Bolívar firmó en una notaría que no detendrá el Metro, pese lo dicho en su campaña

Uno de los tantos trámites que se llevan a cabo por los ujieres de la Notaría 38 fue solicitado por el candidato a la Alcaldía, Gustavo Bolívar. El representante del Pacto Histórico en la carrera por el segundo puesto más importante del país, se presentó en persona a la oficina de notariado para autenticar un acta de compromiso, firmada de su puño y letra, en la que se compromete a no detener la primera línea del metro ya contratada.

Nota relacionada: Segunda vuelta a la Alcaldía de Bogotá: por un triunfo sin reparos.

A primeras, lo que parece mero acto de campaña, fue justificado por Bolívar y su equipo en las informaciones que circulan en la opinión pública sobre el futuro incierto del metro en caso de una eventual administración de este candidato. Todo el alud de informaciones que ahora reprocha Bolívar y compañía, fueron agitados desde la propia presidencia en medio de los distintos actos a los que asistió Gustavo Petro en el marco de la ‘Toma de Bogotá’. Durante estas alocuciones, que se dieron en las localidades de Suba, Engativá y Kennedy, el Presidente y padrino político de la campaña de Gustavo Bolívar dejó ver su desacuerdo por las condiciones actuales de la construcción del metro.

Incluso fue más allá, al incluir en la agenda de su visita a China —la nación de la cual son oriundas las empresas que componen el consorcio que se ganó la licitación del contrato— los reparos que tiene con el proyecto, y los cuales discutirá con el presidente XI Jinping.

Aunado a lo anterior, las intenciones que hoy se la adjudican a Gustavo Bolívar residen de igual forma en su propio programa de gobierno. En ese documento, denominado Pacto por el Futuro de Bogotá, se aprecia en uno de los parágrafos lo siguiente: “promoveremos subterranizar el trayecto del Metro por la Avenida Carácas”, lo cual va en contra vía con el contrato actual, que plantea este trazado bajo la modalidad elevada.

Finalmente, pese a los argumentos de la campaña de Bolívar, es importante recordar que El Espectador informó en julio un acuerdo entre la Nación y el Distrito de esperar los resultados de un estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros (SCI). A partir de este informe, que aglutinaba la reunión de mesas técnicas, el Presidente Petro buscaba revertir la construcción del viaducto del metro elevado en la Avenida Caracas.

Pese a todo ello, el reversazo de Gustavo Bolívar viene haciéndose eco en los medios y diversos debates de las últimas semanas. Lo que no es del todo claro, es si su respeto por lo ya firmado es sincero o solo un aspaviento político para recortar la diferencia con Carlos Fernando Galán en las encuestas.

La gente en Bogotá está leyendo: Claudia López inaugura las obras del Transmicable de San Cristóbal.

Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

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A primeras, lo que parece mero acto de campaña, fue justificado por Bolívar y su equipo en las informaciones que circulan en la opinión pública sobre el futuro incierto del metro en caso de una eventual administración de este candidato. Todo el alud de informaciones que ahora reprocha Bolívar y compañía, fueron agitados desde la propia presidencia en medio de los distintos actos a los que asistió Gustavo Petro en el marco de la ‘Toma de Bogotá’. Durante estas alocuciones, que se dieron en las localidades de Suba, Engativá y Kennedy, el Presidente y padrino político de la campaña de Gustavo Bolívar dejó ver su desacuerdo por las condiciones actuales de la construcción del metro.

Incluso fue más allá, al incluir en la agenda de su visita a China —la nación de la cual son oriundas las empresas que componen el consorcio que se ganó la licitación del contrato— los reparos que tiene con el proyecto, y los cuales discutirá con el presidente XI Jinping.

Aunado a lo anterior, las intenciones que hoy se la adjudican a Gustavo Bolívar residen de igual forma en su propio programa de gobierno. En ese documento, denominado Pacto por el Futuro de Bogotá, se aprecia en uno de los parágrafos lo siguiente: “promoveremos subterranizar el trayecto del Metro por la Avenida Carácas”, lo cual va en contra vía con el contrato actual, que plantea este trazado bajo la modalidad elevada.

Finalmente, pese a los argumentos de la campaña de Bolívar, es importante recordar que El Espectador informó en julio un acuerdo entre la Nación y el Distrito de esperar los resultados de un estudio de la Sociedad Colombiana de Ingenieros (SCI). A partir de este informe, que aglutinaba la reunión de mesas técnicas, el Presidente Petro buscaba revertir la construcción del viaducto del metro elevado en la Avenida Caracas.

Pese a todo ello, el reversazo de Gustavo Bolívar viene haciéndose eco en los medios y diversos debates de las últimas semanas. Lo que no es del todo claro, es si su respeto por lo ya firmado es sincero o solo un aspaviento político para recortar la diferencia con Carlos Fernando Galán en las encuestas.

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