Polémica por ausencia del Secretario de Seguridad en debate en el Concejo de Bogotá
El Secretario de Seguridad de Bogotá no asistió a un debate en el Concejo, lo que generó el descontento de los concejales citantes. Uno de los cabildantes, como protesta, tomó un muñeco en una bolsa y lo ubicó en una de las sillas destinadas para los funcionarios de la Administración.
Para las 9:00 de la mañana de este martes 6 de septiembre estaba previsto un debate de control político en el Concejo de Bogotá, para discutir la situación de seguridad de la ciudad, ante la seguidilla de hallazgos en los últimos meses de cadáveres, en diferentes puntos, envueltos en bolsas y algunos desmembrados, como parte de la guerra que libran bandas delincuenciales, por el dominio de las rentas ilegales.
El invitado principal al debate era el secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, a quien también citaron en la mañana a un consejo extraordinario de seguridad del Distrito, que convocó la alcaldesa Claudia López, tras enterarse del hallazgo de otros cuatro cuerpos en la capital.
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Ante el llamado de su jefe inmediata, Fernández de Soto no asistió a su cita en el cabildo, según él, para “anunciar a la comunidad que las autoridades están actuando con toda la firmeza, para brindar tranquilidad a los bogotanos. Lamentablemente, la reunión se alargó más de lo que estaba contemplado”.
La ausencia generó descontento y enojo entre algunos concejales, quienes aseguraron que era muestra de la falta de voluntad de la administración de responder al control político del cabildo. “La seguridad en esta ciudad está colapsando y hacemos un debate de seguridad, donde el secretario de esa cartera no aparece. Es una falta de respeto. Vamos a hacerle una moción de seguridad, ya mismo, a ese secretario”, manifestó el concejal Diego Cancino (Alianza Verde).
Nota relacionada: Recuperar la confianza de la ciudadanía, el reto del general Carlos Triana.
De esta manera, por cerca de una hora los concejales criticaron a los funcionarios de la Alcaldía y al presidente del Concejo, quien ordenó un receso de 30 minutos, para darle tiempo al secretario a ver si alcanzaba a llegar al recinto. Sin embargo, las bancadas citantes al debate, pidieron levantar la sesión.
“Aquí hay un reglamento y los funcionarios deben respetar las citas del Concejo, que es la primera autoridad de la ciudad. Se la pasan de consejo en consejo de seguridad y no le responden a la ciudadanía”, indicó la concejal Diana Diago (Centro Democrático).
En medio de la conmoción del momento, el concejal Juan Baena (Nuevo Liberalismo) tomó un muñeco dentro de una bolsa, que hacía alusión a los cuerpos sin vida hallados en la ciudad, y lo puso en una de las sillas designadas para la Administración.
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El acto, que muchos calificaron de irrespetuoso y salido de tono, provocó que los miembros del gabinete de la Alcaldía que sí asistieron al encuentro, abandonaran el recinto y definitivamente se levantara la sesión.
Minutos después de que se suspendiera el encuentro en el cabildo, al secretario Fernández de Soto se le vio en la rueda de prensa, en el que la administración presentó las conclusiones de la reunión de seguridad del Distrito.
Por su parte, la protesta del concejal Baena fue criticada por varios miembros del gabinete distrital. “Considero que el concejal Baena debe disculparse, no con la administración, sino con las víctimas. Nada ayuda hacer un espectáculo macabro con maniquís, bolsas negras y panfletos, ante esta coyuntura de enorme complejidad”, indicó Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente de Bogotá.
En respuesta a las críticas, el concejal aseguró que “no hay que escandalizarse por un maniquí en una bolsa. Hay que hacerlo porque cada día aumentan las víctimas de la violencia, ante la indolencia de la Alcaldía de Bogotá, que no muestra resultados contundentes contra las bandas criminales”.
Por otra parte, luego del encuentro, la administración anunció que hasta el momento se tienen identificadas nueve organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico en Bogotá. Seis de las cuales, según información de la Fiscalía, están teniendo estas disputas por rentas criminales del narcotráfico.
Con este fin, se creará el Equipo Especial contra el Multicrimen en Bogotá, que está conformado por 34 investigadores de investigación criminal, 10 especialistas en inteligencia y 10 en contrainteligencia.
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
Para las 9:00 de la mañana de este martes 6 de septiembre estaba previsto un debate de control político en el Concejo de Bogotá, para discutir la situación de seguridad de la ciudad, ante la seguidilla de hallazgos en los últimos meses de cadáveres, en diferentes puntos, envueltos en bolsas y algunos desmembrados, como parte de la guerra que libran bandas delincuenciales, por el dominio de las rentas ilegales.
El invitado principal al debate era el secretario de Seguridad, Aníbal Fernández de Soto, a quien también citaron en la mañana a un consejo extraordinario de seguridad del Distrito, que convocó la alcaldesa Claudia López, tras enterarse del hallazgo de otros cuatro cuerpos en la capital.
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Ante el llamado de su jefe inmediata, Fernández de Soto no asistió a su cita en el cabildo, según él, para “anunciar a la comunidad que las autoridades están actuando con toda la firmeza, para brindar tranquilidad a los bogotanos. Lamentablemente, la reunión se alargó más de lo que estaba contemplado”.
La ausencia generó descontento y enojo entre algunos concejales, quienes aseguraron que era muestra de la falta de voluntad de la administración de responder al control político del cabildo. “La seguridad en esta ciudad está colapsando y hacemos un debate de seguridad, donde el secretario de esa cartera no aparece. Es una falta de respeto. Vamos a hacerle una moción de seguridad, ya mismo, a ese secretario”, manifestó el concejal Diego Cancino (Alianza Verde).
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“Aquí hay un reglamento y los funcionarios deben respetar las citas del Concejo, que es la primera autoridad de la ciudad. Se la pasan de consejo en consejo de seguridad y no le responden a la ciudadanía”, indicó la concejal Diana Diago (Centro Democrático).
En medio de la conmoción del momento, el concejal Juan Baena (Nuevo Liberalismo) tomó un muñeco dentro de una bolsa, que hacía alusión a los cuerpos sin vida hallados en la ciudad, y lo puso en una de las sillas designadas para la Administración.
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Minutos después de que se suspendiera el encuentro en el cabildo, al secretario Fernández de Soto se le vio en la rueda de prensa, en el que la administración presentó las conclusiones de la reunión de seguridad del Distrito.
Por su parte, la protesta del concejal Baena fue criticada por varios miembros del gabinete distrital. “Considero que el concejal Baena debe disculparse, no con la administración, sino con las víctimas. Nada ayuda hacer un espectáculo macabro con maniquís, bolsas negras y panfletos, ante esta coyuntura de enorme complejidad”, indicó Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente de Bogotá.
En respuesta a las críticas, el concejal aseguró que “no hay que escandalizarse por un maniquí en una bolsa. Hay que hacerlo porque cada día aumentan las víctimas de la violencia, ante la indolencia de la Alcaldía de Bogotá, que no muestra resultados contundentes contra las bandas criminales”.
Por otra parte, luego del encuentro, la administración anunció que hasta el momento se tienen identificadas nueve organizaciones criminales dedicadas al narcotráfico en Bogotá. Seis de las cuales, según información de la Fiscalía, están teniendo estas disputas por rentas criminales del narcotráfico.
Con este fin, se creará el Equipo Especial contra el Multicrimen en Bogotá, que está conformado por 34 investigadores de investigación criminal, 10 especialistas en inteligencia y 10 en contrainteligencia.
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