Bogotá debe disminuir cifras de pobreza extrema, con IMG el Distrito enfrenta el desafío

Según cifras del DANE, 2′209.957 personas vivían en condición de pobreza monetaria y de estas 637.000 vivían bajo pobreza extrema en 2022 en Bogotá. Y aunque la cifra muestra un avance frente a 2021, cuando la cifra llegó a 2′392.333, la ciudad no logra disminuir las cifras de pobreza que tenía en 2019, antes de la pandemia. Así lo resalta Juan Daniel Oviedo, exdirector del DANE y ahora concejal de Bogotá, quien agrega que estas cifras “significan que, a pesar de la importancia de la recuperación económica de Bogotá en 2022 y que estuvo sobre la misma línea del crecimiento total del país, superior al 7,7 %, la capital aún tiene muy afectadas sus cifras de pobreza y pobreza monetaria extrema”.

Según cifras del DANE, 2′209.957 personas vivían en condición de pobreza monetaria y de estas 637.000 vivían bajo pobreza extrema en 2022 en Bogotá. Y aunque la cifra muestra un avance frente a 2021, cuando la cifra llegó a 2′392.333, la ciudad no logra disminuir las cifras de pobreza que tenía en 2019, antes de la pandemia. Así lo resalta Juan Daniel Oviedo, exdirector del DANE y ahora concejal de Bogotá, quien agrega que estas cifras “significan que, a pesar de la importancia de la recuperación económica de Bogotá en 2022 y que estuvo sobre la misma línea del crecimiento total del país, superior al 7,7 %, la capital aún tiene muy afectadas sus cifras de pobreza y pobreza monetaria extrema”.

Leer: El lío de expandir Bogotá al norte

Oviedo recuerda que cuando se menciona pobreza monetaria se está hablando de insuficiencia alimentaria, es decir, aquellos hogares que no tienen el dinero suficiente para garantizar que todos sus miembros puedan consumir al menos 2.100 calorías al día para no caer en malnutrición.

“Históricamente, antes de la pandemia, Bogotá tenía entre el 3.4 y el 4 % de la población en esa condición de insuficiencia alimentaria o en pobreza extrema. En 2022, a pesar del crecimiento económico después de la pandemia, todavía veíamos a esa población en pobreza, es decir, la incidencia sigue siendo del doble”, agregó el concejal.

Frente a este panorama, la pasada administración implementó el programa de Ingreso Mínimo Garantizado (IMG), el cual se basa en unas transferencias mensuales de dinero a estos hogares pobres para disminuir los índices de pobreza en la capital.

Hoy, con la nueva administración del alcalde Carlos Fernando Galán, los giros continúan. Asimismo, vienen con una serie de cambios que anunció el mandatario junto al secretario de Integración Social, Roberto Angulo, algo que para Oviedo es fundamental, ya que a pesar de las “buenas cifras de recuperación económica y del mercado laboral”, la ciudad sigue en alerta frente a las cifras de pobreza.

Cambios en IMG

A partir de la noche del 15 de enero inició el primer ciclo de las transferencias de Ingreso Mínimo Garantizado de la alcaldía de Galán, quien mencionó que la apuesta durante su administración para llegarle a la población pobre “es que esa estrategia se mantenga. Es construir sobre lo construido. Vamos a llegar a cerca de 454.00 hogares este año, entre el Gobierno Distrital y el Nacional”.

El alcalde informó que la fuente de financiación de IMG será del 68% a manos del Distrito, y el resto a través del Gobierno Nacional y los Fondos de Desarrollo Local.

“También este esfuerzo busca mantener esa coordinación que ha sido muy importante con el sector privado, aquí están presentes las entidades financieras y las que nos han ayudado a llegarle a esa población, que a través de ese proceso ha tenido la posibilidad de avanzar en inclusión financiera y está avanzando en una bancarización”, agregó Galán.

De acuerdo con el mandatario, en su administración quieren abrirle camino a esta población para que logre integrarse en el sistema financiero, que tengan recursos económicos y posteriormente puedan acceder a un crédito.

Esto, a través del aumento de beneficiados y del monto. “Vamos a llegar en total a 1.513.000 personas en Bogotá este 2024. Es un aumento de un 7.5% de la inversión que hace el Distrito y creemos que esto es una herramienta poderosa que reconoce lo que se hizo y se mantiene y se fortalece en esta nueva etapa”.

Por su parte, el secretario de Integración Social, Roberto Angulo, informó serán 454.000 los hogares que se van a ver beneficiados con este programa. Con una inversión total de 59.000 millones de pesos, es decir, 8.000 millones más de lo que se giró en diciembre de 2023.

“Vamos a fortalecer el sistema y a pesar de que la inflación ya empezó a ceder, sigue siendo alta, las condiciones del crecimiento no son las mejores, entonces esta herramienta tiene que existir para poder mitigar esos ingresos de los hogares pobres en Bogotá, por eso le estamos robusteciendo, ampliando, tanto en personas como en monto”, agregó Angulo.

Y mencionó que este 2024 esperan invertir 484.000 millones de pesos desde Bogotá y 122.000 millones desde los Fondos de Desarrollo Local, “para un total de 606.000 millones de pesos en todo el año y lograr un incremento de 7% con respecto a la inversión del año anterior”, agregó.

Asimismo, recalcó que la administración estaría apostándole a sacar de la pobreza extrema a 176.000 personas, que equivalen a la población del municipio de Riohacha.

Finalmente, agregó que el programa de IMG va dirigido a la población pobre de Bogotá, incluida la de pobreza extrema, que esté en el nivel A y B del Sisbén.

“Mientras la persona sea registrada como pobre, va a poder estar en el ingreso mínimo garantizado, nosotros acá escaneamos cuáles son todas las transferencias que la persona recibe, tanto de la Nación como del Distrito, medimos el tamaño del hogar y con base en eso giramos unos montos que oscilan entre $60.000 que es para un hogar unipersonal de nivel B, a $860.000 que es un hogar de cinco personas en pobreza extrema”, agregó el secretario.

No olvidar la población Vulnerable

Aunque el concejal Juan Daniel Oviedo menciona que es completamente necesario y positivo que la ciudad siga con el programa. Recalca que “los esfuerzos de mitigación de pobreza todavía llevan a que las personas que todavía no entran a la pobreza se acumulen en una clase social llamada población vulnerable, la cual creció en 2022 en 192.000 personas, y en ese año registramos en total 1′200.000 personas en esa clase social, quienes quedan en la mitad de la pobreza y la clase media”.

Y para este sector de la población, “se requiere que todo el sistema de transferencias sociales del Distrito tengan un ejercicio de focalización, pero además, un esfuerzo significativo para promover la generación de empleo, porque en una ciudad como Bogotá, desafortunadamente, la relación entre el ingreso de per cápita de la unidad de gasto y la línea de pobreza extrema cambió de forma significativa”, dijo el exdirector del Dane.

Y reconoció que “las transferencias monetarias que se generaron en pandemia fueron sustanciales para evitar que más personas cayeran en la pobreza no solo por la baja dinámica de crecimiento, sino ahora por el comportamiento de los precios”.

Esto, teniendo en cuenta que en 2022 y 2023 “tuvimos unas situaciones por fuera de lo que se veía en Colombia en temas de inflación, que tradicionalmente se conoce como el impuesto de los pobres porque afecta más a los hogares en situación de pobreza y vulnerabilidad”, dijo Oviedo.

Finalmente, el concejal cree que el programa y la articulación entre el Gobierno Distrital y Nacional es acertada, ya que va a incidir positivamente en el problema que la ciudad no ha logrado resolver, y es la herencia de la pandemia en materia de pobreza extrema y monetaria, la cual actualmente está alejada de las cifras que históricamente ha registrado la capital en años anteriores.

Sin embargo, esto no deja de lado el esfuerzo que tendrá que hacer la administración en la generación de empleo. Ya que, según Oviedo, la ciudad debe sí o sí crear, al menos, 280.000 nuevos puestos de trabajo, los cuales generarían ingresos para 900.000 personas y de esta manera, sacar la población de la pobreza extrema.

Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.