El metro: ahora el turno es del Concejo
El Gobierno Nacional dio otro espaldarazo al proyecto con la aprobación del Conpes. Aportará $9,05 billones, correspondientes al 70 %, y ahora el Distrito deberá buscar el 30 % restante.
Redacción Bogotá.
La administración dio un paso más en su plan de construir el metro. La nación dio otro espaldarazo con el documento Conpes, en el que aprueba los avances que presentó el Distrito y ratifica su compromiso de financiar la obra. Sin embargo, faltan pasos para que se pueda abrir la licitación. El balón ahora quedará en manos del Concejo, que tendrá que discutir en las próximas semanas un proyecto clave: las vigencias futuras, por casi $7 billones, que garantizarán los recursos que debe poner Bogotá.
En el documento que aprobó ayer la nación se ratificó que el metro será de 23,9 kilómetros y que construir la primera línea costará $12,9 billones, de los cuales el Gobierno aportará $9,05 billones (70 %). El trazado irá desde el Portal de las Américas, pasará por la avenida Primero de Mayo, la Caracas y finalizará en la calle 72. Además, tendrá 15 estaciones y movilizará a 70.000 personas.
Ahora será tarea del Distrito garantizar el 30 % que hace falta. Aunque ya tiene parte del dinero, vía cupo de endeudamiento y las reservas en la ETB y la Empresa de Energía, el trabajo será gestionar ante el Concejo las vigencias futuras, con las que comprometerá la sobretasa a la gasolina por 30 años.
Desde el Concejo de Bogotá, se empiezan a tomar posiciones sobre lo que será el debate. Para Juan Carlos Flórez (ASI), el Conpes es un documento más: “Hemos tenido muchos, incluso Gustavo Petro tuvo uno con el gobierno Santos. La fecha límite es el 11 de noviembre, porque si no está firmado el convenio de cofinanciación a largo plazo, entre el Gobierno nacional y el distrital, el metro quedaría como una promesa”. El cabildante advirtió, además, que a la fecha no hay estudios ingeniería de fondo y eso será un motivo de controversia durante las próximas semanas.
En ese sentido, el analista Aurelio Suárez calificó como “irresponsable” la aprobación del Conpes: “No hay estudios del nivel de detalle que se requieren. Como Transmilenio por la séptima lo debe asumir todo el Distrito -y ese proyecto se considera estructural para metro elevado-, entonces este sobrecosto hará que para el Distrito dicha solución sea más cara que la del metro subterráneo. Eso atenta contra las finanzas distritales”.
Una posición más optimista tiene la concejala María Victoria Vargas (Partido Liberal), quien considera que en este caso el metro sí cuenta con un “cheque de gerencia” y no con “cheques chimbos”, en alusión a las oportunidades pasadas en que se prometieron recursos para este sistema de transporte. “Con ese documento se ve con más claridad la intención del Gobierno Nacional de apoyar la financiación y, respecto a los estudios, le corresponderá a la administración distrital incluir los requisitos de ley”.
En principio, este trámite parece tener vía libre en el cabildo, donde la bancada de gobierno es mayoría. Ya se las aprobaron una vez, cuando el Distrito presentó el proyecto sin tener estudios. Ahora, con el espaldarazo de la nación, el trámite podría tener el camino más despejado.
Pese a la noticia, el Distrito seguirá contra el reloj. El 11 de noviembre comenzará la Ley de Garantías y debe correr para asegurar el convenio de cofinanciación del Gobierno, si pretende abrir la licitación antes de que termine el año. De lo contrario, el sueño del metro se volvería a aplazar.
La administración dio un paso más en su plan de construir el metro. La nación dio otro espaldarazo con el documento Conpes, en el que aprueba los avances que presentó el Distrito y ratifica su compromiso de financiar la obra. Sin embargo, faltan pasos para que se pueda abrir la licitación. El balón ahora quedará en manos del Concejo, que tendrá que discutir en las próximas semanas un proyecto clave: las vigencias futuras, por casi $7 billones, que garantizarán los recursos que debe poner Bogotá.
En el documento que aprobó ayer la nación se ratificó que el metro será de 23,9 kilómetros y que construir la primera línea costará $12,9 billones, de los cuales el Gobierno aportará $9,05 billones (70 %). El trazado irá desde el Portal de las Américas, pasará por la avenida Primero de Mayo, la Caracas y finalizará en la calle 72. Además, tendrá 15 estaciones y movilizará a 70.000 personas.
Ahora será tarea del Distrito garantizar el 30 % que hace falta. Aunque ya tiene parte del dinero, vía cupo de endeudamiento y las reservas en la ETB y la Empresa de Energía, el trabajo será gestionar ante el Concejo las vigencias futuras, con las que comprometerá la sobretasa a la gasolina por 30 años.
Desde el Concejo de Bogotá, se empiezan a tomar posiciones sobre lo que será el debate. Para Juan Carlos Flórez (ASI), el Conpes es un documento más: “Hemos tenido muchos, incluso Gustavo Petro tuvo uno con el gobierno Santos. La fecha límite es el 11 de noviembre, porque si no está firmado el convenio de cofinanciación a largo plazo, entre el Gobierno nacional y el distrital, el metro quedaría como una promesa”. El cabildante advirtió, además, que a la fecha no hay estudios ingeniería de fondo y eso será un motivo de controversia durante las próximas semanas.
En ese sentido, el analista Aurelio Suárez calificó como “irresponsable” la aprobación del Conpes: “No hay estudios del nivel de detalle que se requieren. Como Transmilenio por la séptima lo debe asumir todo el Distrito -y ese proyecto se considera estructural para metro elevado-, entonces este sobrecosto hará que para el Distrito dicha solución sea más cara que la del metro subterráneo. Eso atenta contra las finanzas distritales”.
Una posición más optimista tiene la concejala María Victoria Vargas (Partido Liberal), quien considera que en este caso el metro sí cuenta con un “cheque de gerencia” y no con “cheques chimbos”, en alusión a las oportunidades pasadas en que se prometieron recursos para este sistema de transporte. “Con ese documento se ve con más claridad la intención del Gobierno Nacional de apoyar la financiación y, respecto a los estudios, le corresponderá a la administración distrital incluir los requisitos de ley”.
En principio, este trámite parece tener vía libre en el cabildo, donde la bancada de gobierno es mayoría. Ya se las aprobaron una vez, cuando el Distrito presentó el proyecto sin tener estudios. Ahora, con el espaldarazo de la nación, el trámite podría tener el camino más despejado.
Pese a la noticia, el Distrito seguirá contra el reloj. El 11 de noviembre comenzará la Ley de Garantías y debe correr para asegurar el convenio de cofinanciación del Gobierno, si pretende abrir la licitación antes de que termine el año. De lo contrario, el sueño del metro se volvería a aplazar.