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Entre las víctimas del atentado con un cilindro bomba contra la caravana del Gobernador de Caquetá, que dejó como saldo dos policías heridos, se encuentra el patrullero Miguel Ángel Bernal Espitia, que se enlistó hace siete años a la Policía en Fusagasugá, Cundinamarca.
Así, a sus 20 años ingresó a la institución como auxiliar bachiller en este municipio del sur del departamento. Fue en ese momento también qué Bernal tuvo una hija con su pareja sentimental.
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Tras graduarse de patrullero, donde se especializó en operaciones urbanas y rurales, fue asignado en 2017 a una escuadrón de Carabineros de la Policía, que realizaba operativos antiterrorismo.
En 2020, Bernal junto al otro patrullero fallecido fueron asignados al escuadrón móvil de Carabineros que fue designado el pasado 29 de enero para acompañar al gobernador Arnulfo Gasca Trujillo, en su visita al municipio de Solano.
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Fue en esa operación, durante el regreso a Florencia, en la cual la caravana del gobernador fue atacada en la vereda Palmeras del municipio de Montañita, en donde fallecieron los dos patrulleros de la Policía, y además resultaron cinco civiles heridos que se recuperan en centros de salud.
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