El Bronx: una lenta metamorfosis social

Dos años después de la retoma del Bronx o la “L”, a simple vista no se notan cambios significativos. Sus ruinas siguen bajo custodia de las autoridades, mientras adelantan procesos jurídicos para consolidar la promesa de un Sena, la sede de la Alcaldía Local de Los Mártires y de un centro educativo profesional o tecnológico alternativo. Sin embargo, la activación del comercio, la mejora en seguridad, la disminución de habitantes de calle y la recuperación de una parte del patrimonio del barrio Voto Nacional son algunos de los cambios que resaltan los vecinos y comerciantes del sector en este tiempo.

Lea: Bronx: Historia de la calle más peligrosa de Bogotá

“Es evidente que la percepción de inseguridad ha disminuido. En general, el sector comercio se siente más seguro y muchos clientes han vuelto a comprar allí. La intervención fue muy positiva”, resaltó Orlando Cortés, líder de la Junta de Acción Comunal del barrio. Pero estos avances no han sido gratuitos. No contentos con cerrar “las puertas del infierno” y recuperar el control de las dos hectáreas que conformaban la zona más peligrosa de la ciudad, la administración dio vida a un proyecto que denominó Renovación del Voto Nacional.

Lea: Relatos de sobrevivientes del Bronx

La propuesta abarca 14 hectáreas, delimitadas desde la calle 12 hasta la calle 6, entre la Av. Caracas y la carrera 10. Sumada a los proyectos de vivienda, la idea central será edificar un distrito creativo que permita una reactivación económica, educativa y turística del sector. Por ello, hace un año se creó una mesa interdisciplinaria en la que participan diferentes entidades de la Alcaldía Mayor, bajo la dirección de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño (FUGA), para estructurar y revisar los avances del proyecto.

Proceso de demolición de predios del Bronx/ Cristian Garavito-El Espectador

Recuperación del territorio

Según Lina Amador, directora de la Empresa de Renovación Urbana (ERU), una de las entidades que conforman la mesa, lo que ayudará a garantizar el éxito del proceso que se inició tras la retoma del Bronx serán las obras que se construirán en la zona y que dinamizarán el territorio. Por ello se formuló este proyecto.

El corazón de la iniciativa quedará en las cuatro hectáreas donde estaban la antigua “L”, el antiguo edificio de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional (data de 1931 y donde opera el Batallón de Reclutamiento) y la morgue, un hospital abandonado hace 20 años. La idea es construir una sede del Sena(9.500 m²), la Alcaldía de Los Mártires (5 mil m²), una institución educativa profesional o tecnológica (que está por definir) y el Distrito Naranja. Las dos primeras estructuras tendrán una inversión de $170.000 millones, que serán aportados por la administración. De los 91 predios que se necesitan para estas obras, a la fecha se han adquirido 22.

Lea: Lecciones después del Bronx: una evaluación sobre sus impactos

Este proyecto tiene un cronograma definido. En junio se espera abrir la licitación para elaborar los diseños de la nueva sede del Sena y de la alcaldía local, con el fin de tenerlos listos antes de que termine el año y luego contratar la obra, que debería comenzar en marzo de 2019. “La intervención en el Bronx era indispensable para generar, primero, las condiciones de seguridad; luego, para desocupar la zona, y a partir de eso, planear este proyecto que, podemos decir, estamos haciendo realidad. Esperamos dejarlo en marcha antes de que termine esta administración”, explicó Amador.

Aunque parece que el Distrito tiene calculado cada detalle, la comunidad hace un llamado. El líder comunitario Orlando Cortés pide a la administración que la compra de estos predios corresponda al precio comercial y que se les garantice a quienes han vivido tradicionalmente en la zona, que puedan seguir allí.

Sobre esto, Amador señaló que en efecto el precio de cada propiedad será el que indique el avalúo comercial y que las familias tendrán algunos beneficios adicionales, como el privilegio de comprar vivienda en sectores aledaños, como en San Bernardo, donde se construirán 4.300 viviendas de interés social, que esperan tener listas antes de 2020.

Estructura con contenido

Aunque todo parece cemento, según el Distrito, el plan no es construir por construir. El objetivo final es convertir esta zona de la ciudad en un distrito creativo. Por ello, aunque no se han comprado todos los predios que se necesitan, la FUGA ya inició la apropiación de la zona. El primer paso fue abrir la calle que separaba la antigua sede de la Facultad de Medicina y la morgue, conocida como “La Milla” y la cual estuvo cerrada por las Fuerzas Militares por casi dos décadas. Allí se han realizado conciertos, desfiles de moda y festivales, entre los que se destaca el Festival Centro, que se celebró en febrero de este año y al que asistieron 5.400 personas.

Lea: Un año después del Bronx

La intención, una vez se concluyan los trabajos, es hacer de estos edificios (la Facultad de Medicina y la morgue) un punto de encuentro entre emprendedores bogotanos, que tengan sus propuestas direccionadas a la economía naranja. Allí podrán exhibir y comercializar sus productos. La administración espera dejar funcionando parte de los 15.000 m² que comprenden las dos estructuras en diciembre de 2019, y gracias a la alianza público privada y al trabajo jurídico que hoy se adelanta, que la obra y la parrilla de programación se sigan fortaleciendo en los próximos años. “Queremos que sea un distrito creativo muy local, con cosas hechas en Bogotá, por ciudadanos radicados en la capital. No queremos que este espacio sea ocupado por marcas extranjeras”, agregó Mónica Ramírez, directora de Fuga.

Lea: Nación y Distrito firman convenio para renovar sector del Bronx

A pesar de estos avances en la apropiación de la zona, algunos habitantes tienen un reparo: que a este espacio se le siga llamando Bronx, por la carga violenta y negativa que llevaba. Al respecto, la directora de la Fuga indicó que decidieron dejarle ese nombre al proyecto, porque es sonoro y casi todos los bogotanos lo reconocen y lo asocian con esta zona de la ciudad. La intención es resignificarlo, no borrar y crear algo nuevo, sino transformar lo existente en algo muy positivo, a través de la cultura, el arte, la creatividad”.

Calle La Milla/ Cristian Garavito-El Espectador

Activación económica

El factor económico es otro de los aspectos por los que apuesta el Distrito. Para lograrlo, la Secretaría de Desarrollo Económico ha realizado ferias, orientación administrativa, espacios de formación y hasta rutas de apoyo económico a los comerciantes que históricamente se han concentrado en el sector. “Lo primero que hicimos fue una caracterización de las actividades productivas aledañas y revisamos sus fortalezas y debilidades. Esto permitió realizar una estrategia de fortalecimiento y activación, que está enmarcada en la propuesta ‘Yo le compro a Bogotá’”, dijo el secretario de Desarrollo Económico, Juan Miguel Durán.

Lea: ¿Y dónde están los capos del Bronx?

Con el fin de ir impulsando la economía y de atraer a empresarios pequeños y grandes de la ciudad, la Secretaría ha realizando encuentros con algunos subsectores de las industrias creativas, como muebles, madera, libros y confecciones. “Pasamos de un sector donde nadie podía meterse, a un escenario de mayor prosperidad en el comercio, lo que significa más empleo e ingresos, así como un flujo significativo de turistas y ciudadanos”, agregó Prieto.

El patrimonio

A esta renovación urbana, económica, cultural y social se le suma otro componente y es el de la recuperación patrimonial e histórica en la Localidad de Los Mártires, la cual comenzó con el proyecto “Los Mártires Florece”, que se realizó en 2016 y consistió en la recuperación de su plaza, donde está ubicado el Obelisco dedicado a los próceres de la patria.

Allí se sembraron 12.000 plantas y se embellecieron algunas fachadas. En 2017 se inició la reestructuración integral de la Basílica Menor del Voto Nacional, con el reforzamiento de la fachada, contrafachada, coro, entre otros, en el que se invirtieron $3.499 millones.

Para este año se adelanta la segunda fase del reforzamiento estructural, que tendrá un costo de $6.900 millones, por lo cual se cerrará el templo un año. “Lo que tiene de interesante el patrimonio es el descubrimiento. A algunos les parecía Los Mártires un nombre triste y cuando se les explica que se llama así porque unas personas de nuestra sociedad dieron la vida para que Colombia fuera un país, cobra otro sentido”, señaló el director del IDPC, Mauricio Uribe.

Lea: El Bronx y la economía naranja

Sobre la recuperación del templo, Luis Alfonso Amador, empleado hace 15 años de la Basílica, resaltó que en estos dos años la asistencia de los feligreses pasó de cuatro o cinco personas en semana a 100 y más de 1.200 los fines de semana. Además, la tradicional misa de los primeros viernes de cada mes recuperó su influencia en los creyentes. Incluso, el próximo 8 de junio se llevará a cabo la tradicional Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús.

“Cuando el Bronx estaba en pie, no se hacía mucha labor social. Desde el 2016 la Iglesia retomó su trabajo pastoral: acoger los que se quedaron sin hogar y tejer un puente con el Distrito para su atención. Además, se crearon un comedor para niños los domingos y espacios de formación musical”, describió Amador.

Así, pues, aunque en el terreno donde estuvo el Bronx no se ve ningún cambio estructural aparente, los habitantes, comerciantes y líderes del sector reconocen un avance social y económico, que dibuja retos como el de la seguridad en los sectores aledaños y la ejecución efectiva del Distrito Creativo. “Este ha sido un proyecto muy íntimo, hecho con las entrañas. A futuro creo que este espacio se convertirá en un referente mundial de transformación”, concluyó Mónica Ramírez, gerente del proyecto.

Detalle Basílica Menor Voto Nacional/ Foto: Cristian Garavito-ElEspectador

¿Y los habitantes de calle?

“La intervención en el Bronx intensificó el trabajo de nuestros ángeles azules, que les ofrecen alternativas a los habitantes de calle”, señala la secretaria de Integración Social, Cristina Vélez, pues la atención a esta población se convirtió en una prioridad desde la retoma. A través de 11 unidades ubicadas en las localidades de Santa Fe, Los Mártires y Puente Aranda se logró, en 2017, la atención de 2.835 personas que salieron de la temida “L”. Además, con centros móviles de acción y un trabajo en conjunto con la Secretaría de Seguridad, han buscado vincular a más habitantes de calle a sus programas.

A pesar de estos esfuerzos, la edil de la zona Belisa Cárdenas señala que, aunque es positivo el avance que ha tenido el Bronx, a los comerciantes y a los habitantes de zonas aledañas a la localidad de Los Mártires les preocupan varias cosas: el aumento de habitantes de calle en sus barrios, la inseguridad y el expendio de drogas que se estarían concentrando en los barrios La Favorita y Santa Isabel, así como en el caño Los Comuneros.

Lea: Economía naranja, la estrategia para renovar el sector del Bronx

Para responder a estas quejas, el Distrito tiene su versión. “Es claro que hay problemas. El desalojo en el Bronx no significaba el fin de los habitantes de calle. Por el contrario, hizo más visible el problema. Lo que es clave aquí es que hemos hecho presencia en la zona con nuestros programas. Algunos los han aprovechado, pero sabemos que hay otros que nunca van a llegar a nuestros centros y no tenemos cómo obligarlos”, agrega la secretaria de Integración.

A pesar de esto, la oferta se mantiene e, incluso, viene creciendo. Hoy se cuenta con 2.781 cupos para personas que quieran vincularse al proceso de reintegración integral. Además, en los próximos meses se abrirán cinco nuevos centros de atención, con enfoques específicos, como adultos mayores, mujeres, carreteros y personas con codependencia de su mascota.

Por su parte, el secretario de Seguridad, Jairo García, resalta que en la localidad de Los Mártires ha disminuido el homicidio en un 61 % y que en estos dos años se han hecho más de 20 diligencias de allanamiento, 80 capturas y la recuperación del espacio público, entre otras acciones. Esto, según él, ha mejorado la seguridad en el sector. “Tenemos muchos retos. Lo que podemos decir es que lo que sucedía hace dos años en el Bronx, ya no sucede. Actualmente tenemos problemas relacionados con la venta de estupefacientes, pero hemos venido trabajando en el sector”.

Foto: Óscar Pérez-El Espectador

¿Es competitiva Bogotá en industrias creativas?

Según el Observatorio de Desarrollo Económico de Bogotá (ODEB), actualmente hay 11.110 empresas de la capital que integran 10 sectores de las industrias creativas. De acuerdo con el informe, están distribuidas así: cerca del 55 % pertenecen a los sectores de publicidad y diseño; el 15 %, al audiovisual y la radio; el 10 %, a producir libros y publicaciones, y el resto, a otros ocho sectores complementarios.

Lea: La nueva cara del Voto Nacional

Según el documento del ODEB, estas empresas tienen una gran proyección económica. El informe señala que las exportaciones en 2016 de las industrias creativas y culturales a nivel nacional alcanzaron los US$43,5 millones, de los cuales la empresas bogotanas lideraron con un 88,5 % del total de las ventas de este sector económico.

Con estas cifras, la Secretaría de Desarrollo Económico ratificó que la ciudad cuenta con suficientes empresarios que permitirán impulsar el Distrito Creativo, que se construirá en el antiguo sector del Bronx, que será el motor de desarrollo económico y social del centro.

Festival Bronx

Para conmemorar los dos años del desalojo del Bronx, los próximos 6, 7 y 8 de junio se realizará en “La Milla” el Festival Bronx Distrito Creativo, donde habrá diferentes actividades como laboratorios creativos, conferencias, desfile de modas, producción audiovisual y concursos. Un evento que se une a otras muestras culturales y artísticas que se realizarán durante el resto del año.

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Dos años después de la retoma del Bronx o la “L”, a simple vista no se notan cambios significativos. Sus ruinas siguen bajo custodia de las autoridades, mientras adelantan procesos jurídicos para consolidar la promesa de un Sena, la sede de la Alcaldía Local de Los Mártires y de un centro educativo profesional o tecnológico alternativo. Sin embargo, la activación del comercio, la mejora en seguridad, la disminución de habitantes de calle y la recuperación de una parte del patrimonio del barrio Voto Nacional son algunos de los cambios que resaltan los vecinos y comerciantes del sector en este tiempo.

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“Es evidente que la percepción de inseguridad ha disminuido. En general, el sector comercio se siente más seguro y muchos clientes han vuelto a comprar allí. La intervención fue muy positiva”, resaltó Orlando Cortés, líder de la Junta de Acción Comunal del barrio. Pero estos avances no han sido gratuitos. No contentos con cerrar “las puertas del infierno” y recuperar el control de las dos hectáreas que conformaban la zona más peligrosa de la ciudad, la administración dio vida a un proyecto que denominó Renovación del Voto Nacional.

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La propuesta abarca 14 hectáreas, delimitadas desde la calle 12 hasta la calle 6, entre la Av. Caracas y la carrera 10. Sumada a los proyectos de vivienda, la idea central será edificar un distrito creativo que permita una reactivación económica, educativa y turística del sector. Por ello, hace un año se creó una mesa interdisciplinaria en la que participan diferentes entidades de la Alcaldía Mayor, bajo la dirección de la Fundación Gilberto Alzate Avendaño (FUGA), para estructurar y revisar los avances del proyecto.

Proceso de demolición de predios del Bronx/ Cristian Garavito-El Espectador

Recuperación del territorio

Según Lina Amador, directora de la Empresa de Renovación Urbana (ERU), una de las entidades que conforman la mesa, lo que ayudará a garantizar el éxito del proceso que se inició tras la retoma del Bronx serán las obras que se construirán en la zona y que dinamizarán el territorio. Por ello se formuló este proyecto.

El corazón de la iniciativa quedará en las cuatro hectáreas donde estaban la antigua “L”, el antiguo edificio de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional (data de 1931 y donde opera el Batallón de Reclutamiento) y la morgue, un hospital abandonado hace 20 años. La idea es construir una sede del Sena(9.500 m²), la Alcaldía de Los Mártires (5 mil m²), una institución educativa profesional o tecnológica (que está por definir) y el Distrito Naranja. Las dos primeras estructuras tendrán una inversión de $170.000 millones, que serán aportados por la administración. De los 91 predios que se necesitan para estas obras, a la fecha se han adquirido 22.

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Este proyecto tiene un cronograma definido. En junio se espera abrir la licitación para elaborar los diseños de la nueva sede del Sena y de la alcaldía local, con el fin de tenerlos listos antes de que termine el año y luego contratar la obra, que debería comenzar en marzo de 2019. “La intervención en el Bronx era indispensable para generar, primero, las condiciones de seguridad; luego, para desocupar la zona, y a partir de eso, planear este proyecto que, podemos decir, estamos haciendo realidad. Esperamos dejarlo en marcha antes de que termine esta administración”, explicó Amador.

Aunque parece que el Distrito tiene calculado cada detalle, la comunidad hace un llamado. El líder comunitario Orlando Cortés pide a la administración que la compra de estos predios corresponda al precio comercial y que se les garantice a quienes han vivido tradicionalmente en la zona, que puedan seguir allí.

Sobre esto, Amador señaló que en efecto el precio de cada propiedad será el que indique el avalúo comercial y que las familias tendrán algunos beneficios adicionales, como el privilegio de comprar vivienda en sectores aledaños, como en San Bernardo, donde se construirán 4.300 viviendas de interés social, que esperan tener listas antes de 2020.

Estructura con contenido

Aunque todo parece cemento, según el Distrito, el plan no es construir por construir. El objetivo final es convertir esta zona de la ciudad en un distrito creativo. Por ello, aunque no se han comprado todos los predios que se necesitan, la FUGA ya inició la apropiación de la zona. El primer paso fue abrir la calle que separaba la antigua sede de la Facultad de Medicina y la morgue, conocida como “La Milla” y la cual estuvo cerrada por las Fuerzas Militares por casi dos décadas. Allí se han realizado conciertos, desfiles de moda y festivales, entre los que se destaca el Festival Centro, que se celebró en febrero de este año y al que asistieron 5.400 personas.

Lea: Un año después del Bronx

La intención, una vez se concluyan los trabajos, es hacer de estos edificios (la Facultad de Medicina y la morgue) un punto de encuentro entre emprendedores bogotanos, que tengan sus propuestas direccionadas a la economía naranja. Allí podrán exhibir y comercializar sus productos. La administración espera dejar funcionando parte de los 15.000 m² que comprenden las dos estructuras en diciembre de 2019, y gracias a la alianza público privada y al trabajo jurídico que hoy se adelanta, que la obra y la parrilla de programación se sigan fortaleciendo en los próximos años. “Queremos que sea un distrito creativo muy local, con cosas hechas en Bogotá, por ciudadanos radicados en la capital. No queremos que este espacio sea ocupado por marcas extranjeras”, agregó Mónica Ramírez, directora de Fuga.

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A pesar de estos avances en la apropiación de la zona, algunos habitantes tienen un reparo: que a este espacio se le siga llamando Bronx, por la carga violenta y negativa que llevaba. Al respecto, la directora de la Fuga indicó que decidieron dejarle ese nombre al proyecto, porque es sonoro y casi todos los bogotanos lo reconocen y lo asocian con esta zona de la ciudad. La intención es resignificarlo, no borrar y crear algo nuevo, sino transformar lo existente en algo muy positivo, a través de la cultura, el arte, la creatividad”.

Calle La Milla/ Cristian Garavito-El Espectador

Activación económica

El factor económico es otro de los aspectos por los que apuesta el Distrito. Para lograrlo, la Secretaría de Desarrollo Económico ha realizado ferias, orientación administrativa, espacios de formación y hasta rutas de apoyo económico a los comerciantes que históricamente se han concentrado en el sector. “Lo primero que hicimos fue una caracterización de las actividades productivas aledañas y revisamos sus fortalezas y debilidades. Esto permitió realizar una estrategia de fortalecimiento y activación, que está enmarcada en la propuesta ‘Yo le compro a Bogotá’”, dijo el secretario de Desarrollo Económico, Juan Miguel Durán.

Lea: ¿Y dónde están los capos del Bronx?

Con el fin de ir impulsando la economía y de atraer a empresarios pequeños y grandes de la ciudad, la Secretaría ha realizando encuentros con algunos subsectores de las industrias creativas, como muebles, madera, libros y confecciones. “Pasamos de un sector donde nadie podía meterse, a un escenario de mayor prosperidad en el comercio, lo que significa más empleo e ingresos, así como un flujo significativo de turistas y ciudadanos”, agregó Prieto.

El patrimonio

A esta renovación urbana, económica, cultural y social se le suma otro componente y es el de la recuperación patrimonial e histórica en la Localidad de Los Mártires, la cual comenzó con el proyecto “Los Mártires Florece”, que se realizó en 2016 y consistió en la recuperación de su plaza, donde está ubicado el Obelisco dedicado a los próceres de la patria.

Allí se sembraron 12.000 plantas y se embellecieron algunas fachadas. En 2017 se inició la reestructuración integral de la Basílica Menor del Voto Nacional, con el reforzamiento de la fachada, contrafachada, coro, entre otros, en el que se invirtieron $3.499 millones.

Para este año se adelanta la segunda fase del reforzamiento estructural, que tendrá un costo de $6.900 millones, por lo cual se cerrará el templo un año. “Lo que tiene de interesante el patrimonio es el descubrimiento. A algunos les parecía Los Mártires un nombre triste y cuando se les explica que se llama así porque unas personas de nuestra sociedad dieron la vida para que Colombia fuera un país, cobra otro sentido”, señaló el director del IDPC, Mauricio Uribe.

Lea: El Bronx y la economía naranja

Sobre la recuperación del templo, Luis Alfonso Amador, empleado hace 15 años de la Basílica, resaltó que en estos dos años la asistencia de los feligreses pasó de cuatro o cinco personas en semana a 100 y más de 1.200 los fines de semana. Además, la tradicional misa de los primeros viernes de cada mes recuperó su influencia en los creyentes. Incluso, el próximo 8 de junio se llevará a cabo la tradicional Fiesta del Sagrado Corazón de Jesús.

“Cuando el Bronx estaba en pie, no se hacía mucha labor social. Desde el 2016 la Iglesia retomó su trabajo pastoral: acoger los que se quedaron sin hogar y tejer un puente con el Distrito para su atención. Además, se crearon un comedor para niños los domingos y espacios de formación musical”, describió Amador.

Así, pues, aunque en el terreno donde estuvo el Bronx no se ve ningún cambio estructural aparente, los habitantes, comerciantes y líderes del sector reconocen un avance social y económico, que dibuja retos como el de la seguridad en los sectores aledaños y la ejecución efectiva del Distrito Creativo. “Este ha sido un proyecto muy íntimo, hecho con las entrañas. A futuro creo que este espacio se convertirá en un referente mundial de transformación”, concluyó Mónica Ramírez, gerente del proyecto.

Detalle Basílica Menor Voto Nacional/ Foto: Cristian Garavito-ElEspectador

¿Y los habitantes de calle?

“La intervención en el Bronx intensificó el trabajo de nuestros ángeles azules, que les ofrecen alternativas a los habitantes de calle”, señala la secretaria de Integración Social, Cristina Vélez, pues la atención a esta población se convirtió en una prioridad desde la retoma. A través de 11 unidades ubicadas en las localidades de Santa Fe, Los Mártires y Puente Aranda se logró, en 2017, la atención de 2.835 personas que salieron de la temida “L”. Además, con centros móviles de acción y un trabajo en conjunto con la Secretaría de Seguridad, han buscado vincular a más habitantes de calle a sus programas.

A pesar de estos esfuerzos, la edil de la zona Belisa Cárdenas señala que, aunque es positivo el avance que ha tenido el Bronx, a los comerciantes y a los habitantes de zonas aledañas a la localidad de Los Mártires les preocupan varias cosas: el aumento de habitantes de calle en sus barrios, la inseguridad y el expendio de drogas que se estarían concentrando en los barrios La Favorita y Santa Isabel, así como en el caño Los Comuneros.

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Para responder a estas quejas, el Distrito tiene su versión. “Es claro que hay problemas. El desalojo en el Bronx no significaba el fin de los habitantes de calle. Por el contrario, hizo más visible el problema. Lo que es clave aquí es que hemos hecho presencia en la zona con nuestros programas. Algunos los han aprovechado, pero sabemos que hay otros que nunca van a llegar a nuestros centros y no tenemos cómo obligarlos”, agrega la secretaria de Integración.

A pesar de esto, la oferta se mantiene e, incluso, viene creciendo. Hoy se cuenta con 2.781 cupos para personas que quieran vincularse al proceso de reintegración integral. Además, en los próximos meses se abrirán cinco nuevos centros de atención, con enfoques específicos, como adultos mayores, mujeres, carreteros y personas con codependencia de su mascota.

Por su parte, el secretario de Seguridad, Jairo García, resalta que en la localidad de Los Mártires ha disminuido el homicidio en un 61 % y que en estos dos años se han hecho más de 20 diligencias de allanamiento, 80 capturas y la recuperación del espacio público, entre otras acciones. Esto, según él, ha mejorado la seguridad en el sector. “Tenemos muchos retos. Lo que podemos decir es que lo que sucedía hace dos años en el Bronx, ya no sucede. Actualmente tenemos problemas relacionados con la venta de estupefacientes, pero hemos venido trabajando en el sector”.

Foto: Óscar Pérez-El Espectador

¿Es competitiva Bogotá en industrias creativas?

Según el Observatorio de Desarrollo Económico de Bogotá (ODEB), actualmente hay 11.110 empresas de la capital que integran 10 sectores de las industrias creativas. De acuerdo con el informe, están distribuidas así: cerca del 55 % pertenecen a los sectores de publicidad y diseño; el 15 %, al audiovisual y la radio; el 10 %, a producir libros y publicaciones, y el resto, a otros ocho sectores complementarios.

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Según el documento del ODEB, estas empresas tienen una gran proyección económica. El informe señala que las exportaciones en 2016 de las industrias creativas y culturales a nivel nacional alcanzaron los US$43,5 millones, de los cuales la empresas bogotanas lideraron con un 88,5 % del total de las ventas de este sector económico.

Con estas cifras, la Secretaría de Desarrollo Económico ratificó que la ciudad cuenta con suficientes empresarios que permitirán impulsar el Distrito Creativo, que se construirá en el antiguo sector del Bronx, que será el motor de desarrollo económico y social del centro.

Festival Bronx

Para conmemorar los dos años del desalojo del Bronx, los próximos 6, 7 y 8 de junio se realizará en “La Milla” el Festival Bronx Distrito Creativo, donde habrá diferentes actividades como laboratorios creativos, conferencias, desfile de modas, producción audiovisual y concursos. Un evento que se une a otras muestras culturales y artísticas que se realizarán durante el resto del año.

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