Migrante llegando a Vía Esperanza, el punto humanitario ubicado en el peaje de Chusacá.
Foto: Jose Vargas Esguerra
Son las 8:00 de la mañana del lunes. El sol resplandeciente parece batallar contra el frío helado que atraviesa las pieles de los primeros caminantes que se aproximan a descansar al punto humanitario, ubicado a 10 kilómetros de Soacha, en el peaje Chusacá. Algunos, como la familia Pérez, llegaron demasiado tarde el día anterior y pasaron la noche en medio del helaje y lo que casi todos los caminantes llaman “el asedio de los barristas”. La familia conformada por Mercedes, Frank y sus tres hijos, de 5, 7 y 14 años, amaneció en un pastizal,...
Por Juan Camilo Parra
Periodista egresado de la Universidad Externado de colombia con experiencia en cubrimiento de orden público en Bogotá.jparra@elespectador.com