Instalan puesto de mando unificado, para monitorear desbordamiento del río Bogotá
Por las intensas lluvias en el centro del país, los embalses del Sisga, Tominé y Neusa también se encuentran bajo vigilancia, ya que se encuentran cerca de su capacidad máxima. Cundinamarca enfrenta la peor ola invernal de la última década. Solo este año, las emergencias por lluvias en el departamento ha dejado 15 víctimas fatales.
Tras las emergencias que se presentaron en los municipios de Nemocón, Sopó, Chía, Ganchancipá, Tocancipá y la alerta en Soacha, por el desbordamiento del río Bogotá, debido al aumento de las precipitaciones en la región andina, la Gobernación de Cundinamarca instaló este viernes 10 de junio un Puesto de Mando Unificado (PMU) para monitorear la situación y tomar decisiones sobre eventuales emergencias en el departamento.
“El monitoreo se extiende hasta la cuenca baja y hasta el río Magdalena inclusive. Igualmente, se hace seguimiento a los embalses del Sisga, Tominé y principalmente del Neusa para que podamos mantener de manera controlar los niveles del río Bogotá y, de esta manera, evitar una emergencia aún mayor”, indicó Nicolás García, gobernador de Cundinamarca.
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En el PMU participan funcionarios del Ideam, la Corporación Autónoma Regional (CAR), la Defensa Civil, Bomberos de Cundinamarca y la Cruz Roja, que a través de sobrevuelos, recorridos en botes e informes de campo se esperan poder hacer un registro de los terrenos y los cultivos afectados, así como identificar las viviendas en riesgo, para evitar tragedias en una temporada de lluvias que este año ha sido particularmente mortal.
En ese sentido, Cundinamarca enfrenta la peor ola invernal de la última década. Solo este año, las emergencias por lluvias en el departamento ha dejado 15 víctimas fatales, cifra que equipara la cantidad de muertes registradas entre 2015 y 2021. Por esta razón, equipos de la Cruz Roja recomiendan a las administraciones municipales reportar las edificaciones con amenaza de deslizamiento o inundación, para determinar si es necesario un traslado temporal de sus habitantes.
Según el último reporte del Ideam, por el momento se mantienen “los niveles altos en la cuenca media y baja del río Bogotá, de acuerdo con los niveles observados en diferentes estaciones hidrológicas, referente de las condiciones de ascenso moderado en los últimos días. Se espera que esta situación se mantenga, por lo que se recomienda a la población ribereña estar continuamente atentos a los cambios de nivel del río y sus vertientes”.
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¿Cuánto tiempo durarán las lluvias?
Desde la Oficina de Pronóstico y Alertas del Ideam, se había informado que la primera temporada de lluvias terminara a finales de mayo, pero ahora se espera que finalice a mediados de junio. “Las precipitaciones más significativas se prevén para mediados de semana, entre el miércoles y jueves en la madrugada. De igual manera, hacia el fin de semana continuaremos con cielos cubiertos y tiempos lluviosos”, aseguró Yolanda González, directora del Ideam.
El pronóstico del tiempo que duraran las lluvias no parece muy alentador, en especial si tomamos en cuenta el análisis del Centro de Predicción Climática (CPC de la NOAA), donde indican que existe un 58% de probabilidad de que las condiciones del fenómeno de La Niña continúen durante los meses de agosto y octubre.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
Tras las emergencias que se presentaron en los municipios de Nemocón, Sopó, Chía, Ganchancipá, Tocancipá y la alerta en Soacha, por el desbordamiento del río Bogotá, debido al aumento de las precipitaciones en la región andina, la Gobernación de Cundinamarca instaló este viernes 10 de junio un Puesto de Mando Unificado (PMU) para monitorear la situación y tomar decisiones sobre eventuales emergencias en el departamento.
“El monitoreo se extiende hasta la cuenca baja y hasta el río Magdalena inclusive. Igualmente, se hace seguimiento a los embalses del Sisga, Tominé y principalmente del Neusa para que podamos mantener de manera controlar los niveles del río Bogotá y, de esta manera, evitar una emergencia aún mayor”, indicó Nicolás García, gobernador de Cundinamarca.
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En el PMU participan funcionarios del Ideam, la Corporación Autónoma Regional (CAR), la Defensa Civil, Bomberos de Cundinamarca y la Cruz Roja, que a través de sobrevuelos, recorridos en botes e informes de campo se esperan poder hacer un registro de los terrenos y los cultivos afectados, así como identificar las viviendas en riesgo, para evitar tragedias en una temporada de lluvias que este año ha sido particularmente mortal.
En ese sentido, Cundinamarca enfrenta la peor ola invernal de la última década. Solo este año, las emergencias por lluvias en el departamento ha dejado 15 víctimas fatales, cifra que equipara la cantidad de muertes registradas entre 2015 y 2021. Por esta razón, equipos de la Cruz Roja recomiendan a las administraciones municipales reportar las edificaciones con amenaza de deslizamiento o inundación, para determinar si es necesario un traslado temporal de sus habitantes.
Según el último reporte del Ideam, por el momento se mantienen “los niveles altos en la cuenca media y baja del río Bogotá, de acuerdo con los niveles observados en diferentes estaciones hidrológicas, referente de las condiciones de ascenso moderado en los últimos días. Se espera que esta situación se mantenga, por lo que se recomienda a la población ribereña estar continuamente atentos a los cambios de nivel del río y sus vertientes”.
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¿Cuánto tiempo durarán las lluvias?
Desde la Oficina de Pronóstico y Alertas del Ideam, se había informado que la primera temporada de lluvias terminara a finales de mayo, pero ahora se espera que finalice a mediados de junio. “Las precipitaciones más significativas se prevén para mediados de semana, entre el miércoles y jueves en la madrugada. De igual manera, hacia el fin de semana continuaremos con cielos cubiertos y tiempos lluviosos”, aseguró Yolanda González, directora del Ideam.
El pronóstico del tiempo que duraran las lluvias no parece muy alentador, en especial si tomamos en cuenta el análisis del Centro de Predicción Climática (CPC de la NOAA), donde indican que existe un 58% de probabilidad de que las condiciones del fenómeno de La Niña continúen durante los meses de agosto y octubre.
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