Ana María Castro había iniciado estudios de Psicología y auxiliar de enfermería. / Cortesía
Un año y medio después de que Nidia Romero tuviera que despedir para siempre a la menor de sus dos hijas —Anita, como la llamaba cariñosamente—, las preguntas sin resolver tras los hechos que conllevaron a su muerte siguen siendo un misterio para la justicia. El proceso penal ha tenido varios tropiezos, pues la audiencia preparatoria ha sido aplazada cuatro veces, previa al inicio del juicio contra Paul Naranjo y Julián Ortegón, a quienes la Fiscalía acusa de feminicidio agravado.