Golpe al bolsillo en temporada escolar: los útiles aumentaron entre 15 y 18 %

Comenzó la temporada de compra y venta de útiles escolares en Bogotá y Cundinamarca para los estudiantes de los colegios de calendario A, que representan el 70 % de los alumnos matriculados en esta zona del país y quienes demandan el 50 % de las ventas totales de la industria de las papelerías. Por eso, según Juan Esteban Orrego, director de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) de Bogotá y Cundinamarca, esta es la temporada más grande para la industria.

Comenzó la temporada de compra y venta de útiles escolares en Bogotá y Cundinamarca para los estudiantes de los colegios de calendario A, que representan el 70 % de los alumnos matriculados en esta zona del país y quienes demandan el 50 % de las ventas totales de la industria de las papelerías. Por eso, según Juan Esteban Orrego, director de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) de Bogotá y Cundinamarca, esta es la temporada más grande para la industria.

Sin embargo, es evidente que este año los padres sufrirán un golpe al bolsillo, ya que los costos de los útiles registran un aumento que oscila entre el 15 y 18 %. “Las mamás y papás deberán sacar dinero de más y conocer esta variación de precios. Su presupuesto dependerá de la cantidad de útiles y cuadernos que compren. Eso sí, se debe tener en cuenta que el incremento no incluye los textos escolares”, agregó Orrego.

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Y tal parece que el efecto de los precios altos empieza a sentirse en el mercado. Según Martha Gil, comerciante de San Victorino, este año las ventas han disminuido en comparación con las de 2021. “Las ventas son regulares. Este año han comprado menos, pues los precios de los productos de papelería están altos. Entonces, las ventas ya no son como antes”, explicó Martha, quien comentó que, por ejemplo, un cuaderno cuadriculado de 100 hojas, de gama económica, se conseguía en 2021 por $1.800 y hoy vale entre $3.000 y $4.000”.

Pero esa variación tiene un origen. El aumento de precios también ha afectado a los comerciantes de la industria papelera y de útiles. De acuerdo con el director de Fenalco, a ellos les subieron los costos entre 30 y 40 %. “En esto ha influido el alza del dólar, la inflación, la escasez a nivel mundial de materia prima y sobrecostos en transporte, distribución y comercialización”, señaló la Federación de Comerciantes.

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Escasez de materias primas

Andrés García, gerente de marketing de Faber Castell, aseveró que la industria se viene preparando desde julio para cerciorarse de tener en esta temporada suficientes productos, para abastecer el mercado. No obstante, no se puede desconocer que el incremento de la materia prima ha afectado los precios de los útiles. Asimismo, resaltó García, la compañía ha “hecho un esfuerzo para que ese incremento no llegue al consumidor final. Tenemos menor margen de ganancia, pero tratamos de que el aumento del producto no supere el 15 %”.

Por su parte, José Medina, gerente de Pelikan, compartió que los costos de la resina y los plásticos “tienden a estabilizarse por la baja demanda en China, la contracción en Europa y la guerra en Ucrania, factores que han hecho crecer el consumo nacional”. Igual los costos de los solventes, la parafina y la cera han subido bastante, “sobre todo porque usamos muchos materiales importados, ya que la industria nacional no es fuerte en pigmentos. Por su parte, el papel, los empaques y las pegadizas generan mucha demanda y los molinos se están saturando”, informó Medina.

Recomendaciones

De acuerdo con los precios actuales del mercado y las listas de útiles de los colegios, en los que se incluyen cuadernos, lápices, colores y materiales, se estima que este año un padre o madre de familia gastará un promedio de $350.000, sin tener en cuenta los textos escolares y uniformes. Por eso, para evitar que el gasto sea mayor, el consejo siempre será comprar en establecimientos comerciales reconocidos elementos de buena calidad.

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“Esto para evitar sobrecostos, pues cuando compran útiles que son sospechosamente económicos, en lugares que no tienen vigilancia, se encuentran con materiales ‘chiviados’, elementos baratos y que al momento de usarlos no duran. Por ejemplo, lápices o colores con minas muy cortas y de baja calidad. Luego los padres deben volver a comprar y el gasto resulta siendo más alto”, advirtió Orrego.

Tenga en cuenta que aunque algunos costos varían según el local comercial, tanto estas marcas como otras les distribuyen a mayoristas, comercios de barrio como San Victorino(Santa Fe), Quirigua y las Ferias (Engativá), así como a otros grandes distribuidores, por lo tanto, además de supermercados o almacenes grandes, podrá encontrar productos de calidad en distintos sectores de la ciudad. Revise los precios y dude de los productos muy económicos. Recuerde que lo barato sale caro.

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