Debate por ‘paras’
Pese a que las autoridades niegan que haya autodefensas en la capital, los testimonios de los ciudadanos aseguran lo contrario.
El Espectador
Este jueves, en el Concejo de Bogotá, se abrirá públicamente el debate sobre la situación de paramilitarismo en la capital. Pese a que para las autoridades distritales la situación de seguridad sigue mejorando, los concejales Carlos Vicente de Roux y Jaime Caicedo, del Polo Democrático, aseguran que en la ciudad se presentan fenómenos visibles de amenazas a la seguridad, producto de grupos armados ilegales.
Según un informe de la Defensoría del Pueblo dirigido al concejal Caicedo, en donde se brinda información sobre las bandas de grupos ilegales armados en Bogotá, en el Distrito hacen presencia grupos provenientes del paramilitarismo.
De acuerdo con la información de las comunidades afectadas, estos grupos se han autodenominado en varias circunstancias como Bloque Central Santander, Bloque Central Bolívar, Bloque Cacique Nutibara, Autodefensas Unidas de Colombia Nueva Generación, Los Urabeños y Las Águilas Negras.
Según el mismo informe, estos grupos armados se encuentran en las localidades de Chapinero, San Cristóbal, Santa Fe, Rafael Uribe Uribe, Teusaquillo, Usme, Ciudad Bolívar, Bosa, Kennedy y, últimamente, en la de Suba. Estos grupos se lucran a través de flujos financieros que provienen de negocios ilegales, como el lavado de activos y el narcotráfico. También se pudo establecer que algunas localidades son utilizadas para hacer negocios de diversa índole, como prostíbulos, bares, moteles y residencias.
Según el concejal Caicedo, el debate se realizará como producto de la preocupante discrepancia entre los enfoques sobre la seguridad que tienen las autoridades locales y las situaciones que se están presentando en las diferentes localidades. “Nos parece que existen una serie de políticas distritales que violan el Derecho Internacional Humanitario. Lo que vamos a hacer en el debate es plantear una reflexión sobre el enfoque que se le ha dado a estos casos, porque además de paramilitares también tenemos casos de desaparición forzada y amenazas por diferentes razones”.
Según la Defensoría del Pueblo, los habitantes de Ciudad Bolívar son los más afectados con esta situación. Estos grupos, por lo general, establecen cuotas por prestarle el servicio de seguridad a comerciantes, propietarios de tiendas, conductores de transporte público y dueños de almacenes mayoristas.
Los ciudadanos también han reportado que los miembros de estos grupos ilegales se dedican a intimidar a líderes sociales y comunitarios y en ocasiones han atentado contra la vida de los supuestos simpatizantes de grupos contendientes o de bandas de delincuencia común y organizada.
Frente al tema, el General Rodolfo Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, y citado al debate, dijo: “Hay algunos casos relativamente aislados donde aparecen algunos sujetos entregando o distribuyendo unos panfletos en donde amenazan a las comunidad. Hemos hecho todas las indagaciones, no solamente desde el nivel comando, sino en las mismas localidades con la comunidad”. Explicó que las amenazas están relacionadas con intimidaciones que tienen como fin la venta de estupefacientes.
el miércoles, durante el balance de los primeros seis meses de la administración de Samuel Moreno, el alcalde afirmó que en comparación con el año pasado han mejorado las condiciones de seguridad en la capital. “En este primer semestre hemos tenido 11 homicidios menos. De esos 670 casos que se presentaron pudimos atrapar a la mitad de los agresores gracias a la colaboración de la ciudadanía. Además, pudimos identificar que los homicidios no tenían que ver con la inseguridad, sino con la intolerancia de los capitalinos y, en algunos casos, por causa de episodios de celos”.
Moreno afirmó también, que pese a la reducción de cifras, los bogotanos tienen una percepción negativa de la seguridad de la ciudad.
Entre tanto, los concejales De Roux y Caicedo se mantienen firmes en su tesis de que en Bogotá la existencia de grupos paramilitares es un hecho real y comprobable. “No podemos seguir pensando en la inexistencia de estos fenómenos, cuando la realidad al interior de las localidades es evidente. La gente tiene miedo, está amenazada y además extorsionada”, dijo Caicedo.
Mañana a las nueve de la mañana en el Cabildo Distrital comenzará el debate sobre la real situación de seguridad de la capital. Entre los citados se encuentran el personero distrital, Francisco Rojas Birry, y la secretaria de Gobierno, Clara López Obregón.
Defensoría dice:
“No obstante los pronunciamientos oficiales sobre la inexistencia de estos grupos ilegales en la ciudad, las quejas recibidas de pobladores de diferentes localidades indican que estos grupos armados al margen de la ley hacen presencia en la ciudad de variadas formas, todas ellas orientadas a capitalizar la herencia dejada por las Auc en su proceso de desmovilización. Cometen hechos de violencia contra la población civil, entre otros, amenazas, desplazamientos forzados, homicidios selectivos, reclutamientos forzados, extorsiones, entre otros”.
Este jueves, en el Concejo de Bogotá, se abrirá públicamente el debate sobre la situación de paramilitarismo en la capital. Pese a que para las autoridades distritales la situación de seguridad sigue mejorando, los concejales Carlos Vicente de Roux y Jaime Caicedo, del Polo Democrático, aseguran que en la ciudad se presentan fenómenos visibles de amenazas a la seguridad, producto de grupos armados ilegales.
Según un informe de la Defensoría del Pueblo dirigido al concejal Caicedo, en donde se brinda información sobre las bandas de grupos ilegales armados en Bogotá, en el Distrito hacen presencia grupos provenientes del paramilitarismo.
De acuerdo con la información de las comunidades afectadas, estos grupos se han autodenominado en varias circunstancias como Bloque Central Santander, Bloque Central Bolívar, Bloque Cacique Nutibara, Autodefensas Unidas de Colombia Nueva Generación, Los Urabeños y Las Águilas Negras.
Según el mismo informe, estos grupos armados se encuentran en las localidades de Chapinero, San Cristóbal, Santa Fe, Rafael Uribe Uribe, Teusaquillo, Usme, Ciudad Bolívar, Bosa, Kennedy y, últimamente, en la de Suba. Estos grupos se lucran a través de flujos financieros que provienen de negocios ilegales, como el lavado de activos y el narcotráfico. También se pudo establecer que algunas localidades son utilizadas para hacer negocios de diversa índole, como prostíbulos, bares, moteles y residencias.
Según el concejal Caicedo, el debate se realizará como producto de la preocupante discrepancia entre los enfoques sobre la seguridad que tienen las autoridades locales y las situaciones que se están presentando en las diferentes localidades. “Nos parece que existen una serie de políticas distritales que violan el Derecho Internacional Humanitario. Lo que vamos a hacer en el debate es plantear una reflexión sobre el enfoque que se le ha dado a estos casos, porque además de paramilitares también tenemos casos de desaparición forzada y amenazas por diferentes razones”.
Según la Defensoría del Pueblo, los habitantes de Ciudad Bolívar son los más afectados con esta situación. Estos grupos, por lo general, establecen cuotas por prestarle el servicio de seguridad a comerciantes, propietarios de tiendas, conductores de transporte público y dueños de almacenes mayoristas.
Los ciudadanos también han reportado que los miembros de estos grupos ilegales se dedican a intimidar a líderes sociales y comunitarios y en ocasiones han atentado contra la vida de los supuestos simpatizantes de grupos contendientes o de bandas de delincuencia común y organizada.
Frente al tema, el General Rodolfo Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, y citado al debate, dijo: “Hay algunos casos relativamente aislados donde aparecen algunos sujetos entregando o distribuyendo unos panfletos en donde amenazan a las comunidad. Hemos hecho todas las indagaciones, no solamente desde el nivel comando, sino en las mismas localidades con la comunidad”. Explicó que las amenazas están relacionadas con intimidaciones que tienen como fin la venta de estupefacientes.
el miércoles, durante el balance de los primeros seis meses de la administración de Samuel Moreno, el alcalde afirmó que en comparación con el año pasado han mejorado las condiciones de seguridad en la capital. “En este primer semestre hemos tenido 11 homicidios menos. De esos 670 casos que se presentaron pudimos atrapar a la mitad de los agresores gracias a la colaboración de la ciudadanía. Además, pudimos identificar que los homicidios no tenían que ver con la inseguridad, sino con la intolerancia de los capitalinos y, en algunos casos, por causa de episodios de celos”.
Moreno afirmó también, que pese a la reducción de cifras, los bogotanos tienen una percepción negativa de la seguridad de la ciudad.
Entre tanto, los concejales De Roux y Caicedo se mantienen firmes en su tesis de que en Bogotá la existencia de grupos paramilitares es un hecho real y comprobable. “No podemos seguir pensando en la inexistencia de estos fenómenos, cuando la realidad al interior de las localidades es evidente. La gente tiene miedo, está amenazada y además extorsionada”, dijo Caicedo.
Mañana a las nueve de la mañana en el Cabildo Distrital comenzará el debate sobre la real situación de seguridad de la capital. Entre los citados se encuentran el personero distrital, Francisco Rojas Birry, y la secretaria de Gobierno, Clara López Obregón.
Defensoría dice:
“No obstante los pronunciamientos oficiales sobre la inexistencia de estos grupos ilegales en la ciudad, las quejas recibidas de pobladores de diferentes localidades indican que estos grupos armados al margen de la ley hacen presencia en la ciudad de variadas formas, todas ellas orientadas a capitalizar la herencia dejada por las Auc en su proceso de desmovilización. Cometen hechos de violencia contra la población civil, entre otros, amenazas, desplazamientos forzados, homicidios selectivos, reclutamientos forzados, extorsiones, entre otros”.