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Pese a que más de 2.000 policías se desplegaron para evitar hechos delincuenciales en la ciudad durante el fin de semana de la celebración de Halloween, el concejal Oscar Ramírez Vahos (Centro Democrático), denunció que en la zona T se habrían utilizado las calabazas, con las que usualmente los niños piden dulces, para vender drogas.
En un recorrido por las zonas de fiesta más frecuentadas de la capital evidenciaron como los vendedores de droga usaron bolsas o calabazas, con los menores de edad suelen pedir los dulces, para vender estupefacientes como cocaína y alucinógenos.
“El microtráfico también se disfrazó en Halloween. Es inaudito que en plena zona T, y con supuestas medidas de seguridad especiales para la fecha, el microtráfico siga operando a sus anchas y aquí no pase nada. La política de seguridad en Bogotá es un fracaso: los llamados jibaros, distribuyen la droga en bolsas o calabazas donde los niños piden los dulces y aquí no pasa nada”, destacó el concejal.
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En video, se puede observar como un hombre ofrece drogas y sitios para consumir en el sector de la zona T. El sujeto ofrece bolsas de perico a $50.000 y una vez el comprador accede a pagar, le piden que tome la droga de una bolsa de tela con forma de calabaza para no levantar sospechas.
Sin embargo, la Policía de Bogotá logró la captura de un sujeto que bajo esta modalidad portaba nueve dosis de perico.
Semanas atrás, el concejal había denunciado ante el Concejo de Bogotá y las autoridades que en varios bares y amanecederos de la capital se estarían vendiendo drogas y permitiendo su consumo en los establecminetos. Además, serían incluidas en las facturas y con cobro del impuesto al valor agregado (IVA).
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“No podemos permitir que ni un solo centímetro cuadrado más de Bogotá caiga en manos de jíbaros, ya que el microtráfico es la madre de todos los problemas de inseguridad que aquejan a Bogotá y amenazan con transformarse en auténtico narcotráfico en nuestros barrios, parques y avenidas. El microtráfico salió de las ollas y ahora opera sin ninguna restricción en zonas de ocio de la ciudad como se evidencia en la llamada Zona T. En Bogotá el microtráfico ya tiene IVA”, resaltó Ramírez Vahos.