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Este fin de semana, la Agencia Presidencial de Cooperación de Corea (KOICA) junto a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca, anunciaron el inicio de un estudio de factibilidad para llevar a cabo un proyecto que busca, a través de herramientas de Inteligencia Artificial, realizar un seguimiento detallado en tiempo real que permita detectar y gestionar de una manera más eficiente los factores de riesgo asociados a la compleja situación de contaminación del río Bogotá.
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De ser aprobado, el proyecto común, contaría con una inversión cercana a los 15 millones de dólares por parte de KOICA y un aporte que oscila entre los dos y tres millones de dólares, que serán entregados por la CAR. El proyecto está pensado para desarrollarse en cuatro fases a lo largo de tres años, con una finalización prevista para el 2027.
“Se trata de un proyecto innovador que nos permitirá fortalecer la infraestructura de monitoreo de la cuenca del río Bogotá, que ya cuenta con 25 estaciones distribuidas desde el nacimiento en Villapinzón hasta su desembocadura en el río Magdalena”, explicó el director de la CAR, Alfred Ignacio Ballesteros.
El proyecto
La iniciativa incluye la implementación de un sistema de monitoreo en tiempo real basado en inteligencia artificial, lo que permitirá detectar y gestionar de manera más eficiente las fuentes de contaminación. Además, se diseñará un mapa de seguridad del recurso hídrico, fundamental para la prevención y la gestión del riesgo en los puntos críticos de la cuenca.
“Un componente clave de este proyecto es la construcción de un centro de telemonitoreo propio, que integrará datos de calidad hídrica, sensores de caudal, nodos de cámaras y condiciones climatológicas, proporcionando una visión integral de la cuenca”, señala la CAR.
Por otro lado, el estudio de prefactibilidad, que empezó en octubre de este año y se extenderá hasta abril de 2025, tiene un presupuesto estimado de $2.000 millones que cubre la capacitación y transferencia de conocimientos a los funcionarios de la CAR que se encargarán de direccionar el proyecto por parte de expertos coreanos.
La idea está inspirada en las experiencias de éxito que ha tenido Corea del Sur. Allí, con métodos basados en Inteligencia Artificial, han logrado mejorar los niveles de tratamiento de agua hasta en un 52%, señala la entidad, hecho que garantiza agua de mejor calidad y métodos de intervención integrales con altas probabilidades de éxito. Con esto se espera, además, que los resultados obtenidos sirvan como base para fortalecer las políticas públicas del departamento enfocadas en la gestión y protección de los recursos hídricos.
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