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En las últimas horas, se han conocido más detalles del caso judicial más mediático del momento. Durante la audiencia de medida de aseguramiento a Andrés Camilo Sotelo, imputado por el homicidio de Juan Felipe Rincón, hijo del inspector general de Policía, William Rincón, se revelaron los pormenores del informe de necropsia practicado al occiso de 21 años.
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De acuerdo con el informe citado en la audiencia, además de las heridas por arma de fuego, el cuerpo del joven tenía lesiones en el tórax, espalda, brazo izquierdo, e incluso en la cabeza. Dichas lesiones, con base en el sumario de la Fiscalía, le habrían sido propinadas por el hoy imputado Andrés Camilo Sotelo.
Estos golpes, además, se produjeron minutos antes de que la bala del revolver, incautada a Sotelo por las autoridades, atravesara el tórax del occiso y le quitara la vida. Sin embargo, pese a la herida de bala que encontraron los peritos forenses en la zona señalada, no se encontró ningún tipo de proyectil en el cuerpo de Juan Felipe Rincón.
En vista de lo anterior, el informe forense se alineó con la teoría de la Fiscalía, en la cual se señala que Sotelo citó al hijo del general al lugar en donde ocurrieron los hechos, para agredirlo en compañía de otros dos individuos. En medio de la disputa, el presunto homicida atacó al occiso con perros de raza rottwailer y hasta lo habría golpeado con la cacha del revolver.
Este último detalle explicaría, por ejemplo, el porqué el revolver con el cual fue asesinado Juan Felipe Rincón no contaba con el tambor al momento de ser incautado. Sin embargo, el decomiso de esta arma, es elemento que más controversia ha suscitado durante el proceso.
Esto, debido a que, mientras la Fiscalía sostiene que el arma fue entregada por la propia esposa de Sotelo a los uniformados de la Policía que atendieron el caso, la defensa del imputado sostiene que dicho revolver fue introducido de manera arbitraria. Se espera que sobre las nueve de la noche de este miércoles, 27 de noviembre, Andrés Camilo Sotelo sea cobijado con medida de aseguramiento intramural y, por lo tanto, deba enfrentar todas las fases del proceso recluido en un centro penitenciario.
Homicidio de Juan Felipe Rincón
Cerca del mediodía del domingo 24 de noviembre, Juan Felipe Rincón fue asesinado en un confuso hecho ocurrido en la calle 32 sur con carrera 23, en el barrio Quiroga, en la localidad de Rafael Uribe Uribe, sur de la capital del país. De acuerdo con las primeras versiones que manejan las autoridades, el joven de 21 años se encontraba en las calles del sector en compañía de otra joven, al parecer menor de edad, y un integrante de su grupo de escoltas.
Todo transcurría en el marco de la normalidad hasta que otras personas, (según el testimonio de la testigo, familiares de las menores de edad) abordaron a la pareja. En este punto, todavía no es claro las causas que motivaron la confrontación del hijo del alto mando policial con estos sujetos. La hipótesis principal apunta a una riña entre el occiso y los otros involucrados como el desencadenante del asesinato. Sin embargo, las autoridades también trabajan con la hipótesis de un posible intento de robo que, con el paso de las horas, pierde fuerza.
Uno de los heridos es un integrante de la escolta del joven fallecido quien, en medio del ataque, reaccionó con su arma de dotación para cuidar a su protegido y en ese intercambio de disparos resultó lesionado.
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