Ir a pie, riesgo que aumenta con las obras viales que avanzan en Bogotá

Caminar es la forma más elemental de los seres humanos para movilizarse, lo que ha influido en la planeación de las ciudades con andenes, puentes exclusivos, “cebras”, entre otros. Pese a los esfuerzos por contar con mejor infraestructura, en Bogotá ser peatón se ha vuelto un riesgo: en los últimos dos años se duplicaron las víctimas fatales.

Caminar es la forma más elemental de los seres humanos para movilizarse, lo que ha influido en la planeación de las ciudades con andenes, puentes exclusivos, “cebras”, entre otros. Pese a los esfuerzos por contar con mejor infraestructura, en Bogotá ser peatón se ha vuelto un riesgo: en los últimos dos años se duplicaron las víctimas fatales.

Al analizar la forma como se movilizan los bogotanos se tiene que el 24 % van a pie. Y en sus caminatas diarias se enfrentan a múltiples obstáculos, como el 53 % de los andenes de la ciudad en regular o mal estado o el déficit de 15 millones de metros cuadrados de andenes en Bogotá, según reportes oficiales, falencia que se viene traduciendo en siniestros de tránsito. En promedio, cada mes fallecen 17 peatones atropellados en las calles de la ciudad.

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“Los peatones merecen una atención especial del Estado, no solo porque cuestan menos en términos ambientales, sino por el hecho de ser el actor más vulnerable. Su cuerpo es su carrocería, su única protección”, explicó Mary Bottagisio, directora de la Fundación contra la Violencia Vial. Este riesgo se ha exacerbado con las obras en curso en la ciudad, que han complicado la movilidad para los transeúntes, con puntos críticos en torno a las vías. Así las cosas, ¿cuál es el panorama, los puntos críticos y las acciones del Distrito?

Más riesgos para los peatones

Cualquiera que haya caminado por una de las grandes avenidas de la capital se habrá sentido pequeño ante la cantidad de carros y carriles, que contrastan con reducidos andenes. Según estudios de la Secretaría de Movilidad, el 41 % de los viajes de las personas en condición de discapacidad son peatonales, mientras que de los mayores de 60 años, uno de cada tres prefiere caminar, por lo que muchos son población vulnerable.

“Hoy la principal causa de muerte de personas, entre los 5 y 29 años, son los accidentes de tránsito, y este es un reto de sostenibilidad urbana. Hay que reflexionar sobre el diseño de las calles, a partir de los actores que la viven y necesitan condiciones de seguridad”, señaló Carlos Urrego, coordinador de la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial.

En 2022 fallecieron 230 peatones. Este año, al 8 de junio, la cifra iba en 86, para un promedio de 17 casos mensuales. El dato preocupa, pues desde que se retomó la normalidad tras la pandemia la cifra viene en aumento y casi que se ha duplicado (creció 176 %). La mayoría se concentran en las grandes avenidas, como la carrera séptima, la avenida Primero de Mayo, la calle 30 y la avenida Caracas.

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Pero, ¿a qué se debe? “Los principales factores de riesgo son cruzar la vía por sitios no señalizados, no usar los carriles o espacios establecidos para circulación y la falta de visibilidad. Lo cierto es que este es el resultado de la interacción de muchos componentes, que influyen en cómo se desplazan y se comportan actores en las vías”, dijo la secretaria de Movilidad, Deyanira Ávila.

Estas son las principales hipótesis de fatalidades por siniestro viales en peatones según el Distrito:

● Desobedecer señales de tránsito

● Vehículo en exceso de velocidad

● Conductor en estado de Embriaguez

● Cruzar en curva

● Cruzar sin observar

● Cruzar con el semáforo peatonal en rojo

No obstante, para algunos expertos, esta explicación no sería suficiente, debido a que las decisiones de los peatones no son fruto de negligencia, sino de sus necesidades como actores viales. “Hay que evitar esa especie de perdón social que, en torno a la muerte de peatones, indican que ellos mueren por estar en el lugar equivocado o porque no cruzan el puente peatonal”, señaló Bottagisio, quien agregó: “Por eso es clave la Ley Julián Esteban, que adopta el enfoque del sistema seguro, para la política pública de seguridad vial ¿Y eso qué quiere decir? Ya no somos carrocéntricos, sino que el centro de todo el sistema vial es el ser humano. Cuando muere un peatón, todo el sistema falló”.

Obras y cruces complejos

En medio de este panorama, las obras en desarrollo han incrementado los riesgos. “En el barrio El Retiro tenemos el caso de un adulto mayor que, por la falta de señalización, no vio un desnivel y se fracturó la cadera”, aseguró Pilar Bustillo, habitante de la localidad de Chapinero. Las principales quejas apuntan a la falta de señalización o instalaciones inestables, que implican grandes esfuerzos para que los peatones lleguen a sus destinos.

Esta dificultad se ve hoy en diferentes puntos críticos para peatones, como la avenida Boyacá, entre avenida Primero de Mayo y calle 30, en donde los habitantes realizan cruces peligrosos, aumentando los siniestros. Frente a esta situación, el IDU afirmó que “constantemente, por medio de la interventoría, se verifican los Planes de Manejo de Tránsito. El reto es velar para que las condiciones de circulación estén enfocadas en los usuarios más vulnerables: peatones y ciclistas”.

En ese sentido, el Distrito aseguró que se analizan los posibles conflictos entre los actores de la vía (peatones, bicicletas y vehículos motorizados), para que en las propuestas de manejo de tránsito todos se canalicen, desplacen y crucen por las intersecciones dispuestas de forma segura.

Como parte de las soluciones está pendiente la implementación de la Política Pública del Peatón, que debería implementarse en el segundo semestre de 2023. “Con este proyecto se consolida la construcción y mejora de andenes; el respeto al peatón, para que se pueda desplazar sin obstáculos, y se avanza en las señaléticas, para priorizar pasos peatonales y facilidad de ingreso a los andenes para personas con discapacidad, adultos mayores, niñez, mujeres embarazadas”, indicó el concejal Celio Nieves (Polo), autor del Acuerdo 836 de 2022.

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Por su parte, la Secretaría de Movilidad de Bogotá, ha venido avanzando en la estrategia “Andenes para peatones”, que busca visibilizar peatón como el actor más vulnerable en las calles, procurando que se respete el espacio público, a través de mejor infraestructura, control y cultura ciudadana.

A pesar de las buenas intenciones, el riesgo se mantiene y están por verse los avances con el diseño de la ciudad en construcción, para asegurar que los entornos para aquellos que deciden ir a pie sean más seguros en el futuro.

Recomendaciones para los peatones:

● Respetar las señales y normas de tránsito.

● Usar los cruces y puentes peatonales.

● Usar los paraderos o zonas seguras para abordar o descender de los vehículos de transporte público.

● No cruzar vías de alta velocidad por zonas no demarcadas para el paso peatonal.

● Caminar por el andén.

● Cruzar solo cuando el semáforo peatonal esté en verde

● Usar prendas reflectivas en la noche.

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