En el 2020, en Bogotá se aprovecharon 1.013.480 toneladas de ese material de construcción y demolición.
Foto: David Campuzano
Cada mes en Bogotá, la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (UAESP) recoge en las calles alrededor de 22.000 toneladas de residuos de construcción y demolición. Estos, junto a más de cuatro millones de toneladas de ese material, van a parar a tres sitios de disposición final; tres centros de tratamiento y aprovechamiento; y 19 puntos donde se recuperan. Hoy, con la intención de mejorar su manejo, se adopta el decreto 507 de 2023, un nuevo modelo para la gestión de estos residuos.
Por Sara Caicedo
Periodista de la universidad Politécnico Grancolombiano. Escribe para El Espectador sobre planeación, hábitat, comercio informal, espacio púbico, desarrollo económico, hacienda y ambiente.@sara_caicedoscaicedo@elespectador.com
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