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Con el fin de que representantes de varios colegios del Distrito expusieran ante las autoridades competentes sus observaciones, comentarios, quejas y experiencias con el Programa de Alimentación Escolar PAE que se ofrece en los centros educativos públicos de la capital, en las últimas horas se llevó a cabo una Mesa Técnica de discusión de los detalles del programa en medio de los ejercicios de control que adelanta la Contraloría de Bogotá.
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En la mesa de discusión estuvieron presentes funcionarios de la Secretaría de Educación y de las direcciones de Educación y Participación Ciudadana de la Contraloría distrital. Durante la jornada, los contralores estudiantiles presentaron en detalle el panorama de experiencias con el PAE en las diferentes localidades de la ciudad con el fin de hallar vacíos o debilidades que puedan fortalecer la prestación del servicio de alimentación escolar.
“Los estudiantes fueron escuchados, se analizaron sus comentarios y se tomó atenta nota por parte de las autoridades y la Secretaría de Educación para implementar acciones de mejora en cuanto a la calidad, cantidad y oportunidad de estas importantes raciones alimentarias”, señaló el director del sector Educación de la Contraloría, Andrés Rojas.
Por nuestra parte, la Contraloría de Bogotá, desde la Dirección Sectorial de Educación, continuará realizando los ejercicios de vigilancia y control fiscal en la gestión del PAE”, puntualizó.
El PAE
Se estima que actualmente el PAE se encarga de asegurar la entrega diaria de más de 840.000 raciones de alimentos a estudiantes de instituciones públicas de la ciudad, garantizando comidas calientes y refrigerios escolares a lo largo de todo el calendario escolar.
Recientemente, en julio de este año, el programa fue a los colegios Tomás Carrasquilla y Rafael Bernal Jiménez, en donde se llevaron a cabo pruebas organolépticas de menús especiales. Estos testeos contaron con la participación activa de representantes estudiantiles y voluntarios (miembros de las instituciones), los cuales evaluaron aspectos como el sabor, olor, color y textura de los alimentos. Sus opiniones fueron cruciales para realizar ajustes como la combinación de jugos, la reducción de sazonadores naturales y la disminución de aceite en algunas preparaciones, mejorando así la calidad y aceptación de los menús.
Para el buen desarrollo del programa, el PAE ha desarrollado ocho menús especiales para desayuno y otros ocho para almuerzo, rotándolos mensualmente para ofrecer variedad y asegurar una experiencia culinaria agradable. Además, se seleccionaron menús especiales para fechas emblemáticas como el Día de la Niñez y el Día Mundial de la Alimentación, por ejemplo. Estos menús están diseñados para cumplir con los estándares de energía y nutrientes establecidos en la Resolución 335 de 2021 de la Unidad Administrativa Especial de Alimentación Escolar, asegurando así una alimentación balanceada y nutritiva para el estudiantado beneficiado.
El programa también se beneficia de la retroalimentación continua proporcionada por los Comités de Alimentación Escolar y las encuestas de percepción estudiantil. Durante las pruebas sensoriales, estudiantes del colegio Rafael Bernal Jiménez trabajaron junto a un equipo técnico del PAE, incluyendo nutricionistas, chefs e ingenieros de alimentos, quienes evaluaron la calidad de las preparaciones y productos.
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