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Poco a poco se conocen nuevas versiones de lo que rodeó crimen de Juan Felipe Rincón, hijo del inspector general de la Policía, William Rincón, quien fue asesinado el pasado fin de semana en el barrio Quiroga en medio de una riña con varios sujetos. Entre los detalles que han ido surgiendo, una versión aseguraría que, al parecer, el joven fallecido habría sostenido conversaciones de carácter sexual con dos menores de edad a través de redes sociales.
Si bien las declaraciones de la testigo continúan en investigación pues el caso es analizado minuciosamente por los investigadores, los detalles revelados por la testigo en Blu Radio, podrían darle un giro a la investigación.
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Nuevos detalles
De acuerdo con las declaraciones de la testigo, quien entregó su testimonio a la emisora, la discusión que terminó son el joven muerto, se desató porque, presuntamente, Juan Felipe Rincón habría sostenido conversaciones con dos niñas menores de edad, de 8 y 15 años, a través de la red social Instragam.
Familiares de las menores, señalan que se dieron cuenta de la situación, razón por la cual, citaron al joven en el barrio Quiroga para confrontarlo y supuestamente “entregarlo a las autoridades”, señaló la testigo al aire, cuya identidad protegió en el medio de comunicación por razones de su propia seguridad. No obstante, quedan las dudas de por qué las familias de las menores no acudieron a las autoridades antes de dicho encuentro.
Según el relato de la mujer: “Yo quiero que todo salga a la luz y todo se sepa cómo pasó realmente. Lo que pasa es que el hijo del general al parecer estaba hablando con dos menores de edad, una de 15 y una de 8 años. La familia de la menor de 8 años se dio cuenta de las conversaciones y lo que decidimos hacer fue citarlo al punto del Quiroga para confrontarlo sobre los hechos y obviamente entregarlo a las autoridades”, dijo la testigo.
Otro punto que analizan los peritos forenses es de dónde se produjo el disparo que le quitó la vida al joven de 21 años. Sobre esto, la testigo afirmó que la única persona que disparó fue el escolta de Rincón, quien, como señaló la denunciante, “habría disparado más de 10 veces, la mayoría, disparos hechos con la intención de amedrentar a quienes estaban riñendo con Rincón y así facilitar su escape de la zona”.
No obstante, las pruebas deben ser contundentes para llegar a una conclusión final, ya que, el relato del escolta, contradice el de la testigo. Este argumentó que, supuestamente, habría otra arma involucrada, razón por la cual él accionó su arma y se desató la balacera.
“En medio de esa balacera, dos personas resultaron gravemente heridas. Lo único que yo deseo es que pague la persona que hizo esto, porque soy testigo, que la única persona que disparó fue el escolta”, señaló la testigo.
Sin embargo, en las versiones autoridades, confirman que hubo otra arma de fuego involucrada, que portaba un sujeto de 28 años, quien además resultó herido en medio de la confrontación. Esa arma, según confirmó el comandante de la Policía de Bogotá, Daniel Gualdrón, fue incautada y permanece en manos de la Fiscalía para realizarle todos los análisis respectivos.
La otra persona lesionada es un tío de la menor de 15 años, quien recibió un disparo en el abdomen y se encuentra en un centro médico recuperándose los procedimientos que le realizaron para salvarle la vida.
El caso
Cerca del mediodía del domingo 24 de noviembre, Juan Felipe Rincón fue asesinado en un confuso hecho ocurrido en la calle 32 sur con carrera 23, en el barrio Quiroga, en la localidad de Rafael Uribe Uribe, sur de la capital del país. De acuerdo con las primeras versiones que manejan las autoridades, el joven de 21 años se encontraba en las calles del sector en compañía de otra joven, al parecer menor de edad, y un integrante de su grupo de escoltas.
Todo transcurría en el marco de la normalidad hasta que otras personas, (según el testimonio de la testigo, familiares de las menores de edad) abordaron a la pareja. En este punto, todavía no es claro las causas que motivaron la confrontación del hijo del alto mando policial con estos sujetos. La hipótesis principal apunta a una riña entre el occiso y los otros involucrados como el desencadenante del asesinato. Sin embargo, las autoridades también trabajan con la hipótesis de un posible intento de robo que, con el paso de las horas, pierde fuerza.
Uno de los heridos es un integrante de la escolta del joven fallecido quien, en medio del ataque, reaccionó con su arma de dotación para cuidar a su protegido y en ese intercambio de disparos resultó lesionado.
Los minutos previos del crimen quedaron registrados en video
Un video de cámara de seguridad da cuenta de los momentos previos al asesinato. Las imágenes, captadas la mañana del domingo 24 de noviembre, muestran el momento exacto en que se desata la riña que derivó en el homicidio. En el video se ve cuando dos personas forcejean con Juan Felipe Rincón justo al lado de un vehículo particular. En medio de ese forcejeo, y en su intento por zafarse de los sujetos que lo retenían, el joven termina sin su saco.
En ese momento un sujeto vestido de blanco que lleva un bolso terciado en su pecho, quien al parecer es el escolta que acompañaba a Rincón, entra en acción. El hombre, que mantiene una distancia de varios metros del lugar donde sucede la confrontación, saca su arma de fuego y apunta directamente a los sujetos que retienen a Juan Felipe.
En ese momento, dos mujeres que al parecer acompañaban a los sujetos que reñían con Rincón, se atraviesan en varias ocasiones entre el escolta y los otros involucrados para evitar que la situación escalara y se produjera una tragedia.
Dicho forcejeo dura alrededor de siete minutos, tiempo tras el cual los involucrados se mueven hacia otro punto ubicado a pocas cuadras y allí, minutos después, las autoridades confirmaron el crimen del hijo del inspector general de la Policía. Este video constituye una de las piezas claves en la investigación para determinar la responsabilidad de cada persona que aparece en el metraje.
Capturado
Horas después se produjo la primera captura por este caso. La mañana de este lunes 25 de noviembre, las autoridades confirmaron que un joven de 20 años, involucrado en el crimen, a quien habían visto merodeando por la zona incluso antes de que se presentara el crimen, se encuentra en una URI de la Fiscalía, en el Sur de Bogotá, a disposición de las autoridades para que responda por su presunta participación en el homicidio.
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