¿Influye el cambio de estrato en el cobro del impuesto predial?
Aunque la alerta la encendió el concejal Rolando González, ante unos estudios que adelanta el Distrito, la administración responde que, por ahora, son rutina.
Sara Caicedo
¿Subirá el avalúo de la propiedad horizontal? ¿Habrá más barrios de estratos 5 y 6? ¿El Distrito redistribuirá la estratificación en la ciudad? Con esta nueva distribución, ¿subirá el impuesto del predial? Estas son las dudas que rondan entre los bogotanos desde que el concejal Rolando González (Cambio Radical) difundió que habría un incremento en los avalúos de la propiedad horizontal; que muchos predios pasarían a ser estratos 5 y 6, y que, además de aumentar el impuesto predial, perderían los subsidios o tendrían que contribuir más para subsidiar los servicios públicos (acueducto, luz y gas) de los estratos bajos.
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Las conclusiones del cabildante surgieron al encontrar que la Secretaría de Planeación, tras la firma del contrato 527 de 2020 con la empresa Proyectamos Colombia SAS, viene realizando estudios sobre la forma de estratificación de los hogares, lo que lo llevó a concluir que esto, a la larga, variaría el recaudo de impuestos en casi todos los niveles. No obstante la alerta, en la que, de paso, se reconoce que en principio el impacto en las finanzas de los hogares no sería tan alto, lo cierto es que los intentos por ajustar la estratificación en Bogotá son de vieja data, pues las últimas cinco administraciones hicieron estudios para saber cómo clasificar mejor los hogares.
En esta oportunidad, frente a la alerta que hizo el concejal González, la Secretaría de Planeación, en un intento por aplacar la incertidumbre, dijo que por ahora “no hay procesos para cambiar la metodología de estratificación”, ya que es la nación la que puede hacerlo a través del DANE. Agregó que para hacerlo debería pasar por un proceso técnico y jurídico, “que concluye con la adopción por el alcalde o alcaldesa de turno”.
¿Y el impuesto predial?
En medio de la confusión que generó la alerta, una de las mayores preocupaciones era el impacto directo en el impuesto predial. Sin embargo, es clave aclarar que desde 2017 este impuesto no tiene en cuenta el estrato del predio, sino el avalúo catastral, sin importar su ubicación.
“A partir de la simplificación tributaria de la pasada administración, se eliminó el estrato del cálculo. Excepto para las viviendas con avalúos iguales o inferiores a 135 salarios mínimos o de interés social, que tienen tarifas preferenciales”, explicó la Secretaría de Planeación (SDP), y añadió que es impreciso aseverar que un cambio de metodología de estratificación aumentará el recaudo predial. “Así como también es falso expresar que se incrementarán los predios en estratos altos en la ciudad (estratos contribuyentes 5 y 6), disminuyendo los predios subsidiados (estratos 1, 2 y 3), para aliviar la presión del gasto de la administración distrital”.
Pese a esta aclaración, sí vale la pena resaltar que, por ahora, si hubiera un aumento en el recaudo del predial o una variación en los subsidios sería mediante otras estrategias, como la legalización de barrios informales, los planes de expansión aprobados en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) o, incluso, el Plan Terrazas, que busca aumentar la oferta de vivienda en la ciudad, con lo que subiría el valor de algunos inmuebles.
Los estudios no son decisiones
Es claro que una de las funciones de Planeación es aplicar la metodología de la estratificación que ordena el DANE para Bogotá, por lo que es usual, dicen desde la administración, realizar estudios para evaluar su impacto social y financiero en el Distrito, de acuerdo con lo definido en la Ley 505 de 1999, la Ley 732 de 2002 y el Decreto 1170 de 2015. Con ese fin, la SDP ha realizado 25 estudios en catorce años (entre ellos los que mencionó el concejal González), los cuales son públicos y han servido para medir las condiciones de equidad de los hogares en Bogotá.
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Antonio José Avendaño, subsecretario de Información y Estudios Estratégicos de Planeación, resalta que gracias a los últimos estudios se sabe que en el 2021 en Bogotá el 84 de las personas, el 80 % de las viviendas y el 82 % de los hogares estaban en estratos 1, 2 y 3 (que son los que reciben subsidios en servicios públicos). Asimismo, que el 5,4 % de las personas, el 6,2 % de los hogares y el 6,8 % de las viviendas estaban en los estratos 5 y 6 (que son los que pagan dichos subsidios).
“Estos estudios precisan y analizan el efecto de las finanzas públicas de la ciudad de esta distribución de hogares que reciben subsidios y hogares que pagan contribuciones”, aclara el funcionario, quien concluye que “es función de Planeación, por ley, mantener actualizada la estratificación de la ciudad. Esto no implica cambios en la distribución de los predios ni cambios en la forma como se asigna el estrato actualmente”.
Por lo tanto, al parecer, en 2022 no se proyecta una redistribución masiva en los estratos de la ciudad, con efecto directo en el valor del impuesto predial, ni hacer crecer el estrato 6. No obstante, los estudios son para usarlos y más ad portas de empezar a aplicar en forma el recién aprobado POT. ¿Cuándo los aprovechará la administración? La pregunta queda abierta.
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¿Subirá el avalúo de la propiedad horizontal? ¿Habrá más barrios de estratos 5 y 6? ¿El Distrito redistribuirá la estratificación en la ciudad? Con esta nueva distribución, ¿subirá el impuesto del predial? Estas son las dudas que rondan entre los bogotanos desde que el concejal Rolando González (Cambio Radical) difundió que habría un incremento en los avalúos de la propiedad horizontal; que muchos predios pasarían a ser estratos 5 y 6, y que, además de aumentar el impuesto predial, perderían los subsidios o tendrían que contribuir más para subsidiar los servicios públicos (acueducto, luz y gas) de los estratos bajos.
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En esta oportunidad, frente a la alerta que hizo el concejal González, la Secretaría de Planeación, en un intento por aplacar la incertidumbre, dijo que por ahora “no hay procesos para cambiar la metodología de estratificación”, ya que es la nación la que puede hacerlo a través del DANE. Agregó que para hacerlo debería pasar por un proceso técnico y jurídico, “que concluye con la adopción por el alcalde o alcaldesa de turno”.
¿Y el impuesto predial?
En medio de la confusión que generó la alerta, una de las mayores preocupaciones era el impacto directo en el impuesto predial. Sin embargo, es clave aclarar que desde 2017 este impuesto no tiene en cuenta el estrato del predio, sino el avalúo catastral, sin importar su ubicación.
“A partir de la simplificación tributaria de la pasada administración, se eliminó el estrato del cálculo. Excepto para las viviendas con avalúos iguales o inferiores a 135 salarios mínimos o de interés social, que tienen tarifas preferenciales”, explicó la Secretaría de Planeación (SDP), y añadió que es impreciso aseverar que un cambio de metodología de estratificación aumentará el recaudo predial. “Así como también es falso expresar que se incrementarán los predios en estratos altos en la ciudad (estratos contribuyentes 5 y 6), disminuyendo los predios subsidiados (estratos 1, 2 y 3), para aliviar la presión del gasto de la administración distrital”.
Pese a esta aclaración, sí vale la pena resaltar que, por ahora, si hubiera un aumento en el recaudo del predial o una variación en los subsidios sería mediante otras estrategias, como la legalización de barrios informales, los planes de expansión aprobados en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) o, incluso, el Plan Terrazas, que busca aumentar la oferta de vivienda en la ciudad, con lo que subiría el valor de algunos inmuebles.
Los estudios no son decisiones
Es claro que una de las funciones de Planeación es aplicar la metodología de la estratificación que ordena el DANE para Bogotá, por lo que es usual, dicen desde la administración, realizar estudios para evaluar su impacto social y financiero en el Distrito, de acuerdo con lo definido en la Ley 505 de 1999, la Ley 732 de 2002 y el Decreto 1170 de 2015. Con ese fin, la SDP ha realizado 25 estudios en catorce años (entre ellos los que mencionó el concejal González), los cuales son públicos y han servido para medir las condiciones de equidad de los hogares en Bogotá.
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“Estos estudios precisan y analizan el efecto de las finanzas públicas de la ciudad de esta distribución de hogares que reciben subsidios y hogares que pagan contribuciones”, aclara el funcionario, quien concluye que “es función de Planeación, por ley, mantener actualizada la estratificación de la ciudad. Esto no implica cambios en la distribución de los predios ni cambios en la forma como se asigna el estrato actualmente”.
Por lo tanto, al parecer, en 2022 no se proyecta una redistribución masiva en los estratos de la ciudad, con efecto directo en el valor del impuesto predial, ni hacer crecer el estrato 6. No obstante, los estudios son para usarlos y más ad portas de empezar a aplicar en forma el recién aprobado POT. ¿Cuándo los aprovechará la administración? La pregunta queda abierta.
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