Embalse Chingaza subió a 20,11% en un día, pero las medidas deben continuar

A principios de abril, cuando se inició el racionamiento de agua en Bogotá, los embalses alcanzaron su punto más bajo en la historia, con apenas un 14 % de capacidad. Esta es una de las situaciones que preocupó tanto a las autoridades locales como al gobierno, y que los llevó a implementar medidas de racionamiento en la capital.

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Durante tres ciclos completos de nueve días, los embalses apenas aumentaron su capacidad en un 3 %, hasta que el panorama cambió el 10 de abril. En este día, el alcalde Carlos Fernando Galán informó a través de la gráfica diaria de niveles de embalses que Chingaza, el más importante para el abastecimiento de agua en la ciudad, mostró un significativo aumento, alcanzando un 20.11 % de su capacidad.

Este incremento es una excelente noticia para los habitantes de Bogotá, que a principios de marzo tenían solo 54 días de reserva de agua para la ciudad. Gracias al racionamiento y a las precipitaciones, la situación ha mejorado notablemente. Sin embargo, el alcalde enfatizó que las medidas de ahorro de agua deben mantenerse y que no se debe bajar la guardia.

Cabe recordar que llegar a 20 % de llenado en este embalse era la meta de abril y se cumplió 10 días después de lo esperado. La meta de mayo deberá ser recalculada y los capitalinos deberán seguir aportando para no depender únicamente de las lluvias.

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Es importante destacar que, según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), otros embalses aumentaron en promedio hasta alcanzar un 36.04% de su capacidad. Este logro se produce justo antes de completar el primer mes de racionamiento en Bogotá, lo que sin duda es motivo de alegría para la ciudad.

Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

A principios de abril, cuando se inició el racionamiento de agua en Bogotá, los embalses alcanzaron su punto más bajo en la historia, con apenas un 14 % de capacidad. Esta es una de las situaciones que preocupó tanto a las autoridades locales como al gobierno, y que los llevó a implementar medidas de racionamiento en la capital.

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Este incremento es una excelente noticia para los habitantes de Bogotá, que a principios de marzo tenían solo 54 días de reserva de agua para la ciudad. Gracias al racionamiento y a las precipitaciones, la situación ha mejorado notablemente. Sin embargo, el alcalde enfatizó que las medidas de ahorro de agua deben mantenerse y que no se debe bajar la guardia.

Cabe recordar que llegar a 20 % de llenado en este embalse era la meta de abril y se cumplió 10 días después de lo esperado. La meta de mayo deberá ser recalculada y los capitalinos deberán seguir aportando para no depender únicamente de las lluvias.

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