Por primera vez, privados de la libertad muestran su arte en Expoartesanías

Expoartesanías, la feria artesanal de América Latina que busca promover la conservación de los oficios tradicionales del país, le abrió la puerta de los pabellones 1 y 6 de Corferias, del 4 al 17 de diciembre a privados de la libertad de la Cárcel Distrital, un hecho sin precedentes en este evento que resalta el trabajo de los artesanos y sus creaciones.

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Uno de estos expositores es Orlando, quien cumplió 10 años de condena por traficar estupefacientes a otro país. Su tiempo en prisión lo hizo reconsiderar el rumbo de su vida, en gran parte desde que ingresó al programa de ’Casa Libertad´ de la secretaría de Seguridad, espacio que permite a los privados de la libertad graduarse como bachiller como es el caso de este hombre que más adelante incursionó en la panadería, ahora exhibida en Corferias.

Y es que los procesos de resocialización que dignifican a los privados de la libertad son la clave para la no reincidencia en delitos y brindarles herramientas para una incorporación a la sociedad fluidas y sin estigmatizaciones. A la fecha, más de 800 personas que han sido apoyadas por la cartera de Seguridad para la nueva vida que afrontan después de salir de prisión, con nuevos y difíciles retos. Más de 30 han logrado graduarse como bachilleres y esperan encontrar un nuevo rumbo para sus vidas.

Además de Orlando, otras personas de la cárcel tienen la oportunidad de mostrar el arte que han aprendido en su tiempo en presidio, tales como mochilas pintadas a mano, bolsos tejidos, velas aromáticas, pinturas, obras de arte. También fabricaron refinados barriles en madera para almacenar vinos y algunas casas artesanales para guardar los huevos en la lacena, entre otros productos innovadores y tipo exportación. En este espacio también podrán contar sus historias de vida y mostrar lo que hay más allá de su pasado.

Según la secretaría, los fondos recaudados con la venta de estos productos se volverán a invertir en la compra de más materiales para que otras personas privadas de la libertad puedan explotar sus dotes como artistas y mientras cumplen su condena, encuentren otras maneras de generar ingresos.

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