Bogotá busca a sus desaparecidos: panorama de un fenómeno que no disminuye

Giovanny D’Achiardi fue reportado como desaparecido el 8 de julio de este año. Su familia reportó el caso luego de que el hombre le asegurara a su pareja que se dirigía para Chapinero, al sector de rosales, a visitar a una familiar. “Venía en un carro de su trabajo y se bajó en el Carulla de la calle 85 con carrera 15. En ese momento, pasadas las 7:00 p.m. estaba lloviendo muy fuerte y él se quedó escampando en la zona”, le contó a El Espectador, María Alejandra Báez, pareja de Giovanny.

Giovanny D’Achiardi fue reportado como desaparecido el 8 de julio de este año. Su familia reportó el caso luego de que el hombre le asegurara a su pareja que se dirigía para Chapinero, al sector de rosales, a visitar a una familiar. “Venía en un carro de su trabajo y se bajó en el Carulla de la calle 85 con carrera 15. En ese momento, pasadas las 7:00 p.m. estaba lloviendo muy fuerte y él se quedó escampando en la zona”, le contó a El Espectador, María Alejandra Báez, pareja de Giovanny.

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Tras escampar, y ante la imposibilidad de tomar transporte público por la alta demanda a raíz de la lluvia, D’Achiardy le aseguró a su pareja que se iría caminando hasta su destino. Pero fue evidente que el hombre nunca llegó. Tas las labores iniciales de búsqueda, se logró determinar que el hombre había pasado caminando cerca al Gun Club, en la calle 82 con 7. Finalmente, la historia dio un giro inesperado cuando su familia logró determinar que la última ubicación de uno de sus teléfonos era el municipio de Choachí.

En el caso de Giovanny, luego de tres días de angustia y extenuantes jornadas de búsqueda, las autoridades confirmaron que apareció en el municipio de Chía, en un conjunto residencial donde vive uno de sus hermanos. El hombre apareció desorientado, con heridas leves y sin sus pertenencias personales. En el momento no se descartó un posible uso de escopolamina.

Desapariciones

Una persona reportada como extraviada y desaparecida por su familia o personas cercanas, es aquella cuyo paradero se desconoce y puede estar siendo víctima de algún delito. “Un vivo ejemplo es lo que hemos observado en lo corrido de los últimos años, pues estas personas reportadas como extraviadas y desaparecidas aparecieron vivos, algunas fueron víctimas de sustancias narcóticas como escopolamina y demás sustancias similares. En otros casos aparecieron muertos, desconociendo el origen de estos hechos”, se lee en el documento del proyecto de acuerdo por medio del cual el Concejo Distrital busca implementar la creación del registro distrital de personas reportadas como extraviadas y desaparecidas en la capital.

La desaparición de personas en Bogotá es uno de los fenómenos de inseguridad que más trabajo les ha costado a las administraciones distritales que cada año confrontan una compleja problemática. Según datos oficiales, a partir del 2021 las cifras se han exacerbado año tras año, y si bien se evidencian leves fluctuaciones de aumento y descenso de los índices, la realidad es que en la ciudad se siguen desapareciendo, en promedio, seis personas al día, con más de 2.000 casos por año, sin que se tenga un diagnóstico puntual de la situación.

Según cifras del Instituto Nacional de Medicina Legal (INML), con base en el promedio de 2.000 desapariciones anuales en la capital, en el año 2021, el reporte general fue de 2.007 personas desaparecidas; en el 2022, la cifra aumentó un 22 %, es decir, se reportaron 2.446 desapariciones. En el 2021, la cifra apenas se redujo en un 0,4 % y se reportaron 2.435 casos. Para el 2023, la cifra se redujo un 2 % y se reportaron 2.3378 personas desaparecidas. Es decir, que desde que la cifra se elevó un 22 %, solamente se ha podido reducir poco más del 2 % el índice de personas desaparecidas.

Este año la situación no parece mejorar. Según el INML, con corte en abril, en Bogotá se han reportado, 705 desapariciones.

¿Por qué tantas personas desaparecen en Bogotá?

Este año en Bogotá se han conocido casos que dan cuenta de casos de desaparición voluntaria o por casos, que, en efecto, responden a hechos delictivos que conllevan a la desaparición temporal de dicha persona. Y en los casos más graves, a la muerte de la persona reportada.

Desaparición por voluntad propia

En estos casos, se trata de personas que quieren evadirse de su núcleo familiar o de sus viviendas. En esos casos, las desapariciones responden a diversas circunstancias que van desde casos de deudas, relaciones amorosas, crisis económica, violencia intrafamiliar, consumo de sustancias o trastornos mentales, entre otros factores que las autoridades han podido rastrear.

Un caso que ejemplifica esta situación sucedió con una menor de 17 años que fue reportada como desaparecida luego de que saliera de su vivienda, en la localidad de Rafael Uribe Uribe a pasear a su perro el pasado 21 de agosto.

Ese día, la adolescente debía asistir a clases entre las 12:30 p.m. y las 6:00 p.m., pero las actividades fueron canceladas, por lo que decidió quedarse en casa. Cerca de las 6:00 p.m., cuando su hermana notó que no había regresado, la familia intentó contactarla, pero su teléfono ya estaba apagado. Ante la situación, su padre acudió al CAI del Restrepo, donde le informaron que debía esperar 72 horas para formalizar la denuncia.

Como suele suceder en estos casos, durante el proceso de búsqueda, la familia se encontró con información falsa. Les dijeron que la vieron en estaciones de Transmilenio en compañía de personas cuyas descripciones cambiaban con cada relato. Finalmente, casi una semana después de su desaparición, la menor apareció en el Portal de transmilenio de la Calle 80. Allí se acercó a una patrulla y manifestó que se encontraba con un amigo en Facatativá, sin embargo, posteriormente se confirmó que la menor estaba con un joven que sería su novio. Por ser menor de edad, fue sometida a exámenes para descartar alguna clase de abuso. La familia manifestó que en los días previos no había pasado ningún problema que suscitara su ausencia.

Si bien a este tipo de casos se les suele restar importancia porque se piensa que se trata solamente de una actitud rebelde o de una escapada para irse de fiesta o con la pareja, ante las cifras de desapariciones de menores de edad, las autoridades señalan que estos casos nunca se deben minimizar y si bien puede tratarse de algo menor, es importante reportar todos los casos, máxime, cuando en la mayoría de los casos, la “pareja” de los menores resulta ser una persona mayor de edad.

Casos de desaparición que derivan en la muerte de la persona

Ronald Eduardo Zaray Parra, de 44 años, fue reportado como desaparecido el lunes 22 de abril luego de que sus familiares y amigos le perdieran el rastro. Poco menos de 24 horas después de su desaparición, un amigo de Zaray reportó que la reja de la casa en donde residía estaba violentada. Fue entonces cuando los bomberos acudieron al lugar y, a su ingreso, se encontraron con el cuerpo sin vida del hombre. El cadáver presentaba signos de asfixia y varios golpes contundentes.

Si bien el caso puede responder a un hechode homicidio durante un hurto, ejemplifica varios casos de desaparición similares en los que a la víctima se le pierde el rastro y posteriormente es hallada sin vida en circunstancias que, por lo general, responden a casos de hurto en donde no necesariamente el objetivo es la muerte de la víctima.

Cabe mencionar que, según el Concejo de Bogotá, que en el caso de las desapariciones forzosas, se han identificado tres tipos de perpetradores:

1. Agentes independientes: Donde solo actúa un agresor, o como mucho cuenta con un colaborador necesario, un cómplice, un encubridor, etc., pero no están organizados.

2. Agentes estatales: Asociada a situaciones del conflicto armado interno, guerras civiles o internas, acá donde operan diferentes actores, como miembros de las fuerzas militares, por integrantes de sus servicios de inteligencia, cuerpos de seguridad del Estado y grupos paramilitares.

3. Organizaciones criminales: Casos en los que detrás de una desaparición existe un grupo criminal organizado, como puede ser un cártel, una mafia, un grupo terrorista, etc.

Las cifras

Como ya se mencionó, el año pasado en Bogotá se reportaron 2,378 casos de desapariciones, es decir, al menos 6 personas por día se desaparecieron en la ciudad. Preocupa sobre manera que, de acuerdo con el INMD, el rango de edad más común de personas desaparecidas en Bogotá se da entre los menores de 15 años, que para el 2023 sumaron 797 casos, seguido por el rango de 20 a 29 años, con 533 casos.

Este año, hasta abril, se reportaron 705 casos. De ese total, 19 personas aparecieron muertas, 264 vivas y 422 permanecen desaparecidas.

Según Medicina Legal, las desapariciones hasta abril tenían los siguientes rangos de edad: Primera infancia (de 0 a 5 años) 14 casos; Infancia (de 6 a 11 años) 14 casos; Adolescencia (de 12 a 17 años) 223 casos; Juventud (de 18 a 28 años) 166 casos; Adultez (de 29 a 59 años) 229 casos y en Adultos mayores (más de 60 años) fueron 59 las desapariciones reportadas. A nivel nacional, Bogotá sigue siendo la ciudad que más casos de desapariciones concentra, con un 40% de los reportes a nivel nacional.

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¿Qué hacer para reportar un caso de desaparición de manera efectiva?

En primer lugar, según Medicina Legal, cuando se presume la desaparición de una persona, lo primero, es iniciar la búsqueda con su círculo más cercano, es decir, familiares, amigos, compañeros de trabajo o de estudio según el caso, o vecinos. Además, tratar de recorrer los sectores aledaños a donde la persona fue vista por última vez, indagar en estaciones de Policía, centros médicos, ICBF y, finalmente, Fiscalía.

¿Es verdad que debo esperar 72 horas para denunciar?

No. Si bien en muchos casos, como el de la menor que desapareció mientras paseaba su perro, cuando los allegados a la persona van a instaurar la denuncia, se les indica que la búsqueda solo puede activarse 72 horas después de sucedió el hecho.

Sin embargo, ante los muros que ese periodo de tiempo impone para iniciar un proceso de búsqueda urgente, la Fiscalía cuenta con el Mecanismo de Búsqueda Urgente (MBU), cuyo objetivo fundamental es permitir que las autoridades judiciales ordenen de forma inmediata las diligencias necesarias para la localización de la persona.

La normativa del MBU, estipulada en la Ley 971 de 2005, no determina un tiempo mínimo de espera y señala que el mecanismo puede activarse en cualquier momento una vez se evidencie la desaparición de una persona. Es importante que tenga en cuenta que el mecanismo dura dos meses. Transcurrido ese tiempo las autoridades reportan si la persona aparecio viva, si apareció muerta o si no ha sido posibl ubicarla. Luego el proceso seguirá su curso normal.

Para avanzar en la consolidación de un conjunto de herramientas y mecanismos que mejores sustancialmente los métodos de búsqueda y el registro de personas desaparecidas en Bogotá, el Concejo avanza en la construcción del Registro Distrital de Personas reportadas como extraviadas y desaparecidas, “como un instrumento para consolidar la información oficial sobre el fenómeno de desaparición voluntaria e involuntaria en Bogotá D.C”, señala el proyecto de acuerdo que le da luz verde al proyecto

Algunos de los lineamientos del Registro son:

• Promover la caracterización del fenómeno de desaparición en el Distrito Capital y su relación con la presunta comisión de diferentes delitos, identificando los factores de riesgo que permita reducir los casos en la ciudad.
• Priorizar de inmediato la denuncia del extravió o desaparecimiento de niños, niñas y adolescentes – NNA, incluyendo la autorización de tratamiento de datos de quien tenga la custodia y/o representación legal de ellos.
• Generar estrategias de difusión y divulgación de manera inmediata bajo los principios de celeridad, eficacia y publicidad para los reportes del extravió o desaparecimiento de los niños, niñas y adolescentes – NNA.
• Divulgar los derechos que tienen las familias de las personas reportadas como extraviadas o desaparecidas.
• Facilitar la divulgación a la ciudadanía de la información de las personas extraviadas y desaparecidas para activar su identificación y búsqueda inmediata, mediante el desarrollo de una herramienta de contenido digital.
• Impulsar la publicación de la información estadística periódica para la toma de decisiones, que articule con los sistemas oficiales del ámbito nacional

¿Qué debo hacer para reportar una persona desaparecida en Bogotá?

Para contactarse con la Fiscalía, la ciudadanía puede llamar al 01 8000 9197 48. En Bogotá al (601) 570 2000, opción 7, o también puede marcar desde su celular al 122.

Por su parte, la Policía tiene a disposición la línea telefónica 123, en donde las personas reciben asesoría para realizar la respectiva denuncia.

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