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La segunda ola invernal continúa generando estragos en Cundinamarca, departamento en el que ya van más de 22 personas muertas debido a desbordamientos y crecientes de ríos en lo corrido del año. Este viernes 21 de octubre, la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) emitió un aviso de advertencia por la creciente en la cuenca del río Neusa.
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La creciente del río Neusa se debe a las fuertes lluvias presentadas en la zona durante los últimos días, hecho que genera preocupación al haber aumentado la probabilidad de su desbordamiento, que podría afectar a los municipios de Nemocón, Cogua y Zipaquirá.
“Actualmente, en la cuenca del río Neusa, en su parte alta, se han presentado caudales por encima de los 6 m3 /s, producto de las últimas precipitaciones presentadas en la zona desde el día miércoles de esta semana, con una máxima de 69,0 milímetros”, aseguró la CAR.
De acuerdo con el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), las precipitaciones en este sector estarán por encima de los promedios históricos y podrían generarse crecientes súbitas.
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Por eso, para prevenir a la población y evitar calamidades, la entidad realiza las siguientes recomendaciones:
- No acercarse al embalse del Neusa y a las fuentes aledañas ante el riesgo de niveles altos y posibles crecientes.
- Activar los comités de riesgos de los municipios de Nemocón, Cogua, Zipaquirá y del área de influencia del embalse.
- Tomar las medidas de precaución necesarias, para evitar afectaciones en las distintas actividades agropecuarias e industriales en el entorno del embalse.
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Sobre esto, el capitán Álvaro Farfán, delegado departamental de Bomberos de Cundinamarca afirmó que todos los cuerpos de bomberos se encuentran en alerta y en máxima activación ante cualquier emergencia que se pueda presentar por la creciente de la cuenca.
“Nos estamos apoyando con equipo tecnológico especializado, entre los que tenemos estaciones meteorológicas y drones que nos permiten hacer monitoreo de zonas de alto riesgo por deslizamiento y crecientes súbitas”, expresó.
Cabe destacar que en lo corrido de 2022, de acuerdo con la Delegación Departamental de Bomberos de Cundinamarca y su informe preliminar de la temporada de lluvias, se han presentado 447 eventos en 102 municipios de Cundinamarca.
Uno de los casos más recientes fue la muerte de dos mujeres, de 21 y 18 años, por la creciente del río Calandaima, en Viotá, mismo municipio en el que se presentó un deslizamiento de tierra en abril de este año y dejó decenas de familias sin hogar y cinco personas muertas.
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