El delito de lesiones personales aumentó en un 19,1 % en la ciudad respecto al año anterior. / Liz Durán
Foto: Liz Durán
La intolerancia, que termina en violencia, es pan de cada día en Bogotá y ejemplos hay de sobra. Por ejemplo, hoy en un hospital se recupera un hombre, luego de recibir tres disparos, tras un hecho de intolerancia, en la localidad de Ciudad Bolívar, luego de que otro vecino le reclamara por no recoger los excrementos de su perro. El agresor, quien tenía antecedentes por tentativa de homicidio, fue detenido.