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Este fin de semana, un equipo del Instituto de Desarrollo Urbano IDU, encabezado por Orlando Molando, director de la entidad, visitó las obras de extensión de la Avenida Boyacá en su tramo norte, puntualmente el tramo que va desde la calle 170 hasta la calle 183, en la localidad de Suba, con el fin de dar a conocer importantes anuncios respecto a la movilidad de esa zona de la ciudad.
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El proyecto, que empezó su proceso durante la pasada administración, fue recibido en enero de este año por la alcaldía Galán con un avance del 47,10%. Actualmente, seis meses después, el proyecto tiene un avance del 69,27% de ejecución.
“Esta es una obra de valorización que tiene 1.3 km; dos carriles para Transmilenio; dos carriles mixtos; ciclorruta en el separador central. Cuando llegamos a la administración recibimos la obra en un 47.10 %, el alcalde Carlos Fernando Galán nos pidió habilitarla lo más pronto posible y en unos días vamos a cumplirle a los bogotanos su directriz con la habilitación de los carriles del costado oriental”, indicó el director del IDU, Orlando Molano.
Las calzadas orientales de la obra, que promete descongestionar los corredores y la movilidad del noroccidente de la ciudad, están previstas para empezar operaciones antes de que finalice julio de 2024.
La obra
El costo total de la obra, incluyendo precios de interventoría, supera los $80.000 millones. Esta ampliación del corredor vial de la Avenida Boyacá contempla dos calzadas centrales, de dos carriles cada una, carriles de ciclorruta bidireccional en el separador central y trechos de andenes de 4.6 metros de anchos por los dos costados de la vía. El proyecto también incluye la instalación de cuatro intersecciones semaforizadas con pasos peatonales.
Uno de los líos que presenta la obra son las labores de adecuación de las redes de acueducto y otras empresas prestadoras de servicios públicos, los cuales, según Molano, ya se están solucionando y en ese particular, el proyecto presenta avances significativos. En ese mismo sentido, se han adelantado varias reuniones de trabajo con la Empresa de Acueducto en relación con las redes de agua potable que abastecen la zona.
“Seguimos trabajando para poder tener habilitada esta obra a finales de este año y poder conectar la av. Boyacá con la calle 183 que ya completa cerca de cuatro años cerrada. Además, este será un corredor vial muy importante para descongestionar el tráfico y mejorar la movilidad del noroccidente de la ciudad”, puntualizó Orlando Molano.
En ese sentido, las calzadas orientales de la vía están programadas para empezar funciones a finales del presente mes de julio. Finalmente, la obra completa está proyectada para que concluya a finales de 2024, esto porque el contratista tramitará una prórroga de tres meses para la terminación de esta.
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