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La ciudad continúa en alerta por posibles riesgos asociados a las intensas lluvias. Bajo el panorama, prevenir inundaciones es uno de los objetivos de la Secretaría de Ambiente, que intensificó sus labores de control, vigilancia y seguimiento en cuatro puntos críticos de arrojo ilegal de escombros, ubicados cerca de fuentes hídricas estratégicas. Adicional, los operativos en Usme se concentran en quebradas y canteras que podrían derivar en inundaciones.
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Entre los sitios que la secretaría se encuentra interviniendo y monitoreando resaltan la quebrada La Salitrosa, un brazo del humedal Juan Amarillo, el canal Salitre y un brazo del humedal Jaboque, en donde se evidenció la afectación que produce la disposición ilegal de residuos en los ecosistemas. En la localidad Usme, las acciones están puestas en las quebradas Hoya del Ramo, El Piojo y Yomasa, donde se identificaron y georreferenciaron puntos con disposición inadecuada de residuos y actividades que alteran el funcionamiento ecológico de estos cuerpos de agua.
Cabe resaltar que estos operativos forman parte de un plan diseñado para reducir el riesgo de desbordamientos y así proteger la biodiversidad, los cuerpos de agua y las comunidades. “La entidad coordinará con la Uaesp, el Acueducto y a las alcaldías locales (Suba y Engativá) para que realicen la recolección de los residuos y el mantenimiento de acuerdo con sus competencias”, informó la cartera de Ambiente.
#Noticia 🟢| Distrito refuerza operativos de control a canteras y seguimiento de residuos en quebradas de Usme para mitigar riesgos de inundación >> https://t.co/i8ivAicEVj pic.twitter.com/zsQqF02F6Y
— Secretaría de Ambiente (@Ambientebogota) November 14, 2024
Hallazgos de los operativos
Según la cartera, en el canal Salitre se evidenció arrojo de escombros en vía pública y varias conexiones de agua erradas. “No hay obstrucción de residuos en el cuerpo de agua, pero sí presencia de sedimentos”, detalló la entidad. Por su parte, en el humedal Jaboque, también se evidenció la acumulación de sedimentos y material vegetal en un sector reconocido como Zona de Manejo y Preservación Ambiental.
“La disposición irresponsable de escombros afecta gravemente el flujo natural de nuestros cuerpos de agua, aumentando el riesgo de inundaciones y perjudicando los ecosistemas. Estamos comprometidos en tomar medidas firmes y sostenidas para recuperar estos espacios, prevenir emergencias y fomentar una Bogotá más sostenible”, subrayó la secretaria Adriana Soto.
Zonas riesgosas
Desde que arreciaron las lluvias, las autoridades incrementaron el monitoreo sobre 273 sectores de la ciudad por su propensión a deslizamientos, que se concentran especialmente en localidades como Ciudad Bolívar, en donde está más del 20 % de las zonas en riesgo, con 77 de estos puntos.
Continúan: San Cristóbal (54), Rafael Uribe Uribe (34), Usme (25) y Usaquén (22), Chapinero (13) y Suba (9). Y si en Bogotá llueve, en Cundinamarca tampoco escampa. A nivel departamental, de los 116 municipios, en 65 se han registrado afectaciones, llevando a los Bomberos a atender 200 emergencias, entre ellas 89 deslizamientos, 37 crecientes súbitas, 25 inundaciones, 24 vendavales, 11 movimientos en masa y ocho avenidas torrenciales.
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