Pistas halladas en dos asesinatos en Bogotá dejarían al descubierto red criminal
Se trata de una organización, que está en proceso de identificación, a quien se le atribuyen dos homicidios de motociclistas cometidos en la última semana, en medio de atracos.
Huber Mauricio Bernal (32 años) y Andrés Esteban Junca Ortiz (22 años) fueron asesinados con cuatro días de diferencia en el mismo punto de la vía Arborizadora Alta - Quiba, en jurisdicción de la localidad de Ciudad Bolívar. Estos dos casos podrían parecer hechos aislados, pero pistas halladas en las escenas del crimen, han llevado a los investigadores a confirmar que detrás de esto opera una organización criminal dedicada a engañar a mensajeros y motociclistas para hurtarlos y quitarles la vida.
El primer caso se presentó el pasado 17 de diciembre, a las 6:50 a.m. cuando un residente de la parte alta del barrio Paraíso, al sur de la capital, llegó hasta el CAI Arborizadora Alta en donde le notificó a un uniformado de la Policía que en la vía que conecta con una zona rural había un hombre tendido en el suelo. El reporte policial obtenido por El Espectador señala que, al llegar al punto indicado por el ciudadano, encontraron el cuerpo de un hombre, sin signos vitales, quien vestía un uniforme azul con logos de la empresa de mensajería 472.
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La inspección y el levantamiento del cadáver fue adelantado por el CTI de la Fiscalía, y su reporte señala que la víctima tenía, además de hematomas en las manos y en el pecho, una herida en el costado superior derecho de la espalda, producto de un disparo. El hombre asesinado fue identificado como Huber Mauricio Bernal, y a pesar de que tenía sus pertenencias, la moto en la que se transportaba no apareció en el sitio.
El segundo caso tuvo lugar en el mismo sector de la ciudad, durante este martes 21 de diciembre a las 2:30 p.m. cuando un hombre encontró a su amigo, identificado como Andrés Esteban Junca Ortiz, con un disparo en la cabeza. Según familiares de la víctima, el joven trabajaba como conductor en la plataforma de transporte Picapp, y la última vez que tuvieron contacto con él fue a las 7:00 p.m. de este lunes 20 de diciembre cuando les notificó que había terminado de trabajar e iba para la casa de sus papás.
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Debido a que Andrés Esteban nunca llegó a su destino, la familia Junca y algunos amigos, salieron en su búsqueda. Solo hasta las primeras horas de este martes fue que un amigo, quien conocía la zona por donde había dicho Andrés que estaba transitando momentos después de terminar de trabajar, fue que lo halló sin vida. La motocicleta de Andrés, marca Pulsar NS de placa EOZ-99D, no apareció en el lugar.
Para los investigadores del CTI, este último crimen tiene muchos aspectos similares con el primero, ocurrido en el mismo punto, tales como la forma en la que fueron asesinados, pues se dice que las víctimas habrían sido reducidas, tiradas al suelo y a pesar de no poner resistencia, heridas con proyectiles que fueron accionados desde la parte superior.
Es por esto, y por el hecho de que los dos asesinados perdieron sus motocicletas, por lo que se habla de una red que estaría conformada por unos cuatro o cinco hombres, quienes contactan a mensajeros o transportadores, para citarlos en cercanías a Ciudad Bolívar y posteriormente llevarlos a la parte alta para quitarles el vehículo y matarlos.
Más allá de las hipótesis, y los primeros avances de la investigación que permitieron revelar la operatividad de esta estructura, las autoridades ahora se centran en reunir material probatorio que permita identificar plenamente a los responsables. Entre enero y noviembre de este año, en Ciudad Bolívar se presentaron 189 homicidios, de los cuales 51 se concentraron en la UPZ Lucero y 11 en la UPZ Arborizadora, sectores cercanos a donde ocurrieron estos dos casos.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
Huber Mauricio Bernal (32 años) y Andrés Esteban Junca Ortiz (22 años) fueron asesinados con cuatro días de diferencia en el mismo punto de la vía Arborizadora Alta - Quiba, en jurisdicción de la localidad de Ciudad Bolívar. Estos dos casos podrían parecer hechos aislados, pero pistas halladas en las escenas del crimen, han llevado a los investigadores a confirmar que detrás de esto opera una organización criminal dedicada a engañar a mensajeros y motociclistas para hurtarlos y quitarles la vida.
El primer caso se presentó el pasado 17 de diciembre, a las 6:50 a.m. cuando un residente de la parte alta del barrio Paraíso, al sur de la capital, llegó hasta el CAI Arborizadora Alta en donde le notificó a un uniformado de la Policía que en la vía que conecta con una zona rural había un hombre tendido en el suelo. El reporte policial obtenido por El Espectador señala que, al llegar al punto indicado por el ciudadano, encontraron el cuerpo de un hombre, sin signos vitales, quien vestía un uniforme azul con logos de la empresa de mensajería 472.
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La inspección y el levantamiento del cadáver fue adelantado por el CTI de la Fiscalía, y su reporte señala que la víctima tenía, además de hematomas en las manos y en el pecho, una herida en el costado superior derecho de la espalda, producto de un disparo. El hombre asesinado fue identificado como Huber Mauricio Bernal, y a pesar de que tenía sus pertenencias, la moto en la que se transportaba no apareció en el sitio.
El segundo caso tuvo lugar en el mismo sector de la ciudad, durante este martes 21 de diciembre a las 2:30 p.m. cuando un hombre encontró a su amigo, identificado como Andrés Esteban Junca Ortiz, con un disparo en la cabeza. Según familiares de la víctima, el joven trabajaba como conductor en la plataforma de transporte Picapp, y la última vez que tuvieron contacto con él fue a las 7:00 p.m. de este lunes 20 de diciembre cuando les notificó que había terminado de trabajar e iba para la casa de sus papás.
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Debido a que Andrés Esteban nunca llegó a su destino, la familia Junca y algunos amigos, salieron en su búsqueda. Solo hasta las primeras horas de este martes fue que un amigo, quien conocía la zona por donde había dicho Andrés que estaba transitando momentos después de terminar de trabajar, fue que lo halló sin vida. La motocicleta de Andrés, marca Pulsar NS de placa EOZ-99D, no apareció en el lugar.
Para los investigadores del CTI, este último crimen tiene muchos aspectos similares con el primero, ocurrido en el mismo punto, tales como la forma en la que fueron asesinados, pues se dice que las víctimas habrían sido reducidas, tiradas al suelo y a pesar de no poner resistencia, heridas con proyectiles que fueron accionados desde la parte superior.
Es por esto, y por el hecho de que los dos asesinados perdieron sus motocicletas, por lo que se habla de una red que estaría conformada por unos cuatro o cinco hombres, quienes contactan a mensajeros o transportadores, para citarlos en cercanías a Ciudad Bolívar y posteriormente llevarlos a la parte alta para quitarles el vehículo y matarlos.
Más allá de las hipótesis, y los primeros avances de la investigación que permitieron revelar la operatividad de esta estructura, las autoridades ahora se centran en reunir material probatorio que permita identificar plenamente a los responsables. Entre enero y noviembre de este año, en Ciudad Bolívar se presentaron 189 homicidios, de los cuales 51 se concentraron en la UPZ Lucero y 11 en la UPZ Arborizadora, sectores cercanos a donde ocurrieron estos dos casos.
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