Los cambios en los espacios públicos que trae el cable aéreo de San Cristóbal
Se trata de la intervención de los parques Bello Horizonte, Guacamayas, La Joyita y el mirador Altamira Chiguaza, entre otras reformas. Las obras tendrán una inversión de más de $19.000 millones. Esto dijo la secretaria de Hábitat, Nadya Milena Rangel.
Sara Caicedo
Con la construcción del cable aéreo de San Cristóbal, el cual contará con una longitud de 2.8 kilómetros, transportará a 400 pasajeros por hora en un sentido, además, conectará con el portal 20 de julio en las estaciones La Victoria y Altamira; vienen otras obras alternas a este proyecto, se trata de las intervenciones de los espacios públicos aledaños a este cable.
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Estas obras pretenden renovar los espacios de cuatro parques “que complementarán la construcción del cable aéreo de la localidad, ayudando a la revitalización del territorio, la generación de competitividad territorial, la reactivación económica y el mejoramiento de las condiciones urbanas”, señaló el Distrito.
Por lo tanto, la Secretaría de Hábitat adjudicó la licitación 059 de 2022 de estas obras, que costarán más de $19.000 millones y se basan en la intervención de los parques Bello Horizonte, Guacamayas, La Joyita y el mirador Altamira Chiguaza.
De acuerdo con el Distrito, estas obras deben quedar listas en octubre de 2023 y hacen parte del Proyecto Integral de Revitalización “que se compone de 45 intervenciones; cuatro de ellas priorizadas en los espacios públicos mencionados, localizadas en áreas estratégicas de la localidad y las cuales se constituyen en las primeras obras que se entregarán en el marco de la construcción del cable”, agregó el Distrito.
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De acuerdo con Secretaría de Hábitat, estas obras ya fueron socializadas con la comunidad, la cual habría participado en los diseños. Y constará de dos contratos, los cuales corresponden a dos zonas diferentes en las que se llevará a cabo el trabajo.
La primera zona comprende a los parques Bello Horizonte y La Joyita, la cual tiene una inversión de $8.491.054.570. Para el segundo territorio se destinó $10.297.74.324 y está conformado por el parque Guacamayas y el mirador Altamira Chiguaza.
“Cabe destacar que, en los pliegos de la licitación, la Secretaría Distrital del Hábitat ofreció una valoración especial a aquellos proponentes que acreditaran entre sus trabajadores un número mínimo de personas con discapacidad, de acuerdo con lo expuesto en el Decreto 1082 de 2015″, señaló la cartera.
De acuerdo con la secretaria de esta entidad, Nadya Milena Rangel, ya se había acordado con la alcaldesa Claudia López la intervención de los entornos de las estaciones del cable, entre los que también se planea la construcción de dos manzanas del cuidado, de las que ya se adjudicaron los estudios y diseños, y se espera que inicie su construcción en el segundo semestre de 2023.
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“También vamos a invertir en unas conexiones que son caminos que conectan a las estaciones y la transformación de estos espacios permitirá que se vuelvan recorridos más amables, revitalizan el tejido productivo del sector y mejoran el espacio público”.
“El cable no se levanta solo, viene acompañado de todas estas intervenciones urbanas para mejorar las condiciones de los habitantes y del espacio público”, concluyó la secretaria Rangel.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
Con la construcción del cable aéreo de San Cristóbal, el cual contará con una longitud de 2.8 kilómetros, transportará a 400 pasajeros por hora en un sentido, además, conectará con el portal 20 de julio en las estaciones La Victoria y Altamira; vienen otras obras alternas a este proyecto, se trata de las intervenciones de los espacios públicos aledaños a este cable.
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Estas obras pretenden renovar los espacios de cuatro parques “que complementarán la construcción del cable aéreo de la localidad, ayudando a la revitalización del territorio, la generación de competitividad territorial, la reactivación económica y el mejoramiento de las condiciones urbanas”, señaló el Distrito.
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De acuerdo con el Distrito, estas obras deben quedar listas en octubre de 2023 y hacen parte del Proyecto Integral de Revitalización “que se compone de 45 intervenciones; cuatro de ellas priorizadas en los espacios públicos mencionados, localizadas en áreas estratégicas de la localidad y las cuales se constituyen en las primeras obras que se entregarán en el marco de la construcción del cable”, agregó el Distrito.
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La primera zona comprende a los parques Bello Horizonte y La Joyita, la cual tiene una inversión de $8.491.054.570. Para el segundo territorio se destinó $10.297.74.324 y está conformado por el parque Guacamayas y el mirador Altamira Chiguaza.
“Cabe destacar que, en los pliegos de la licitación, la Secretaría Distrital del Hábitat ofreció una valoración especial a aquellos proponentes que acreditaran entre sus trabajadores un número mínimo de personas con discapacidad, de acuerdo con lo expuesto en el Decreto 1082 de 2015″, señaló la cartera.
De acuerdo con la secretaria de esta entidad, Nadya Milena Rangel, ya se había acordado con la alcaldesa Claudia López la intervención de los entornos de las estaciones del cable, entre los que también se planea la construcción de dos manzanas del cuidado, de las que ya se adjudicaron los estudios y diseños, y se espera que inicie su construcción en el segundo semestre de 2023.
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“También vamos a invertir en unas conexiones que son caminos que conectan a las estaciones y la transformación de estos espacios permitirá que se vuelvan recorridos más amables, revitalizan el tejido productivo del sector y mejoran el espacio público”.
“El cable no se levanta solo, viene acompañado de todas estas intervenciones urbanas para mejorar las condiciones de los habitantes y del espacio público”, concluyó la secretaria Rangel.
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