Por crisis de agua, Petro propone decretar situación de desastre en Bogotá
El presidente de la República propuso unificar presupuestos e iniciar contratación de sistemas de recolección de aguas lluvias.
La mañana de este viernes 4 de octubre, el presidente Gustavo Petro se pronunció en su cuenta de X sobre la actual crisis hídrica que atraviesa Bogotá y los municipios aledaños que se abastecen de los mismos embalses de los que bebe la capital.
En contexto puede consultar nuestro especial sobre la crisis de agua en Bogotá: Escasez de agua en Bogotá ¿cómo llegamosa este punto?
En vista de la magnitud de los retos que se deben asumir para asegurar un abastecimiento a futuro y una mitigación adecuada de las próximas temporadas de sequías, que se avizoran cada vez más fuertes, el Presidente propone que en Bogotá se decrete la situación de desastre, en donde se aúnen los esfuerzos que el gobierno Nacional y la administración distrital vienen desarrollando para hacerle frente a la crisis.
¿Qué propone el presidente?
“Bogotá hoy, es la ciudad más grande del mundo que se queda sin agua”, aseguró el presidente Gustavo Petro en el mensaje que contiene la propuesta. En ese sentido, como se ha venido planteando desde abril, cuando empezó la estrategia de racionamiento, “la ciudad amerita un proceso de emergencia dado que las actuales lluvias no devolverán el embalse Chingaza a sus niveles normales antes de la nueva temporada de sequía en enero”, señaló el primer mandatario.
Así las cosas, con un fenómeno de la Niña que brilla por su ausencia y un medida de racionamiento que no ha logrado las metas esperadas, urgen las medidas de corto y largo plazo que puedan mitigar la coyuntura actual y potencializar a futuro las estrategias que permitan que una ciudad con cerca de 8 millones de habitantes, que seguirá creciendo, pueda abastecerse.
En ese sentido, las medidas a largo plazo que contempla la presidencia tienen que ver con la revitalización de los ecosistemas de los cuales depende la salud de los páramos que abastecen los embalses de Bogotá, como es el caso de la selva Amazónica, cuyos alarmantes niveles de deforestación inciden directamente en la crisis de agua de Bogotá. También se busca desestimular la expansión urbanística que viene teniendo la ciudad y la recuperación del río Bogotá, entre otras medidas a largo plazo.
Medidas a corto plazo
Para atender la crisis ya, en el corto plazo, tal y como lo exige la coyuntura de la ciudad, el Gobierno Nacional propuso decretar la situación de desastre en Bogotá. La propuesta de Petro se basa en juntar presupuestos nacionales, distritales y municipales, con las acciones que la ciudadanía pueda desarrollar en beneficio del ahorro y la reutilización de agua. En ese sentido, “iniciar la contratación de sistemas permanentes de recolección de aguas lluvias para su uso en la limpieza del hogar y otros menesteres que no necesitan del agua potable”, como señala el presidente, es fundamental pensando en el corto plazo.
En general, la propuesta busca que las acciones comunales e individuales se movilicen y fortalezcan con los recursos públicos, para lograr mejorar sustancialmente, en esta época de lluvias, los niveles de Chingaza.
Si bien hasta el momento la alcaldía de Bogotá no se ha pronunciado oficialmente al respecto, se espera que la propuesta sea acogida y se empiecen a unificar los presupuestos para empezar los procesos de contratación de sistemas permanentes de recolección de aguas lluvias.
Lea además: Así avanza el censo de habitantes de calle en Bogotá: van más de 3.500 encuestas
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.
La mañana de este viernes 4 de octubre, el presidente Gustavo Petro se pronunció en su cuenta de X sobre la actual crisis hídrica que atraviesa Bogotá y los municipios aledaños que se abastecen de los mismos embalses de los que bebe la capital.
En contexto puede consultar nuestro especial sobre la crisis de agua en Bogotá: Escasez de agua en Bogotá ¿cómo llegamosa este punto?
En vista de la magnitud de los retos que se deben asumir para asegurar un abastecimiento a futuro y una mitigación adecuada de las próximas temporadas de sequías, que se avizoran cada vez más fuertes, el Presidente propone que en Bogotá se decrete la situación de desastre, en donde se aúnen los esfuerzos que el gobierno Nacional y la administración distrital vienen desarrollando para hacerle frente a la crisis.
¿Qué propone el presidente?
“Bogotá hoy, es la ciudad más grande del mundo que se queda sin agua”, aseguró el presidente Gustavo Petro en el mensaje que contiene la propuesta. En ese sentido, como se ha venido planteando desde abril, cuando empezó la estrategia de racionamiento, “la ciudad amerita un proceso de emergencia dado que las actuales lluvias no devolverán el embalse Chingaza a sus niveles normales antes de la nueva temporada de sequía en enero”, señaló el primer mandatario.
Así las cosas, con un fenómeno de la Niña que brilla por su ausencia y un medida de racionamiento que no ha logrado las metas esperadas, urgen las medidas de corto y largo plazo que puedan mitigar la coyuntura actual y potencializar a futuro las estrategias que permitan que una ciudad con cerca de 8 millones de habitantes, que seguirá creciendo, pueda abastecerse.
En ese sentido, las medidas a largo plazo que contempla la presidencia tienen que ver con la revitalización de los ecosistemas de los cuales depende la salud de los páramos que abastecen los embalses de Bogotá, como es el caso de la selva Amazónica, cuyos alarmantes niveles de deforestación inciden directamente en la crisis de agua de Bogotá. También se busca desestimular la expansión urbanística que viene teniendo la ciudad y la recuperación del río Bogotá, entre otras medidas a largo plazo.
Medidas a corto plazo
Para atender la crisis ya, en el corto plazo, tal y como lo exige la coyuntura de la ciudad, el Gobierno Nacional propuso decretar la situación de desastre en Bogotá. La propuesta de Petro se basa en juntar presupuestos nacionales, distritales y municipales, con las acciones que la ciudadanía pueda desarrollar en beneficio del ahorro y la reutilización de agua. En ese sentido, “iniciar la contratación de sistemas permanentes de recolección de aguas lluvias para su uso en la limpieza del hogar y otros menesteres que no necesitan del agua potable”, como señala el presidente, es fundamental pensando en el corto plazo.
En general, la propuesta busca que las acciones comunales e individuales se movilicen y fortalezcan con los recursos públicos, para lograr mejorar sustancialmente, en esta época de lluvias, los niveles de Chingaza.
Si bien hasta el momento la alcaldía de Bogotá no se ha pronunciado oficialmente al respecto, se espera que la propuesta sea acogida y se empiecen a unificar los presupuestos para empezar los procesos de contratación de sistemas permanentes de recolección de aguas lluvias.
Lea además: Así avanza el censo de habitantes de calle en Bogotá: van más de 3.500 encuestas
Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.