Foto: DiegoBauman
El feminicidio de Érika Aponte revive la discusión sobre las rutas de atención a quienes sufren la violencia intrafamiliar. Hoy el diagnóstico es claro: está enquistado en las mismas zonas y afecta a un perfil específico: menores de edad y mujeres de estrato dos. Un eslabón clave es la Secretaría de Integración Social, que maneja las comisarías de familia, encargadas de atender y adoptar las medidas de protección para las víctimas. Su secretaria, Margarita Barraquer, habló del diagnóstico del delito, las estrategias y de las críticas sobre...
Por Alexánder Marín Correa
Periodista manizaleño, con experiencia en periodismo de datos, judicial, investigación y local. @alexmarin55Jamarin@elespectador.com
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