El encontrón entre Petro y Galán por Reserva Van der Hammen y crisis de agua
Los mandatarios intercambiaron trinos por posiciones encontradas por obras en la AV. Boyacá, la reserva Van der Hammen y la crisis de agua.
La ampliación de la Av. Boyacá y la crisis de agua que atraviesa la capital del país fueron los motivos de un nuevo rifirrafe entre el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y el presidente de la República, Gustavo Petro, luego de que el presidente publicara una serie de trinos en donde pone en duda la idoneidad del proyecto y asegura que la ampliación del eje vial podría destruir la Reserva Thomas Van der Hammen.
Le puede interesar: Bogotá reporta un crecimiento económico del 2,2% en el segundo trimestre de 2024
“En una ciudad que se queda sin agua cómo se puede pensar en destruir la Reserva Forestal Thomas Van Der Hammen”, señaló el presidente Gustavo Petro en su cuenta de X, luego de que el alcalde Galán señalara que Gobierno Nacional está haciendo lo posible por bloquear la ampliación de la Av. Boyacá, esto luego de que la ministra de Ambiente Susana Muhamad demandara ante el Consejo de Estado la licencia ambiental para la Av. Boyacá. “Otra intromisión más del Gobierno Nacional en asuntos que deben ser definidos por Bogotá y que, por cierto, la ciudad ya definió”, señaló Galán tras conocer que la demanda fue admitida.
Galán además desmintió las aseveraciones del presidente: “No es cierto, presidente. Ni Bogotá se va a quedar sin agua ni la ampliación de la Avenida Boyacá va a destruir la reserva Thomas van Der Hammen”, señaló el alcalde.
“Para este proyecto, clave para la movilidad y el desarrollo organizado de la ciudad, solo se sustraen 20 hectáreas de la reserva, que tiene en total más de 1.395. Este impacto se compensará con cerca de 120 hectáreas en las que se desarrollarán actividades de conservación y restauración en esta reserva. Esto, sin mencionar las características de la obra, que incluyen pasos para fauna y pasos para conexión hídrica. El camino para contener el crecimiento desbordado en la sabana de Bogotá es a través de un desarrollo urbano bien planeado y responsable al interior del perímetro urbano de la ciudad, no frenando por completo cualquier proyecto bien hecho”, explicó Galán.
Petro, por su parte, publicó la imagen de un árbol que, asegura, tiene 200 años y asegura que, con la urbanización de parte de la reserva Van der Hammen, el centenario árbol desaparecerá junto a las esperanzas de agua para Bogotá. " Hoy la primera necesidad de Bogotá se llama agua. Por hacer involución, en vez de desarrollo sostenible, la ciudad pavimentó los espacios del agua. Involucionó contra el agua. Es por eso que la ciudad tiene un racionamiento grave de agua líquida. Es más importante el agua que el cemento y el carro. Liberar los espacios del agua es vital para Bogotá”, señaló Petro.
Galán nuevamente respondió y, esta vez, explicó lo que su administración pretende hacer para preservar la reserva. “A pesar de que se declaró en 2011, hoy el 95,6% de la reserva continúa en manos de privados y con una restauración que no alcanza el 3% de su área. Nuestra administración va a restaurar 25 veces el área de la reserva que se ha restaurado hasta ahora”, señaló Galán.
Y puntualizo señalando lo que viene. “Para eso, recientemente pusimos en marcha el mecanismo de Transferencia de Derechos de Construcción, una herramienta que busca que los propietarios de predios privados que están en zonas de alto valor ambiental (y que por ende tienen restricciones de uso) puedan voluntariamente transferirlos a la Secretaría de Ambiente para su restauración y conservación. A cambio, los propietarios recibirán un certificado que representa metros cuadrados de construcción en áreas edificables de la ciudad establecidas por el POT, principalmente para el desarrollo de Vivienda de Interés Social. Vamos a iniciar adquiriendo 60 hectáreas de 100 que ya tenemos ofertadas para su restauración, lo que representa el 4% de la extensión de la reserva”.
Entretanto, la crisis de agua que atraviesa la región continúa. Los racionamientos diarios siguen mientras que los niveles de los embalses y de consumo diario de agua no llegan a los porcentajes esperados. Por otro lado, pese a la demanda, la gerencia de Lagos de Torca, encargada de la ampliación de la Av. Boyacá, anunció que seguirá con los planes y las obras de ampliación seguirán su curso.
Lea además: Transmilenio y el choque con los vendedores que detonó en el túnel del Ricaurte
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
La ampliación de la Av. Boyacá y la crisis de agua que atraviesa la capital del país fueron los motivos de un nuevo rifirrafe entre el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, y el presidente de la República, Gustavo Petro, luego de que el presidente publicara una serie de trinos en donde pone en duda la idoneidad del proyecto y asegura que la ampliación del eje vial podría destruir la Reserva Thomas Van der Hammen.
Le puede interesar: Bogotá reporta un crecimiento económico del 2,2% en el segundo trimestre de 2024
“En una ciudad que se queda sin agua cómo se puede pensar en destruir la Reserva Forestal Thomas Van Der Hammen”, señaló el presidente Gustavo Petro en su cuenta de X, luego de que el alcalde Galán señalara que Gobierno Nacional está haciendo lo posible por bloquear la ampliación de la Av. Boyacá, esto luego de que la ministra de Ambiente Susana Muhamad demandara ante el Consejo de Estado la licencia ambiental para la Av. Boyacá. “Otra intromisión más del Gobierno Nacional en asuntos que deben ser definidos por Bogotá y que, por cierto, la ciudad ya definió”, señaló Galán tras conocer que la demanda fue admitida.
Galán además desmintió las aseveraciones del presidente: “No es cierto, presidente. Ni Bogotá se va a quedar sin agua ni la ampliación de la Avenida Boyacá va a destruir la reserva Thomas van Der Hammen”, señaló el alcalde.
“Para este proyecto, clave para la movilidad y el desarrollo organizado de la ciudad, solo se sustraen 20 hectáreas de la reserva, que tiene en total más de 1.395. Este impacto se compensará con cerca de 120 hectáreas en las que se desarrollarán actividades de conservación y restauración en esta reserva. Esto, sin mencionar las características de la obra, que incluyen pasos para fauna y pasos para conexión hídrica. El camino para contener el crecimiento desbordado en la sabana de Bogotá es a través de un desarrollo urbano bien planeado y responsable al interior del perímetro urbano de la ciudad, no frenando por completo cualquier proyecto bien hecho”, explicó Galán.
Petro, por su parte, publicó la imagen de un árbol que, asegura, tiene 200 años y asegura que, con la urbanización de parte de la reserva Van der Hammen, el centenario árbol desaparecerá junto a las esperanzas de agua para Bogotá. " Hoy la primera necesidad de Bogotá se llama agua. Por hacer involución, en vez de desarrollo sostenible, la ciudad pavimentó los espacios del agua. Involucionó contra el agua. Es por eso que la ciudad tiene un racionamiento grave de agua líquida. Es más importante el agua que el cemento y el carro. Liberar los espacios del agua es vital para Bogotá”, señaló Petro.
Galán nuevamente respondió y, esta vez, explicó lo que su administración pretende hacer para preservar la reserva. “A pesar de que se declaró en 2011, hoy el 95,6% de la reserva continúa en manos de privados y con una restauración que no alcanza el 3% de su área. Nuestra administración va a restaurar 25 veces el área de la reserva que se ha restaurado hasta ahora”, señaló Galán.
Y puntualizo señalando lo que viene. “Para eso, recientemente pusimos en marcha el mecanismo de Transferencia de Derechos de Construcción, una herramienta que busca que los propietarios de predios privados que están en zonas de alto valor ambiental (y que por ende tienen restricciones de uso) puedan voluntariamente transferirlos a la Secretaría de Ambiente para su restauración y conservación. A cambio, los propietarios recibirán un certificado que representa metros cuadrados de construcción en áreas edificables de la ciudad establecidas por el POT, principalmente para el desarrollo de Vivienda de Interés Social. Vamos a iniciar adquiriendo 60 hectáreas de 100 que ya tenemos ofertadas para su restauración, lo que representa el 4% de la extensión de la reserva”.
Entretanto, la crisis de agua que atraviesa la región continúa. Los racionamientos diarios siguen mientras que los niveles de los embalses y de consumo diario de agua no llegan a los porcentajes esperados. Por otro lado, pese a la demanda, la gerencia de Lagos de Torca, encargada de la ampliación de la Av. Boyacá, anunció que seguirá con los planes y las obras de ampliación seguirán su curso.
Lea además: Transmilenio y el choque con los vendedores que detonó en el túnel del Ricaurte
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.