“Estamos a la espera de un análisis sobre RegioTram norte”: gerente de la EFR

Se vienen semanas clave para el ansiado proyecto Regiotram del Norte. Se espera que pronto se reanuden las mesas técnicas entre la Gobernación de Cundinamarca, Findeter, la Empresa Férrea Regional (EFR), el Distrito y el ministerio de Transporte, para insistir en el aval de la Nación para la obra.

Se vienen semanas clave para el ansiado proyecto Regiotram del Norte. Se espera que pronto se reanuden las mesas técnicas entre la Gobernación de Cundinamarca, Findeter, la Empresa Férrea Regional (EFR), el Distrito y el ministerio de Transporte, para insistir en el aval de la Nación para la obra.

El Regiotram del Norte será la segunda línea del Tren de Cercanías de la sabana, que conectará al corazón de Bogotá con Chía, Cajicá y Zipaquirá. El proyecto se encuentra aún en estudios de factibilidad, a pesar de que el contrato para este fin se adjudicó a finales de 2020. La idea inicial es que sea eléctrico, tenga 17 estaciones en 40 km y beneficie diariamente a 150 mil pasajeros de Bogotá y Cundinamarca.

El Espectador habló con Orlando Santiago Cely, gerente de la Empresa Férrea Regional, para conocer los avances de este y otros proyectos bajo la tutela de la empresa.

¿Qué proyectos tiene a su cargo la Empresa Regional Férrea?

Hoy tenemos a cargo tres proyectos. En primer lugar, está el Regiotram de Occidente, pero luego tenemos la extensión de Transmilenio, en Soacha, en sus fases dos y tres. Además, del Regiotram del Norte. Cada uno tiene diferente nivel de avance, entonces lo que hacemos es encargarnos de que el proyecto se adelante, así como efectuar y supervisar las respectivas contrataciones.

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¿Cómo está estructurado el Regiotram de occidente?

Será el primer tren de cercanías que tenga Colombia. Se trata de un trazado de 40 km, conectando los municipios de la Sabana Occidente con el centro de Bogotá. Su recorrido comenzará Facatativá, pasará por Madrid, Mosquera, y Funza, para luego ingresar a Bogotá hasta la calle 26 con avenida Caracas, donde se prevé será la conexión con la futura estación central del metro.

¿Qué beneficios traerá el proyecto?

El proyecto lo que busca es utilizar el corredor Ferro existente, que no tenía uso, y destinarlo para el movimiento de pasajeros. El gran beneficio será para los ciudadanos de la Sabana Occidente, ya que acortarán sus viajes diarios en una hora, cuando actualmente se pueden gastar hasta dos o tres. Pero adicionalmente, el gran beneficio será en términos del medio ambiente, pues al ser un tren 100% eléctrico, logrará reducir la contaminación que hoy se tiene por transportar esas mismas personas.

¿Cómo va el proyecto, qué avance tiene?

Tenemos a un concesionario que debe diseñar, construir y mantener estos 40 kilómetros del tren de cercanías. Estamos finalizando diseños y hemos avanzado en obras importantes, como el patio taller, que está en El Corso, en el territorio de Facatativá, el cual cuenta con un avance del 19%. Lo que sigue son trabajos sobre el corredor, que esperamos comiencen en las próximas semanas. Con el concesionario estamos organizando toda la logística para empezar las obras. Esperamos es que, a finales de 2026, estén las obras que nos permitan empezar la siguiente etapa: la de pruebas, sin pasajeros. Esto garantiza que todo el sistema esté a punto para la fase comercial a mediados del 2027.

¿Podría contarnos las particularidades de las fases 2 y 3 de Transmilenio para Soacha?

Vamos a construir una troncal tradicional, como las de Bogotá. Será la continuación de lo que hoy llega a Soacha, por la autopista Sur. Recordemos que hoy operamos hasta la estación San Mateo, esto lo que se conoce como la fase 1 y 2. En la fase 3 habrá una extensión de 4 kilómetros adicionales, generando una mayor cobertura en todo el municipio.

¿Y cuál es el avance y la fecha de entrega?

El patio portal está casi terminado. Todas las obras en el corredor están a punto de ser terminadas. Lo que esperamos es que todas las obras queden finalizadas a diciembre del 2025, para que Transmilenio entre en operación. Sin embargo, hemos estado en conversaciones con Transmilenio para ver si hay la posibilidad de una operación más temprana, teniendo en cuenta los avances de la obra y patio portal.

¿Qué pasa con el Regiotram del Norte?

Será nuestra segunda línea de tren de cercanías, que busca es conectar a Bogotá con los municipios de La Sabana Centro. Tendrá una longitud de cerca de 50 kilómetros, también utilizando el corredor férreo existente, para conectar a estos pasajeros con el centro de la ciudad.

¿Qué ocurrió tras las observaciones del Gobierno Nacional?

Tenemos diseños de factibilidad. Estamos dialogando con el Gobierno Nacional, para avanzar en el cumplimiento de todos los requisitos, con el fin de obtener la cofinanciación de la Nación. Recordemos que cada uno de estos proyectos, tanto Regiotram de Occidente, como Transmilenio, son financiados 70% por la Nación. Entonces estamos cerrando estos detalles, para la obtención de los recursos y que podamos comenzar a contratar.

Pero… ¿Qué ocurrió con el requisito del gobierno para que ese tren también efectuara labores de carga?

El Gobierno nos ha ratificado su compromiso con el proyecto. Estamos revisando cuál es la mejor manera de movilizar la carga al interior de la ciudad. La Nación adelanta un estudio para analizar cómo hacerlo, para conectar Bogotá con los puertos que hoy se tienen, tanto en el Atlántico como en el Pacífico. Nos ha mostrado cuáles son sus análisis sobre las necesidades de conectar los dos puertos con estas zonas céntricas, pero, sobre todo, la necesidad de que esta carga ingrese o no Bogotá

¿Y qué alternativas arrojaron estos análisis?

Lo que nos han manifestado es que próximamente nos van a mostrar su evaluación final. Con base en eso haremos los ajustes necesarios. Lo que más nos han mostrado es que lo fundamental es que la carga vaya a los puertos, más no que ingrese a la ciudad. Esa es la hipótesis que queremos nosotros, en la cual, la carga que ingrese a Bogotá no lo haga a través del tren, sino a través de otro tipo de vehículos. Y que la cargade mayor proporción, busque las redes ferroviarias desde una zona periférica de Bogotá. El Gobierno nos ha pedido un espacio para evaluar estas opciones, pero continúan comprometidos con el proyecto.

¿Pero esta propuesta es de ustedes o del Gobierno Nacional?

Es del Gobierno Nacional. El gobierno nacional es quien maneja todo el esquema de carga del país. Nuestro proyecto es netamente de pasajeros. Creo que el Gobierno hoy está teniendo un abanico más amplio de alternativas y de necesidades de movilización de carga, ya que nos han hablado de necesidades de carga tanto del Occidente como del Norte de la sabana de Bogotá y que ambas se conecten con los puertos.

¿Cuándo podrían salir estos resultados?

En una reunión reciente que tuvimos con el ministerio de Transporte nos manifestaron que los análisis están muy avanzados. Esperamos que en las próximas semanas nos muestran resultados y, con base en eso, veremos que ajuste o qué necesidad de complementación se tendría con el proyecto regional de del Norte.

¿Esos ajustes cambiarían las estaciones o aspectos estructurales del Regiotram?

Pues el trazado sigue utilizando el corredor Ferro existente, por lo tanto, no debería tener ningún cambio. Si hay ajustes, a lo sumo será la inclusión de una o dos estaciones. La realidad es que es un proyecto que hará el mismo recorrido que hoy hace el tren de la Sabana, solamente que este proyecto, por sus dimensiones, ya no va a ser una sola línea férrea, sino que van a ser dos, una en cada sentido, para una operación continua.

¿El tren de la sabana desaparecería con la llegada del Regiotram Norte?

El tren de la Sabana ya cumplió su ciclo de vida, de acuerdo las especificaciones del momento para el sistema ferroviario. El tren de la Sabana utiliza un ancho de vía que se conoce como trocha angosta que ya no se produce en el mundo. Este tren ya no podrá seguir operando con el Regional del Norte en operación.

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