Yamaha Crypton
La renovada solución de transporte urbano de la marca japonesa ofrece fácil adquisición, económico mantenimiento y gran versatilidad en ciudad.
Juan Corbata
Los tiempos cambian y la tecnología evoluciona. Y de qué manera en este remozado producto de Yamaha. La nueva Crypton no renuncia a sus orígenes de moto utilitaria y, por el contrario, todo ha mejorado en ella respecto del modelo anterior.
Fabricada en Indonesia, ahora su bastidor ha sido retocado para mejorar la maniobrabilidad en espacios reducidos pero continúa con la configuración ‘underbone’ que le permite al motociclista montarla en posición ‘señorera’, lo cual la hace muy cómoda de llevar. El freno delantero es de disco operado hidráulicamente y el de atrás es de tambor por varilla.
Por su peso ligero (97 kg), por el bajo centro de gravedad (distancia mínima al suelo de 126 mm), y la distancia entre ejes de 1.235 mm, tiene todo lo necesario para ser un vehículo urbano en el que se puede transportar una pareja o un adulto y un niño con uso de razón y capacidad de advertir el peligro.
El motor, monocilíndrico de dos válvulas, refrigerado por aire, de 114 centímetros cúbicos, desarrolla una potencia de ocho caballos y un torque de 8,5 Nm, suficientes para hacer de esta Yamaha Crypton una solución de transporte ágil (con caja de velocidades que permite una velocidad máxima de 95 a 105 km/h, según la altura sobre el nivel del mar donde ruede), de muy económico mantenimiento (entre 100 y 130 km/gal) y fácil adquisición.
De hecho, los $3´990.000 que vale significan unos $800.000 de cuota inicial (financian el 80% del vehículo) y el resto ($3’190.000) son 2.127 pasajes de Transmilenio (a $1.600 c/u), es decir, que una pareja que haga 4 viajes diarios, los viene consumiendo en poco menos de año y medio. Y con plena libertad de movimientos.
Datos de interés
Cambios positivos
El nuevo modelo adopta llantas delanteras y traseras de 17 pulgadas. El tamaño de los neumáticos es de 70/90-17 en el de adelante, y de 80/90-17 en el de atrás, que le proporcionan una gran estabilidad y sensación de ligereza en la conducción.
La suspensión trasera es de tipo convencional, con acción de resortes de dos pasos sincronizados, para garantizar una gran capacidad de amortiguación y una conducción confortable, en diferentes tipos de usos. La barra del amortiguador posee un diámetro altamente rígido de 10 mm.
El tablero es de fácil lectura y con un diseño moderno. La Cripton, además, viene con un nuevo carenaje, diseñado para cumplir con las funciones de protección contra el viento para el conductor, deflexión del lodo y para dirigir el aire hacia la cabeza del cilindro, logrando una mejor refrigeración.
Los tiempos cambian y la tecnología evoluciona. Y de qué manera en este remozado producto de Yamaha. La nueva Crypton no renuncia a sus orígenes de moto utilitaria y, por el contrario, todo ha mejorado en ella respecto del modelo anterior.
Fabricada en Indonesia, ahora su bastidor ha sido retocado para mejorar la maniobrabilidad en espacios reducidos pero continúa con la configuración ‘underbone’ que le permite al motociclista montarla en posición ‘señorera’, lo cual la hace muy cómoda de llevar. El freno delantero es de disco operado hidráulicamente y el de atrás es de tambor por varilla.
Por su peso ligero (97 kg), por el bajo centro de gravedad (distancia mínima al suelo de 126 mm), y la distancia entre ejes de 1.235 mm, tiene todo lo necesario para ser un vehículo urbano en el que se puede transportar una pareja o un adulto y un niño con uso de razón y capacidad de advertir el peligro.
El motor, monocilíndrico de dos válvulas, refrigerado por aire, de 114 centímetros cúbicos, desarrolla una potencia de ocho caballos y un torque de 8,5 Nm, suficientes para hacer de esta Yamaha Crypton una solución de transporte ágil (con caja de velocidades que permite una velocidad máxima de 95 a 105 km/h, según la altura sobre el nivel del mar donde ruede), de muy económico mantenimiento (entre 100 y 130 km/gal) y fácil adquisición.
De hecho, los $3´990.000 que vale significan unos $800.000 de cuota inicial (financian el 80% del vehículo) y el resto ($3’190.000) son 2.127 pasajes de Transmilenio (a $1.600 c/u), es decir, que una pareja que haga 4 viajes diarios, los viene consumiendo en poco menos de año y medio. Y con plena libertad de movimientos.
Datos de interés
Cambios positivos
El nuevo modelo adopta llantas delanteras y traseras de 17 pulgadas. El tamaño de los neumáticos es de 70/90-17 en el de adelante, y de 80/90-17 en el de atrás, que le proporcionan una gran estabilidad y sensación de ligereza en la conducción.
La suspensión trasera es de tipo convencional, con acción de resortes de dos pasos sincronizados, para garantizar una gran capacidad de amortiguación y una conducción confortable, en diferentes tipos de usos. La barra del amortiguador posee un diámetro altamente rígido de 10 mm.
El tablero es de fácil lectura y con un diseño moderno. La Cripton, además, viene con un nuevo carenaje, diseñado para cumplir con las funciones de protección contra el viento para el conductor, deflexión del lodo y para dirigir el aire hacia la cabeza del cilindro, logrando una mejor refrigeración.