En cárcel El Buen Pastor de Bogotá viven 22 niños con sus madres en hacinamiento
Desde el Concejo Distrital la bancada de mujeres alertó por las condiciones de reclusas y de sus hijos en materia de atención, alimentación y reclusión. Algunos cabildantes asistirán al penal el 21 de septiembre para brindar ayudas y reclamar asistencia por parte de la administración.
-Redacción Bogotá - bogota@elespectador.com
La bancada de mujeres del Concejo de Bogotá, integrada por 15 cabildantes, alertó este miércoles que en la cárcel de mujeres El Buen Pastor viven junto a sus madres en cautiverio 22 menores (13 niñas y nueve niños entre cero y tres años), quienes también son víctimas de las condiciones de hacinamiento que afectan al centro carcelario.
Según los cabildantes, actualmente en la prisión se encuentran 15 reclusas gestantes, así como 14 internas portadoras del virus del VIH que reciben tratamiento. Sin embargo, hay reporte de un caso de tuberculosis y de otras 17 mujeres con sífilis que no están recibiendo tratamiento.
Frente al hacinamiento, la bancada alertó que, sumado a un deterioro grave de las celdas, en espacios húmedos de dos metros por dos metros conviven las internas con sus hijos y supuestos deficientes controles prenatales, pues, aunque la cárcel cuenta con un equipo de ecografía, es muy antiguo y no permite reconocer imágenes y se carece de profesionales idóneos para el seguimiento del embarazo.
“Tal fue el caso de la interna Juana Durán quien por falta de ecografías previas no sabía que esperaba gemelos y en el momento del parto tuvo que escoger con cuál de los dos hijos se quedaba en el penal”, sostuvieron los concejales.
“También es inconstante la presencia de profesionales de la salud. Según reclusas psicólogos, auxiliares y jefe de enfermería no se han vuelto a presentar hace dos meses. Profamilia no envía ginecólogos, pediatras y enfermeras y no se cuenta con atención médica pediátrica”, agregó la bancada, precisando que en el jardín infantil que hay dentro de la misma cárcel “las porciones de comida son muy pequeñas, sin variedad en la minuta y sin especificaciones nutricionales”.
A todo esto se suman, de acuerdo con los denunciantes, el suministro mínimo de productos de aseo, especialmente de toallas higiénicas, lo cual ha propiciado la formación de un ‘cartel’ de las toallas dentro del penal.
Por todas estas dificultades, los concejales anunciaron que el 21 de septiembre visitarán el penal buscando que el Distrito escuche a las internas y brinde solución a las problemáticas. También se espera que las reclusas y sus hijos reciban ayudas como implementos de aseo personal, ropa y juguetes recolectadas por el Concejo, empresas privadas y ciudadanía.
“Esperamos que con esta iniciativa se mejore la calidad de vida tanto de las reclusas como de sus hijos y se pueda garantizar de ahora en adelante una vida más digna, especialmente en las etapas de maternidad y primera infancia dentro del centro penitenciario”, manifestó la presidenta de la bancada, Olga Victoria Rubio (Mira).
* * *
Si quiere conocer más sobre lo que pasa en Bogotá, lo invitamos a seguir nuestra página en Facebook:
La bancada de mujeres del Concejo de Bogotá, integrada por 15 cabildantes, alertó este miércoles que en la cárcel de mujeres El Buen Pastor viven junto a sus madres en cautiverio 22 menores (13 niñas y nueve niños entre cero y tres años), quienes también son víctimas de las condiciones de hacinamiento que afectan al centro carcelario.
Según los cabildantes, actualmente en la prisión se encuentran 15 reclusas gestantes, así como 14 internas portadoras del virus del VIH que reciben tratamiento. Sin embargo, hay reporte de un caso de tuberculosis y de otras 17 mujeres con sífilis que no están recibiendo tratamiento.
Frente al hacinamiento, la bancada alertó que, sumado a un deterioro grave de las celdas, en espacios húmedos de dos metros por dos metros conviven las internas con sus hijos y supuestos deficientes controles prenatales, pues, aunque la cárcel cuenta con un equipo de ecografía, es muy antiguo y no permite reconocer imágenes y se carece de profesionales idóneos para el seguimiento del embarazo.
“Tal fue el caso de la interna Juana Durán quien por falta de ecografías previas no sabía que esperaba gemelos y en el momento del parto tuvo que escoger con cuál de los dos hijos se quedaba en el penal”, sostuvieron los concejales.
“También es inconstante la presencia de profesionales de la salud. Según reclusas psicólogos, auxiliares y jefe de enfermería no se han vuelto a presentar hace dos meses. Profamilia no envía ginecólogos, pediatras y enfermeras y no se cuenta con atención médica pediátrica”, agregó la bancada, precisando que en el jardín infantil que hay dentro de la misma cárcel “las porciones de comida son muy pequeñas, sin variedad en la minuta y sin especificaciones nutricionales”.
A todo esto se suman, de acuerdo con los denunciantes, el suministro mínimo de productos de aseo, especialmente de toallas higiénicas, lo cual ha propiciado la formación de un ‘cartel’ de las toallas dentro del penal.
Por todas estas dificultades, los concejales anunciaron que el 21 de septiembre visitarán el penal buscando que el Distrito escuche a las internas y brinde solución a las problemáticas. También se espera que las reclusas y sus hijos reciban ayudas como implementos de aseo personal, ropa y juguetes recolectadas por el Concejo, empresas privadas y ciudadanía.
“Esperamos que con esta iniciativa se mejore la calidad de vida tanto de las reclusas como de sus hijos y se pueda garantizar de ahora en adelante una vida más digna, especialmente en las etapas de maternidad y primera infancia dentro del centro penitenciario”, manifestó la presidenta de la bancada, Olga Victoria Rubio (Mira).
* * *
Si quiere conocer más sobre lo que pasa en Bogotá, lo invitamos a seguir nuestra página en Facebook: