Distrito ya conocía sobre informe de inseguridad en colegios bogotanos

Los resultados del estudio liderado por la Universidad de los Andes revelan que 49.165 estudiantes aceptaron que fueron atracados al interior del colegio, 28.712 han sido víctimas de algún tipo de violencia física y que al menos 4.338 tuvieron que recibir asistencia médica a causa de las agresiones.

La encuesta se realizó entre el 6 de marzo y el 7 de abril del año 2006 en 807 colegios públicos y privados de todos los estratos, para conocer el panorama escolar en la capital de la República y fue aplicada a un total de 826.455 estudiantes, de los dos millones aproximados que hay en Bogotá.

Sin embargo, el grave panorama escolar no fue de conocimiento público. Los resultado del estudio contratado por el Distrito llegaron a manos del Gobierno y este creó un comité que se denominó "Convivencia y seguridad en ámbitos escolares" y que estaba conformada, entre otros, por miembros de la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de Educación.

"Sin embargo, en este comité ya no aparece la Universidad de los Andes, cuando fueron ellos los contratados para analizar los resultados", aseguró la concejal Gilma Jiménez, promotora de la denuncia y quién ya anunció que llevará el caso hasta la Procuraduría General de la Nación.

Según las conclusiones textuales del documento los resultados de la investigación no pueden calificarse de "alarmantes" y con un seguimiento periódico de la problemática se puede llegar a una solución.

"La violencia en las escuelas es un tema de gran sensibilidad entre la opinión pública y los medios de comunicación tienden a tratar el tema de manera sensacionalista", explica el documento oficial respecto a las razones por las cuales estas cifras no eran de conocimiento público.

Además, asegura que se destinarán recursos "modestos" para realizar un seguimiento a la situación en los colegios de Bogotá.

Para dar solución a estos temas el documento asegura que la Secretaría de Educación Distrital, SED, ya cuenta con proyectos claves de inversión en ejecución.

"Uno ellos, Derechos humanos, convivencia y participación en la escuela, tiene como propósito democratizar las relaciones en la escuela por medio de la reactivación y el fortalecimiento de los espacios y mecanismos de participación, entre otros", asegura el documento del Distrito.

La investigación

El estudio realizado por Enrique Chaux, Ana María Velásquez, Natalia Melgarejo y Adriana Ramírez, investigadores de la Universidad de los Andes, refleja, entre otros datos que 28.457 estudiantes admitieron haber consumido alcohol, que 13.089 estudiantes fueron testigos de ataques con algún tipo de arma y que por lo menos 5.191 fueron intimidados con una.

"En Bogotá no ha pasado una tragedia de milagro. El panorama escolar revela que esto no se trata de rebeldía, sino de un grave problema que no solo involucra a los estudiantes, también a los establecimientos educativos que son permisivos con este tipo de casos", explicó Jimenez.

Aunque el cuerpo investigativo de este estudio se negó a hablar ante los medios de comunicación por un presunto pacto de confidencialidad, los siguientes datos fueron extraídos del documento original.

- El 56% de los estudiantes ha sido víctima de hurto en su colegio.

- El 38% de la población escolar manifestó haber sido objeto de maltrato emocional por parte de compañeros o profesores.

- El 13% manifestó haber sido objeto de acoso sexual verbal y 10% acoso sexual físico.

- El 33% de los estudiantes admitieron consumir alcohol de manera regular.

- 109.475 estudiantes han sido víctimas de agresiones de algún tipo, por parte de sus compañeros.

- 9.653 estudiantes evaden algunos lugares del colegio, por miedo a algún tipo de ataque.

Los resultados del estudio liderado por la Universidad de los Andes revelan que 49.165 estudiantes aceptaron que fueron atracados al interior del colegio, 28.712 han sido víctimas de algún tipo de violencia física y que al menos 4.338 tuvieron que recibir asistencia médica a causa de las agresiones.

La encuesta se realizó entre el 6 de marzo y el 7 de abril del año 2006 en 807 colegios públicos y privados de todos los estratos, para conocer el panorama escolar en la capital de la República y fue aplicada a un total de 826.455 estudiantes, de los dos millones aproximados que hay en Bogotá.

Sin embargo, el grave panorama escolar no fue de conocimiento público. Los resultado del estudio contratado por el Distrito llegaron a manos del Gobierno y este creó un comité que se denominó "Convivencia y seguridad en ámbitos escolares" y que estaba conformada, entre otros, por miembros de la Secretaría de Gobierno y la Secretaría de Educación.

"Sin embargo, en este comité ya no aparece la Universidad de los Andes, cuando fueron ellos los contratados para analizar los resultados", aseguró la concejal Gilma Jiménez, promotora de la denuncia y quién ya anunció que llevará el caso hasta la Procuraduría General de la Nación.

Según las conclusiones textuales del documento los resultados de la investigación no pueden calificarse de "alarmantes" y con un seguimiento periódico de la problemática se puede llegar a una solución.

"La violencia en las escuelas es un tema de gran sensibilidad entre la opinión pública y los medios de comunicación tienden a tratar el tema de manera sensacionalista", explica el documento oficial respecto a las razones por las cuales estas cifras no eran de conocimiento público.

Además, asegura que se destinarán recursos "modestos" para realizar un seguimiento a la situación en los colegios de Bogotá.

Para dar solución a estos temas el documento asegura que la Secretaría de Educación Distrital, SED, ya cuenta con proyectos claves de inversión en ejecución.

"Uno ellos, Derechos humanos, convivencia y participación en la escuela, tiene como propósito democratizar las relaciones en la escuela por medio de la reactivación y el fortalecimiento de los espacios y mecanismos de participación, entre otros", asegura el documento del Distrito.

La investigación

El estudio realizado por Enrique Chaux, Ana María Velásquez, Natalia Melgarejo y Adriana Ramírez, investigadores de la Universidad de los Andes, refleja, entre otros datos que 28.457 estudiantes admitieron haber consumido alcohol, que 13.089 estudiantes fueron testigos de ataques con algún tipo de arma y que por lo menos 5.191 fueron intimidados con una.

"En Bogotá no ha pasado una tragedia de milagro. El panorama escolar revela que esto no se trata de rebeldía, sino de un grave problema que no solo involucra a los estudiantes, también a los establecimientos educativos que son permisivos con este tipo de casos", explicó Jimenez.

Aunque el cuerpo investigativo de este estudio se negó a hablar ante los medios de comunicación por un presunto pacto de confidencialidad, los siguientes datos fueron extraídos del documento original.

- El 56% de los estudiantes ha sido víctima de hurto en su colegio.

- El 38% de la población escolar manifestó haber sido objeto de maltrato emocional por parte de compañeros o profesores.

- El 13% manifestó haber sido objeto de acoso sexual verbal y 10% acoso sexual físico.

- El 33% de los estudiantes admitieron consumir alcohol de manera regular.

- 109.475 estudiantes han sido víctimas de agresiones de algún tipo, por parte de sus compañeros.

- 9.653 estudiantes evaden algunos lugares del colegio, por miedo a algún tipo de ataque.