Conductor involucrado en accidente de Julián Esteban Gómez está en libertad
Julián Esteban Gómez era un joven ciclista recordado por celebrar con lágrimas el triunfo de Egan Bernal en el Tour de Francia. El domingo, mientras entrenaba con su tío en una carretera de Cundinamarca, una tractomula acabo con su sueño de ser ciclista profesional.
El pasado domingo, Julián Esteban Gómez madrugó en compañía de su tío, Guillermo Caicedo, y otros amantes del ciclismo para realizar la jornada de entrenamiento de ese día. Cuando transitaban en la vía que conduce de Zipaquirá a Chía, según el tío del menor, un conductor de tractomula comenzó a pitarles y no respetó la distancia mínima de 1,5 metros que se debe tener con los ciclistas.
El joven, asustado por el sonido de la corneta y la cercanía del vehículo de carga, perdió el control de su cicla y cayó al piso. Por la proximidad que tenía la tractomula con el pequeño ciclista, al caer, perdió la vida. Guillermo Caicedo, tío del joven, asegura que el conductor fue el culpable por su intolerancia y agresividad al conducir, de igual forma, no prestó los servicios de atención y prefirió bajarse a pelear con los ciclistas que acompañaban al niño por no usar las ciclorrutas.
Vea: Murió Julián, el niño que soñaba ser como Egan Bernal.
“Venía como un loco desde atrás, nos venía pitando. Llegamos a los reductores a la entrada de Manas, bajó la velocidad para pasar los reductores, pero seguía arrimándonos el carro. Ahí fue donde sucedió el accidente”, manifestó Caicedo.
Por las velocidades y el tipo de entrenamiento que realizan los ciclistas, según el pariente del menor, los deportistas no pueden utilizar la ciclorruta, pues la alta velocidad que se maneja y las estrechas vías no permiten un entrenamiento óptimo y pueden poner en riesgo la integridad de los peatones. Sin embargo, asegura que el hecho de que los ciclistas usen la vía vehicular no es razón para que los conductores manejen sus vehículos de forma intimidante.
“No le gustó que fuéramos por la carretera, no sé qué tendrá en la cabeza este señor. Nos empezó a arrimar la mula y a acosarnos con las cornetas. Por supuesto que nosotros nos pusimos nerviosos. El niño se puso muy nervioso y él perdió el control de la bicicleta y se le fue por debajo de la tractomula”, dijo el tío del menor.
Luego del accidente, y por la actitud agresiva del conductor, varios ciclistas llegaron al sector para apoyar a la familia del joven y contrarrestar las agresiones del posible victimario. La tractomula quedó inmovilizada mientras que el conductor fue llevado a una unidad de Reacción Inmediata (URI) para iniciar las investigaciones, no obstante, el conductor quedó en libertad, pero sigue vinculado al proceso.
El alcalde de Zipaquirá, Wilson García Fajardo, compartió su solidaridad con la familia de Julián y compartió que, gracias al talento y compromiso del niño estaba seleccionado por el Ministerio de Deporte para integrar el programa “Talentos Colombia”. Asimismo, por su pasión y entrega al ciclismo, el joven hacía parte del programa “Zipaquirá Tierra de Campeones”.
El pasado domingo, Julián Esteban Gómez madrugó en compañía de su tío, Guillermo Caicedo, y otros amantes del ciclismo para realizar la jornada de entrenamiento de ese día. Cuando transitaban en la vía que conduce de Zipaquirá a Chía, según el tío del menor, un conductor de tractomula comenzó a pitarles y no respetó la distancia mínima de 1,5 metros que se debe tener con los ciclistas.
El joven, asustado por el sonido de la corneta y la cercanía del vehículo de carga, perdió el control de su cicla y cayó al piso. Por la proximidad que tenía la tractomula con el pequeño ciclista, al caer, perdió la vida. Guillermo Caicedo, tío del joven, asegura que el conductor fue el culpable por su intolerancia y agresividad al conducir, de igual forma, no prestó los servicios de atención y prefirió bajarse a pelear con los ciclistas que acompañaban al niño por no usar las ciclorrutas.
Vea: Murió Julián, el niño que soñaba ser como Egan Bernal.
“Venía como un loco desde atrás, nos venía pitando. Llegamos a los reductores a la entrada de Manas, bajó la velocidad para pasar los reductores, pero seguía arrimándonos el carro. Ahí fue donde sucedió el accidente”, manifestó Caicedo.
Por las velocidades y el tipo de entrenamiento que realizan los ciclistas, según el pariente del menor, los deportistas no pueden utilizar la ciclorruta, pues la alta velocidad que se maneja y las estrechas vías no permiten un entrenamiento óptimo y pueden poner en riesgo la integridad de los peatones. Sin embargo, asegura que el hecho de que los ciclistas usen la vía vehicular no es razón para que los conductores manejen sus vehículos de forma intimidante.
“No le gustó que fuéramos por la carretera, no sé qué tendrá en la cabeza este señor. Nos empezó a arrimar la mula y a acosarnos con las cornetas. Por supuesto que nosotros nos pusimos nerviosos. El niño se puso muy nervioso y él perdió el control de la bicicleta y se le fue por debajo de la tractomula”, dijo el tío del menor.
Luego del accidente, y por la actitud agresiva del conductor, varios ciclistas llegaron al sector para apoyar a la familia del joven y contrarrestar las agresiones del posible victimario. La tractomula quedó inmovilizada mientras que el conductor fue llevado a una unidad de Reacción Inmediata (URI) para iniciar las investigaciones, no obstante, el conductor quedó en libertad, pero sigue vinculado al proceso.
El alcalde de Zipaquirá, Wilson García Fajardo, compartió su solidaridad con la familia de Julián y compartió que, gracias al talento y compromiso del niño estaba seleccionado por el Ministerio de Deporte para integrar el programa “Talentos Colombia”. Asimismo, por su pasión y entrega al ciclismo, el joven hacía parte del programa “Zipaquirá Tierra de Campeones”.