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Tras el atentado del que fue víctima la Escuela General Santander, en Bogotá, los protocolos de seguridad se hicieron más estrictos. Y producto de esta situación, fue que este jueves se ordenó la evacuación de las instalaciones, por una sospecha de artefacto explosivo.
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Según las autoridades, tras la inspección a un camión de basura que llegó a la institución, uno de los perros antiexplosivos que revisaba el vehículo se sentó, acción a través de la cual el animal comunica haber olfateado un elemento extraño.
Esto llevó a que se activara de inmediato el protocolo antiexplosivo, que se reforzó tras el atentado que sufrió la institución en enero de 2019 y en el que murieron 21 personas y 68 más resultaron heridas. Dicho protocolo contempla evacuar parte de las instalaciones, mientras se adelantan labores de verificación.
Informamos
— Policía Metropolitana de Bogotá (@PoliciaBogota) June 29, 2023
Ante la alerta de un posible explosivo en la Dirección de Educación Policial, nos permitimos aclarar que después de la verificación y el protocolo adelantado por el grupo antiexplosivos, se descarta cualquier amenaza que pueda afectar la tranquilidad de la ciudadanía.
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En este caso, el camión de basuras se revisó en detalle y, al final, encontraron que se trató de una falsa alarma y descartaron la presencia de explosivos. Tras el parte de tranquilidad, se retomaron las actividades con normalidad.
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