El próximo 21 de abril la Fiscalía General de la Nación acusará formalmente a cinco personas, señaladas de pertenecer a la autodenominada “primera línea” de la localidad Suba en Bogotá, por haber cometido hechos de violencia y vandalismo en el marco de las manifestaciones por el paro nacional de 2021.
Se trata de Jhonatan Stiven Cortés Aldana, Karo Cepeda Andrade, Andrés Felipe Rodríguez Chávez, Julián Andrés Moreno Otero y Maura Valentina Díaz Flórez, quienes fueron capturados el pasado 27 de octubre y, posteriormente, enviados a prisión domiciliaria por un juez.
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Ahora, un fiscal radicó escrito de acusación en su contra por los delitos de terrorismo, secuestro, tortura, concierto para delinquir, violencia contra servidor público, daño en bien ajeno y lanzamiento de objetos peligrosos.
Los procesados son investigados por hechos acontecidos entre junio y agosto del año pasado, como la agresión a patrullas de la Policía con bombas incendiarias, daños a establecimientos comerciales en zonas aledañas al Portal Suba de TransMilenio y actos violentos contra integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad).
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Para esto, el ente acusador asegura contar con evidencias como videos, interceptaciones de comunicaciones y declaraciones de testigos para sustentar su acusación en juicio. Sin embargo, El Espectador conoció que dos de estos jóvenes -Jhonatan Stiven Cortés Aldana y Karo Cepeda Andrade- han manifestado que no hacen parte de la “primera línea”.
En su defensa, dicen que estuvieron presentes en los disturbios en esa zona de Bogotá haciendo cubrimiento periodístico de las manifestaciones para el medio de comunicación alternativo y popular “Z11 Suba”. Incluso, la Fundación para la Libertad de Prensa expresó su preocupación cuando se dio cumplimiento a la orden de captura en contra de Cortés y Cepeda.
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