar de marcha: Según Rojas, la dificultad para cambiar de marcha es un indicador clave de problemas en el embrague del vehículo, ya que está directamente relacionada con su funcionamiento. Este problema puede manifestarse como rigidez al mover la palanca de cambios o resistencia al cambiar a ciertas marchas.
Esta situación no solo afecta la experiencia de conducción, volviéndola más incómoda e incluso peligrosa en momentos que requieren respuestas rápidas, como adelantamientos en carretera o las diferentes maniobras, sino que también puede aumentar el riesgo de daños adicionales en otros componentes del sistema de transmisión. “Ignorar esta dificultad puede provocar un mayor desgaste y daño en el disco de embrague, el plato de presión y el volante del motor, así como aumentar la carga en los sincronizadores y engranajes de la caja de cambios, resultando en reparaciones costosas y riesgosas”, explicó.
2. Deslizamiento del embrague: Para el experto, esto ocurre cuando el disco de embrague no se acopla completamente al volante del motor, lo que resulta en una transferencia incompleta de potencia. Esto puede ser causado por desgaste excesivo del disco, un plato de presión gastado o un cojinete de empuje (también denominados cojinetes axiales) defectuoso.
Sin embargo, el deslizamiento es evidente durante la aceleración, donde el motor aumenta de revoluciones sin un aumento proporcional en la velocidad del vehículo. Al afectar la potencia y la aceleración, puede provocar un aumento en el consumo de combustible y un desgaste prematuro de otros componentes de la transmisión.
3. Mayor esfuerzo al pisar el pedal del embrague: De acuerdo con Rojas, experimentar un mayor esfuerzo al pisar el pedal del embrague es una señal clara de que el sistema de embrague de un carro está fallando. Esto puede deberse a componentes desgastados o defectuosos, como el disco de embrague, el plato de presión o el cojinete de empuje.
Este error puede afectar la suavidad y la precisión al cambiar de marcha, lo que compromete la experiencia de conducción y la seguridad. Es necesario tener en cuenta que, al ignorar esta señal, puede llevar a problemas más graves en el sistema de embrague y transmisión, por lo que es importante abordar este problema con prontitud y buscar la atención de un mecánico de confianza.
4. Ruidos inusuales: A su vez, los ruidos inusuales, como chirridos, crujidos o golpeteos al pisar el pedal del embrague pueden indicar desgaste o desalineación en los componentes del embrague, como el disco, el plato de presión o el cojinete de empuje.
“Es importante abordar estos problemas de inmediato y buscar la atención de un mecánico para realizar las reparaciones necesarias”, recomienda.
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5. Olor a quemado: Los olores a quemado provenientes del área del embrague son una advertencia seria de problemas en el sistema de embrague del carro, indicando posible sobrecalentamiento debido a fricción continua, desgaste excesivo del disco de embrague o problemas con el plato de presión o el cojinete de empuje.
Para el experto, estos olores no solo representan problemas mecánicos, sino que también aumentan el riesgo de una avería imprevista, comprometiendo la seguridad durante la conducción. Reconocer estas señales tempranas y abordar el problema rápidamente puede prevenir daños mayores en la transmisión y asegurar un funcionamiento seguro del vehículo con la atención de un mecánico especializado para una inspección y reparación adecuada.
¿Cuánto puede costar un embrague de carro manual en Colombia?
Rojas señala que, el costo de un embrague para un automóvil manual en el mercado colombiano puede variar significativamente dependiendo de varios factores, como la marca y modelo del vehículo, la calidad de los materiales utilizados en el embrague y la reputación del fabricante. En general, el precio de un embrague puede oscilar entre los 500.000 a 2.000.000 o más, dependiendo de estas variables.
A su turno, expresa que los embragues de marcas reconocidas y de alta calidad suelen tener un precio más alto, pero también ofrecen una mayor durabilidad y rendimiento. Además del costo del embrague en sí, se debe considerar el costo de la mano de obra para la instalación, que puede variar según el taller mecánico y la complejidad del trabajo. Para Rojas, es importante buscar opciones que ofrezcan un equilibrio entre calidad y precio, y asegurarse de que el embrague sea compatible con las especificaciones del vehículo para garantizar un funcionamiento óptimo y seguro.