Esquina de la carreara 10 con calle 22, edificio Acuña.
Foto: Jose Vargas Esguerra
Caminar por las calles del centro de Bogotá es también toparse con edificios fantasma: fachadas grafiteadas, ventanas rotas y espacios oscuros, fríos y vacíos. Algunos están así a pesar de ser Patrimonio de Interés Cultural. En plena esquina de la carrera 10 con calle 22 se alza uno, de estilo francés, que hasta hace poco estuvo abandonado: el edificio Acuña. Hoy una fotografía de su estructura podría engañar a un incauto sobre dónde la tomaron y hacerle creer que es un paisaje europeo, cuando en realidad es un popular sector bogotano.
Por Juan Camilo Parra
Periodista egresado de la Universidad Externado de colombia con experiencia en cubrimiento de orden público en Bogotá.jparra@elespectador.com