Decreto regula Bogotá a Cielo Abierto, restaurantes deberán pagar el uso de andenes
La Alcaldía de Bogotá expidió el decreto 070 de 2022 que le da vía libre al programa ´Bogotá a Cielo Abierto 2.0´, el cual a partir de hoy es permanente. Las zonas que ya operaban bajo este modelo tendrán hasta el primero de julio de 2022 para cumplir con los nuevos requisitos.
La Secretaría de Desarrollo Económico compartió con El Espectador el nuevo decreto 070 de 2022, expedido por la Alcaldía de Bogotá, el cual vuelve permanente el programa de Bogotá a Cielo Abierto. De acuerdo con la entidad del Distrito, esta decisión se toma después de llevar a cabo varias mesas de concertación y socialización de este proceso con el sector gastronómico.
Ya con el decreto, se da vía libre para que ahora el programa sea “Bogotá a Cielo Abierto 2.0″, el cual debe garantizar que peatones y comerciantes puedan compartir el uso público, para La Secretaría de Desarrollo, esto “impulsa la inclusión social de la población vulnerable en dos formas: la primera, permitiendo el desarrollo organizado de sus actividades a vendedores informales y artistas callejeros; la segunda, por medio de la formalización laboral, a esta población”.
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De acuerdo con el decreto, “las actividades susceptibles de aprovechamiento económico son:
- Bogotá a Cielo Abierto 2.0 - Gastronomía: Son las actividades que ocupan temporalmente el espacio público para la prestación de servicios de establecimientos de comercio asociados al sector gastronómico de acuerdo con los criterios definidos en el presente decreto.
- Bogotá a Cielo Abierto 2.0 - Food Trucks: Ocupación temporal del espacio público, donde se autorizará de manera transitoria la venta de alimentos preparados, en vehículos o camiones tipo “Food Trucks”.
- Actividades complementarias: Son aquellas actividades adicionales que se desarrollan como complemento de la estrategia “Bogotá a Cielo Abierto 2.0″, que se encuentran reguladas por el Decreto Distrital 552 de 2018 y que pueden ubicarse dentro del mismo espacio público de manera coordinada, teniendo en cuenta la capacidad de carga de este. Estas pueden ser entre otras las siguientes: artistas en Espacio Público, filmación de obras audiovisuales, actividades recreativas, y promoción de actividades cívicas e institucionales.
Estas actividades podrán llevarse a cabo con la instalación de mobiliario itinerante, sin generar cerramientos que obstaculicen el tránsito vehicular y peatonal, bajo los criterios de razonabilidad, protección al peatón y a las personas con movilidad reducida, respeto a los residentes, inclusión, protección al comercio formal y al patrimonio cultural, y sostenibilidad de los espacios públicos autorizados”.
¿Qué contempla el Distrito para fijar el monto a pagar de los restaurantes ubicados en estas zonas?
De acuerdo con el secretario de Desarrollo Económico, Alfredo Bateman, esa retribución dependerá de una serie de variables, “entre otras el precio comercial de la zona en que se encuentra Bogotá a Cielo Abierto, el espacio que se utilice para el aprovechamiento económico del espacio público y una variante muy importante que es el tiempo. Los comerciantes solo generarán una retribución por el tiempo efectivo del aprovechamiento del espacio público que realicen sus comercios”, dijo el secretario, quien agregó que el Departamento Administrativo de La Defensoría Del Espacio Público (DADEP) es el gestor principal de este nuevo modelo, entre otras entidades del Distrito como el IDU.
En cuanto a la secretaría de Desarrollo Económico, esta se encargará de seguir haciendo la articulación con el sector privado, para garantizar el mantenimiento de las zonas activas, e incluso a para que empiecen a funcionar otras zonas en la ciudad.
Este monto económico que pagarán los comerciantes será destinado para la reinversión en mantenimiento y mejora de andenes, parques o alamedas, iluminación, señalización y renovación del mobiliario urbano, así como la instalación de cámaras de seguridad. “Adicional a esto, si en el sector donde va a operar el modelo se evidencia que no es necesaria una intervención en el espacio público, la reinversión de los recursos se podrá realizar en otros sectores de la ciudad”, señaló esta cartera.
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En esta nueva etapa del programa, se dio también la autorización a los camiones de comida o ‘FoodTruck’. En cuanto a las 41 zonas gastronómicas que han operado desde antes bajo esta iniciativa, entrarán en una etapa de transición hasta el primero de julio de 2022 para que puedan adelantar el proceso de inscripción contemplado en el decreto (trámite que debe realizarse en el DADEP). Esta entidad hará una revisión del cumplimiento de los requisitos, y cuando sea aprobado se implementará el modelo de retribución económica.
“Con Bogotá A Cielo Abierto 2.0 estamos demostrando las bondades del espacio público y de los modelos de aprovechamiento económico con los que cuenta la ciudad. Garantizamos, no solo que se utilicen de forma correcta los andenes y las vías, para el ejercicio de una actividad económica, sino que, además, esto servirá para mejorar y mantener los entornos y vincular a la población vulnerable”, manifestó, Diana Alejandra Rodríguez Cortés, directora del DADEP.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
La Secretaría de Desarrollo Económico compartió con El Espectador el nuevo decreto 070 de 2022, expedido por la Alcaldía de Bogotá, el cual vuelve permanente el programa de Bogotá a Cielo Abierto. De acuerdo con la entidad del Distrito, esta decisión se toma después de llevar a cabo varias mesas de concertación y socialización de este proceso con el sector gastronómico.
Ya con el decreto, se da vía libre para que ahora el programa sea “Bogotá a Cielo Abierto 2.0″, el cual debe garantizar que peatones y comerciantes puedan compartir el uso público, para La Secretaría de Desarrollo, esto “impulsa la inclusión social de la población vulnerable en dos formas: la primera, permitiendo el desarrollo organizado de sus actividades a vendedores informales y artistas callejeros; la segunda, por medio de la formalización laboral, a esta población”.
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De acuerdo con el decreto, “las actividades susceptibles de aprovechamiento económico son:
- Bogotá a Cielo Abierto 2.0 - Gastronomía: Son las actividades que ocupan temporalmente el espacio público para la prestación de servicios de establecimientos de comercio asociados al sector gastronómico de acuerdo con los criterios definidos en el presente decreto.
- Bogotá a Cielo Abierto 2.0 - Food Trucks: Ocupación temporal del espacio público, donde se autorizará de manera transitoria la venta de alimentos preparados, en vehículos o camiones tipo “Food Trucks”.
- Actividades complementarias: Son aquellas actividades adicionales que se desarrollan como complemento de la estrategia “Bogotá a Cielo Abierto 2.0″, que se encuentran reguladas por el Decreto Distrital 552 de 2018 y que pueden ubicarse dentro del mismo espacio público de manera coordinada, teniendo en cuenta la capacidad de carga de este. Estas pueden ser entre otras las siguientes: artistas en Espacio Público, filmación de obras audiovisuales, actividades recreativas, y promoción de actividades cívicas e institucionales.
Estas actividades podrán llevarse a cabo con la instalación de mobiliario itinerante, sin generar cerramientos que obstaculicen el tránsito vehicular y peatonal, bajo los criterios de razonabilidad, protección al peatón y a las personas con movilidad reducida, respeto a los residentes, inclusión, protección al comercio formal y al patrimonio cultural, y sostenibilidad de los espacios públicos autorizados”.
¿Qué contempla el Distrito para fijar el monto a pagar de los restaurantes ubicados en estas zonas?
De acuerdo con el secretario de Desarrollo Económico, Alfredo Bateman, esa retribución dependerá de una serie de variables, “entre otras el precio comercial de la zona en que se encuentra Bogotá a Cielo Abierto, el espacio que se utilice para el aprovechamiento económico del espacio público y una variante muy importante que es el tiempo. Los comerciantes solo generarán una retribución por el tiempo efectivo del aprovechamiento del espacio público que realicen sus comercios”, dijo el secretario, quien agregó que el Departamento Administrativo de La Defensoría Del Espacio Público (DADEP) es el gestor principal de este nuevo modelo, entre otras entidades del Distrito como el IDU.
En cuanto a la secretaría de Desarrollo Económico, esta se encargará de seguir haciendo la articulación con el sector privado, para garantizar el mantenimiento de las zonas activas, e incluso a para que empiecen a funcionar otras zonas en la ciudad.
Este monto económico que pagarán los comerciantes será destinado para la reinversión en mantenimiento y mejora de andenes, parques o alamedas, iluminación, señalización y renovación del mobiliario urbano, así como la instalación de cámaras de seguridad. “Adicional a esto, si en el sector donde va a operar el modelo se evidencia que no es necesaria una intervención en el espacio público, la reinversión de los recursos se podrá realizar en otros sectores de la ciudad”, señaló esta cartera.
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En esta nueva etapa del programa, se dio también la autorización a los camiones de comida o ‘FoodTruck’. En cuanto a las 41 zonas gastronómicas que han operado desde antes bajo esta iniciativa, entrarán en una etapa de transición hasta el primero de julio de 2022 para que puedan adelantar el proceso de inscripción contemplado en el decreto (trámite que debe realizarse en el DADEP). Esta entidad hará una revisión del cumplimiento de los requisitos, y cuando sea aprobado se implementará el modelo de retribución económica.
“Con Bogotá A Cielo Abierto 2.0 estamos demostrando las bondades del espacio público y de los modelos de aprovechamiento económico con los que cuenta la ciudad. Garantizamos, no solo que se utilicen de forma correcta los andenes y las vías, para el ejercicio de una actividad económica, sino que, además, esto servirá para mejorar y mantener los entornos y vincular a la población vulnerable”, manifestó, Diana Alejandra Rodríguez Cortés, directora del DADEP.
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