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Hacia las 9:00 a.m. de este lunes un grupo de vecinos del humedal Juan Amarillo, ubicado entre localidades de Engativá y Suba, salió a manifestar su descontento por los planes de la Alcaldía en este lugar. El humedal, así como otros ecosistemas, serán intervenidos por el Distrito para desarrollar obras de infraestructura, por lo que los residentes del barrio Ciudadela Colsubsidio, entre ellos menores de edad y personas de la tercera edad, hicieron una protesta pacífica para evitar los senderos para transeúntes y bicicletas, y otras obras de infraestructura que se desarrollarán bajo el concepto de recreación pasiva. (LEA: Revive pulso por obras duras en los humedales de Bogotá)
A eso de las 10:30 a.m., en los alrededores del Juan Amarillo (o Tibabuyes, en lengua muisca) se instaló un enorme operativo del Distrito y la Policía. El operativo estaba compuesto por miembros del escuadrón antidisturbios (Esmad) y funcionarios de entidades como el Instituto de Recreación y Deporte (IDRD), de las secretarías de Gobierno y Seguridad.
Además de los planes de infraestructura, los vecinos del humedal salieron a protestar porque en días pasados se realizó la tala de varios árboles. Por eso cuestionaron a los funcionarios del Distrito si tiene que ver, como en otros parques y zonas verdes de la ciudad, con renovación que incluye adecuación de mobiliario para parques, canchas sintéticas y otros elementos.
Apenas llegaron las unidades del Esmad, los manifestantes hicieron un cerco y levantaron las manos, en señal de que la protesta era pacífica. Sin embargo, según algunos asistentes a la manifestación, de inmediato inició la disolución con el lanzamiento de bombas aturdidoras y otros artefactos que, en efecto, acabaron con la protesta.
La raíz de todo el asunto es que, de acuerdo con los residentes de la zona, estos planes nunca fueron comunicados a la comunidad para intentar llegar a un acuerdo sobre las intervenciones. Muchos aseguran que no quieren la infraestructura y que prefieren tener mejoras en el humedal, que no incluyan intervenciones con obras duras.
La cabildante agregó que, según la información que ha obtenido, en el humedal se realizarán no una sino cuatro obras. “La gente que defiende el humedal tiene razón porque hay unas medidas cautelares que implican la no construcción de estos proyectos, y en el caso hay cuatro proyectos de obra que afectarían la estructura principal del humedal”.
Rojas hace referencia a la decisión que se dio en diciembre del año pasado, cuando un juez ordenó la suspensión de todo tipo de obras en estas zonas de protección de la ciudad, especialmente senderos, trazados de ciclorrutas y otras obras propuestas incluidas en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT). No obstante, los vecinos de los humedales Juan Amarillo y Jaboque denuncian que ya iniciaron las excavaciones y tala de árboles en dichos ecosistemas.