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La Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) ordenó la suspensión inmediata de las actividades de explotación a dos canteras ubicadas en el municipio de San Francisco y a una recebera, en Villeta, las cuales operaban sin los debidos permisos.
De acuerdo con el informe técnico realizado por la Dirección Regional Gualivá de la CAR, la primera cantera, ubicada en la vereda Toriba del municipio de San Francisco, afectó un área de 1.500 m², donde se extrajeron 5.650 m³ de materiales de construcción. La segunda cantera, situada en la vereda El Peñón, también en San Francisco, intervino un área de 1.600 m², donde extrajeron 6.000 m³ de recebo.
Finalmente, en la tercera cantera que operaba en la vereda Alto de Torres del municipio de Villeta, la autoridad ambiental señaló que se estarían extrayendo volúmenes de aproximadamente 480 m³, de material de construcción.
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“Estas canteras estaban ocasionando graves afectaciones a los recursos naturales, especialmente al suelo, al paisaje y a la fauna, por lo cual avanzaremos con los debidos procesos sancionatorios a los responsables”, sentenció el director regional Gualivá, Gratiniano Suárez.
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