“Hay que recuperar el río Bogotá”, Luis Sanabria, exdirector de la CAR

Hace 3 años, en 2019, Luis Fernado Sanabria fue elegido como el director de la Corporación Autónoma de Cundinamarca. Durante su gestión se priorizaron licencias ambientales y la apuesta a otras iniciativas propias de la entidad, en proyectos relacionados con el agua y el río Bogotá. El más sobresaliente consistió en el aval que salió desde su oficina para el proyecto PETAR Canoas, que plantea la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales que permita descontaminar la cuenca del río Bogotá en un 70 %.

Hace 3 años, en 2019, Luis Fernado Sanabria fue elegido como el director de la Corporación Autónoma de Cundinamarca. Durante su gestión se priorizaron licencias ambientales y la apuesta a otras iniciativas propias de la entidad, en proyectos relacionados con el agua y el río Bogotá. El más sobresaliente consistió en el aval que salió desde su oficina para el proyecto PETAR Canoas, que plantea la construcción de una planta de tratamiento de aguas residuales que permita descontaminar la cuenca del río Bogotá en un 70 %.

La revitalización de este afluente fue una de las principales preocupaciones de Sanabria y el legado que desea dejarle al próximo director de la entidad, que será elegido hoy por la junta directiva.

Sanabria, de 49 años, es abogado de la Universidad Católica de Colombia y especialista en Derecho Administrativo de la Universidad Santo Tomás. Está vinculado a la CAR desde 2013, en donde ha ocupado diferentes cargos como: Secretario General; Asesor de la Dirección General; director regional en las provincias de Chiquinquirá y Sumapaz; director regional (e) en Soacha, Sabana Centro y Bogotá – La Calera; Jefe (e) de Talento Humano, director (e) de Cultura Ambiental y Servicio Al Ciudadano, entre otros.

Sanabria habló con El Espectador sobre su gestión, los retos del próximo director, y los proyectos clave que actualmente dependen de la Corporación.

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Está a punto de finalizar su mandato en la CAR, ¿qué balance entrega sobre su gestión en la Corporación?

Terminamos un cuatrienio de grandes retos. Iniciamos una administración marcada por una pandemia que no nos detuvo y, por el contrario, nos llevó a buscar los caminos más eficientes para trabajar por el desarrollo ambiental del territorio y los resultados son positivos.

Hoy somos la primera corporación autónoma regional del país en recibir la Certificación Carbono Neutral del ICONTEC, gracias a nuestras políticas internas que contribuyen al desarrollo ambiental sostenible. Además, Contribuimos a la reducción del uso de plásticos en el territorio con la implementación de la política de cero plásticos de un solo uso en nuestros parques ecoturísticos.

También formulamos el Plan de manejo ambiental del complejo de humedales Ramsar en Bogotá, que contiene proyectos orientados a la conservación de once ecosistemas. Con la destinación de recursos para inversión en tecnología y formación en manejo adecuado de residuos, logramos la sustitución de vehículos de tracción animal usados por recuperadores ambientales de cuatro municipios (Mosquera, Madrid, Girardot y Facatativá).

Recuperamos y ampliamos la capacidad hidráulica de los ríos Balsillas y Bojacá e implementamos el plan de restauración del humedal Laguna La Herrera, de donde retiramos más de cuatro millones de metros cúbicos de sedimentos y maleza.

Construimos el Banco Municipal de Agua más grande del País, ubicado en Simijaca, que almacenará más de 50.000 metros cúbicos de agua para beneficiar a más de 11 mil habitantes; pero además garantizamos la recolección de 220 millones de litros de agua lluvia con la construcción en total de 10 de estos Bancos Municipales de Agua y 800 reservorios en todo el territorio.

Culminamos la construcción de las Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) de Ubaté, Fusagasugá, Manta y Ricaurte. Iniciamos la construcción de las plantas de Sopó y Susa, y firmamos un convenio para la construcción de la planta Chía I.

Atendimos más de 3.300 animales en nuestro Centro de Atención y Valoración de Fauna Silvestre, y liberamos más de 1.500 que culminaron exitosamente su rehabilitación.

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Beneficiamos a más de 51 mil familias con nuestro programa Lluvia para la Vida, y a otras 750 con estufas ecoeficientes que sustituyen las tradicionales de carbón y reducen la emisión de contaminantes.

En la laguna de Fúquene retiramos más de 10 millones de metros cúbicos de sedimentos de y alcanzamos más de 1.000 hectáreas de espejo de agua recuperados. Además Pusimos en marcha el proyecto de compostaje más grande del país, que tratará 2.800 toneladas al año de material retirado de la laguna para beneficiar a los habitantes del territorio que lo requieran en sus predios.

En el río Bogotá logramos la adecuación hidráulica en 111 kilómetros de las cuencas media y alta, y adquirimos los predios para continuar con las zonas de inundación controlada. También dimos apertura a las navegaciones pedagógicas para toda la comunidad e Intervinimos 186 hectáreas alrededor del afluente, para continuar con la consolidación del Parque Lineal.

También adelantamos la cofinanciación de 12 proyectos que han contribuido con el saneamiento del río y a la adaptación frente al riesgo del cambio climático; logramos la puesta en operación asistida de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales El Salitre, crucial para la descontaminación, y pusimos el marcha, junto con la Gobernación de Cundinamarca, la instalación de kioskos digitales en 42 municipios de la cuenca para ofrecer información del río a los habitantes de estas poblaciones para contribuir con ello a esa apropiación que necesitamos por parte de la comunidad.

¿Cuáles retos son los más importantes para el próximo director elegido?

Continuar con lo que venimos construyendo. La recuperación del río Bogotá es sin duda uno de los retos más importantes para quienes ejercemos el liderazgo en esta Corporación, que es tan solo uno de los organismos llamados a aportar en este objetivo, pero es la que ha venido liderando todo el proceso.

La recuperación del río Bogotá depende de todos y de continuar con la construcción de las plantas de tratamiento que se requieren en toda la cuenca para sanear sus aguas y sobre todo, seguir en el arduo trabajo de crear cultura y consciencia ambiental, para que los ciudadanos se apropien del río y aporten en su descontaminación.

También es importante continuar con la recuperación de la laguna de Fúquene. Este ecosistema es uno de los más importantes del altiplano cundiboyacense, al cual le hemos apostado con todo nuestro esfuerzo institucional. El proceso es lento, pero es significativo el avance que hemos logrado, hoy son más de mil hectáreas de espejo de agua las que hemos logrado restaurar.

¿Cómo avanza el tema de evaluación por parte de la entidad para la licencia que se requiere para la ampliación de la Av. Boyacá y otros puntos clave?

Con el fin de determinar si se puede otorgar o no la licencia ambiental y ante la solicitud presentada por la señora ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhammad, nuestro equipo evalúa técnica y jurídicamente el estudio de impacto ambiental, así como las intervenciones realizadas por los ciudadanos en la Audiencia Pública que realizamos el pasado 15 de septiembre.

La evaluación técnica y jurídica se realiza en desarrollo del Decreto 1076 de 2015 del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, así como en los términos de referencia aplicables para este tipo de proyectos. La evaluación determinará los posibles impactos a generarse por la construcción del proyecto y tiene en cuenta los componentes bióticos, abiótico y socio económicos, y con base en ello se tomará una decisión

Lo que buscamos es garantizar que las medidas de manejo presentadas estén enfocadas en evitar, disminuir y compensar los impactos presentados y legitimar la protección de los recursos naturales y de los ecosistemas presentes en el área del proyecto.

¿Cómo ve el panorama de la región como una gran despensa de alimentos y las áreas con vocación agrícola que el gobierno desea desplegar en el departamento a través del PND?

Los productores y campesinos del territorio son aliados importantes para el desarrollo sostenible de Cundinamarca y Boyacá. Desde la CAR buscamos acercarnos a productores y campesinos a través de proyectos de educación y cultura ambiental que fomentan el cuidado del valioso recurso; el suelo, que permite producir frutas, verduras y flores de gran calidad.

A través de programas como el Proyecto de Conservación del Agua y Suelo, conocido como Checua- PROCAS, capacitamos a familias campesinas, emprendedores, empresarios, e incluso ganaderos del territorio, en la implementación de prácticas amigables que cuiden este recurso, pero más importante, los motivamos a adoptar procesos que contribuyan a recuperar el suelo. En este 2023, cerca de 402 hectáreas productivas del territorio CAR han sido impactadas con nuestras estrategias para conservar el suelo, que redundan en un impacto positivo también para otros recursos como el agua, el aire y la biodiversidad.

Durante estos últimos cuatro años hemos capacitado a más de 3.200 productores y hemos implementado los “Días de Campo”, eventos en los que invitamos a campesinos y productores de un municipio para que vean, experimenten y sean testigos de los impactos positivos en la producción, en la economía y, lo más importante, que lo hagan justamente en el suelo de nuestros casos de éxito, que son productores que llevan años cuidando junto a nosotros este recurso.

Estas técnicas se complementan con talleres de producción más limpia, donde enseñamos a preparar insumos agropecuarios naturales y amigables con otros recursos como el agua y la biodiversidad. Estos bioinsumos, que pueden ser utilizados para fertilizar y como plaguicidas, también cuidan el bolsillo de los productores, ya que requieren ingredientes de bajo costo para su preparación.

¿Qué opinión le merecen las criticas que algunos sectores han hecho a la CAR, de que la entidad ha virado más hacia un sentir político que técnico?

Como en todo organismo público siempre habrá contradictores y detractores. Somos la corporación autónoma regional más grande del país, por supuesto eso hace que haya especial interés de distintos sectores. Aun así, hemos logrado cambiar en cierta medida esa percepción, hemos actuado de forma transparente y cercana con la comunidad, respondiendo a sus inquietudes y mostrando resultados.

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