Estrategia de seguridad de Galán, ¿el aumento de policías es la solución?
La mañana de este lunes 26 de febrero, el alcalde mayor, en rueda de prensa con la policía y la fiscalía, anunció cambios importantes en su estrategia de seguridad para hacerle frente a la crisis de seguridad por la que atraviesa la ciudad.
Hoy la administración Galán completa 57 días de gestión, periodo en el que ha tenido que enfrentar todo tipo de emergencias como los incendios forestales que afectaron 60 hectáreas de bosque de los Cerros Orientales, los problemas de salud del mismo alcalde y la que más le preocupa a los ciudadanos, un crítico aumento en casos de inseguridad que se han elevado a lo largo y ancho de la ciudad. Es claro, como lo ha dicho el mismo alcalde, que la criminalidad y sus tentáculos no son un problema de percepción, en efecto la situación se está saliendo de las manos y las medidas que se han tomado hasta el momento, si bien han dado resultados, se perciben insuficientes. Especialmente con los recientes casos de hurto a establecimientos comerciales.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
Hoy la administración Galán completa 57 días de gestión, periodo en el que ha tenido que enfrentar todo tipo de emergencias como los incendios forestales que afectaron 60 hectáreas de bosque de los Cerros Orientales, los problemas de salud del mismo alcalde y la que más le preocupa a los ciudadanos, un crítico aumento en casos de inseguridad que se han elevado a lo largo y ancho de la ciudad. Es claro, como lo ha dicho el mismo alcalde, que la criminalidad y sus tentáculos no son un problema de percepción, en efecto la situación se está saliendo de las manos y las medidas que se han tomado hasta el momento, si bien han dado resultados, se perciben insuficientes. Especialmente con los recientes casos de hurto a establecimientos comerciales.
En contexto: Inseguridad en Bogotá: ¿pánico colectivo o realidad?
Ante este panorama, en la mañana del lunes 26 de febrero, el alcalde ofreció una rueda de prensa en compañía del secretario de Seguridad, César Restrepo; el comandante de la Mebog, Daniel Gualdrón; y la directora seccional de fiscalías de Bogotá, Leonor Merchán Lopera, en la cual se hicieron varios anuncios claves que hacen parte de la estrategia de seguridad ‘Bogotá camina segura’, la cual hace parte del plan de gobierno del alcalde y se empezó a implementar desde los primeros días de su administración.
“Somos conscientes de la problemática de seguridad que está viviendo la ciudad, estamos con una estrategia de da resultados pero que requiere de ajustes permanentes. Y no vamos a descansar, articulados entre todos, Alcaldía, Policía y Fiscalía, para enfrentar de manera efectiva estos delincuentes y lograr que Bogotá vuelva a caminar segura. Esa es nuestra apuesta principal, indicó el alcalde durante la rueda de prensa.
Más pie de fuerza
La nuez de la medida tiene que ver con el aumento de efectivos policiales en las calles de la ciudad. La semana pasada el Distrito anunció la llegada de 700 uniformados que se incorporaron para luchar contra los delitos que la administración distrital focalizó, al ser los más frecuentes, estos son: hurto, homicidio, microtráfico y la extorsión.
“Este será un esfuerzo sostenido que se va a mantener para fortalecer las capacidades de la Policía Metropolitana, y articularse con la fiscalía general de la Nación”, aseguró el primer mandatario de la capital durante el anuncio del plan de choque.
Sumados a esos 700 uniformados, se anunció la llegada de 100 policías adicionales para fortalecer las labores de un comando ideado específicamente para combatir el hurto y el homicidio en puntos donde los índices de criminalidad son mayores
“Se priorizaron cinco localidades con 17 microterritorios en donde se ha focalizado el hurto, especialmente en Chapinero, Usaquén, la parte alta de Suba, Teusaquillo y Engativá. Además, hay cuatro áreas relacionadas con la extorsión que también fueron priorizadas, como la Av 1° de mayo con carrera 50, el siete de agosto, las partes bajas de Kennedy y Bosa y sectores de Suba. Allí se están realizando acciones preventivas en horas determinadas, de 6: a.m. a 11:00 p.m y de 11:00 p.m. a 6:00 a.m. para completar una labor de 24 horas”, señaló el comandante de la Mebog.
También anunciaron el ingreso de policías encubiertos bajo una operación denominada ‘Arcángel’. “Personal de inteligencia estará caracterizado en sitios como Trasmilenio, resturantes, bares y algunos sectores de parques”
Para este último componente, el coronel añadió que fueron incorporados 150 policías que entran esta semana a apoyar labores. 50 estarán destinados a inteligencia, otros 50 para policía judicial, y 50 repartidos en las dependencias de Infancia y Adolesencia y Turismo. “Todas nuestras capacidades están en territorio”, agregó el coronel.
“Definitivamente, el aumento del pie de fuerza no es una medida que baste para la solución de un problema tan complejo como la inseguridad, el cual viene, además, desde administraciones anteriores y que incluso se replica a nivel nacional. Las medidas anunciadas constituyen un plan de choque por la emergencia que supone la actual coyuntura, sin embargo, hacen falta más cosas. La presencia de policía es importante, pero más allá de aumentar el número de policía, hay que revisar cuántos uniformados realmente están como fuerza disponible y cuántos realizan verdaderamente labores relacionadas con la seguridad y la prevención criminal”, señaló Luis Echavarría, consultor de seguridad de EA consultores.
Más noticias de Bogotá: Lucía Bastidas es designada como nueva directora del Dadep
Con esta visión coincide Hugo Acero, exsecretario de seguridad de Bogotá, quien señala que, “no basta con el aumento del pie de fuerza de la Policía, ayudaría, pero no es suficiente. Hay que reconocer que se está ante estructuras criminales organizadas, verdaderas empresas y microempresas criminales y para atacarlas y desarticularlas se requiere fortalecer en equipos, hombres y mujeres expertos en labores de inteligencia e investigación criminal”.
El aumento en el pie de fuerza, además de los 800 uniformados adicionales, también tiene que ver con la entrada en operación de 12 drones de la policía que apoyarán las labores de patrullaje en tierra y el apoyo de tres helicópteros, los cuales sobrevolarán vías principales, realizarán vuelos entre las 5:00 a.m. y las 8:00 a.m. en la Circunvalar, la Av de las Américas, Chapinero y Usaquén, según indicó el general Gualdrón.
Drones y helicópteros
“El tema de los drones, para labores de prevención de delitos, no lo veo tan efectivo. En efecto, cumplen una labor de disuasión y vigilancia. Y pasa lo mismo con el tema de los helicópteros, que más allá del anuncio y de saber que están sobrevolando la ciudad, es difícil medir si van a tener un impacto real en la disminución de índices de criminalidad. Enfocar los territorios con más incidencia criminal y fortalecer la inteligencia, tal y como se anunció en la rueda de prensa, es clave. No solo es presencia de Policía en la calle, debe haber trabajos de inteligencia que entiendan cómo funciona el mercado negro de teléfonos, relojes, vehículos, aparatos electrónicos, etcétera. Hace falta más contundencia y más estrategias pensadas en ese particular”, Echavarría.
Los anuncios que modifican la estrategia de seguridad constituyen un plan de choque en relación con la coyuntura, no obstante, las acciones pensadas a largo plazo permanecen en el papel y en la práctica, durante administraciones pasadas, no han funcionado, entonces, ¿qué hacer para mejorar ese vacío?
“Es fundamental revisar la articulación de los resultados de las autoridades y cómo funciona la aplicación de justicia. No sacamos nada con anunciar capturas si en el sistema judicial no hay espacio en las cárceles, o si los delincuentes logran evadir la administración de la justicia porque los procesos judiciales no avanzan. Otro punto es el fortalecimiento de la relación de la ciudadanía con la Policía, porque gran parte de los vacíos en los planes de seguridad recaen en esa situación, si la gente no confía en la Policía, no se denuncia y se toma justicia por mano propia, por ejemplo. Y en ese sentido, otro elemento fundamental para mejorar la seguridad a largo plazo tiene que ver con fortalecer el sistema de denuncias”, responde a ese interrogante, Andrés Macías Tolosa, investigador de la Universidad Externado de Colombia.
La estrategia, horas después de los anuncios, empezó a andar, incluso, en la tarde del lunes, según informó la Policía, en el barrio Santa Cecilia de Fontibón, un sujeto murió en medio de un intercambio de disparos con la Policía luego de que le pidieran un registro y huyera hacia un restaurante del sector. El sujeto, quien de acuerdo con versiones preliminares llevaba consigo una granada, murió tras enfrentarse a tiros con las autoridades.
Si bien la coyuntura exige acciones urgentes, las medidas a largo plazo implementadas en gobiernos anteriores, como se ve, no han funcionado, lo que tendría que ver en parte con que cada administración llega a implementar sus propios derroteros, o a que, de plano, las estrategias no han sido bien implementadas. En conclusión, el plan anunciado por Galán es lo que se espera ante una situación como la que atraviesa la ciudad, no obstante, pese a los índices que indican reducciones sustanciales en la criminalidad, la percepción ciudadana empeora con los días y hoy, quien vive en Bogotá, no camina seguro.
Lea también: Tiroteo en Fontibón deja una persona fallecida, que tenía una granada en su poder