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La expedición de un nuevo plan de ordenamiento territorial (POT) es una de las noticias más importantes para la ciudad, ya que es uno de los instrumentos bajo los cuales se determina cómo crecerá la capital en por lo menos los próximos 12 años.
Precisamente, al tratarse de un documento tan relevante, muchos de sus planteamientos son técnicos, pero esto no impide que tenga una injerencia directa en los ciudadanos como lo es el cambio de las localidades, que ahora serán más, la declaración de nuevos humedales o la habilitación de suelo para realizar nuevas vías o permitir la renovación urbana (construcción en altura).
Conozca más del POT y de lo que ha ocurrido en los últimos meses con el plan en Lo que debe saber del POT de Bogotá
Estas son algunas de las cosas clave que se deben tener en cuenta del POT y del nuevo documento aprobado.
¿Qué es el POT?
El plan de ordenamiento territorial (POT) es un instrumento territorial y de uso el suelo, bajo el cual se definen los lineamientos de cómo y dónde crecerá la ciudad en los próximos 12 años. Es por ello, que en el documento se pueden encontrar desde las nuevas vías demarcadas y rutas de sistemas de transporte, como la segunda línea del metro, hasta las condiciones y lugares donde se podrán construir viviendas, colegios, parques hospitales.
Pese a que se establecen condiciones con respecto a medioambiente, necesidades de vivienda y de equipamentos en salud y educación, el POT no establece subsidios ni aspectos que no estén relacionados con el uso del suelo.
Para profundizar más, lea: ¿Qué es el POT?
¿Cuáles son los pasos para aprobar el POT?
Al tratarse de un instrumento tan importante para la ciudad, la ley establece que un alcalde debe formular una propuesta y concertarla con las entidades ambientales, que en el caso de Bogotá se trata de la Secretaría de Ambiente y la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR).
A la par se debe entrar en una etapa participativa en la que se debe socializar y escuchar las propuestas de la ciudadanía para luego entregar el proyecto al Consejo Territorial de Planeación Distrital (CTPD), que deberá emitir un concepto.
Por último, el proyecto debe ser llevado ante el Concejo Distrital que tiene 90 días desde su radicación, para debatir y definir si lo aprueba o no, ya que en caso de que no se logre tomar una decisión en este tiempo, la alcaldía que lo presentó puede aprobarlo por decreto, tal y como lo presentó sin modificaciones.
Lea más de este tema en: El cronograma del POT ¿por qué los tiempos son diferentes?
¿Por qué es polémica la aprobación por decreto?
El Concejo de Bogotá no alcanzó a votar el articulado del POT debido a una serie de recusaciones e impedimentos que, terceros y ellos mismos, radicaron contra los concejales. El reglamento interno del cabildo indica que cada vez que se presenta una de estas acciones se debe suspender la discusión y citar a plenaria para resolver el recurso.
Esto precisamente ocurrió el último mes, que era cuando se debía votar en la Comisión del Plan las ponencias positivas, pero debido a la aparición de recusaciones cada vez que se iba a dar inicio a la sesión, nunca se pudo votar el proyecto.
Al principio, el sondeo mostraba que la alcaldesa López tenía las mayorías para aprobar su proyecto POT, pero al final, al ser cada vez más evidente que las recusaciones estaban siendo utilizadas como estrategia política, la mayoría indicó que estaba dispuesto a tumbar el proyecto y pedir a la mandataria que lo volviera a presentar.
La sesión para tumbar el POT no se pudo realizar debido a la aparición de una nueva recusación, por lo que quedó en manos de Claudia López definir su aprobación por decreto, lo que ocurrió este 29 de diciembre, pese a los llamados del cabildo y diferentes gremios a que no lo hiciera y, en cambio, volviera a tramitar el POT con los cambios propuestos en los últimos tres meses de discusión.
Aquí un resumen de lo que pasó: Aprobación del POT por decreto, ¿la nueva apuesta?
¿Por qué había afán de aprobar el POT?
Aunque el POT define los lineamientos de la ciudad por 12 años, el que estaba vigente en Bogotá se aprobó en 2004 y desde hace siete años se debió modificar, pero una serie de circunstancias impidieron que eso pasara. Petro aprobó por decreto la Modificación Especial del POT (Mepot), pero un juez lo tumbó, por errores de procedimiento. Por su parte, Peñalosa lo llevó al cabildo en su último año de Gobierno, pero se lo negaron.
Lea más detalles en: Lo que nos debe importar del POT
¿Qué tiene el nuevo POT?
Son muchos los nuevos detalles. La estructura ecológica principal es uno de los ejes principales, pues además de que se declaran dos nuevos humedales (Tingua Azul y El Escritorio), se amplía el número de las localidades que ahora se llamarán unidades de planeación local.
Además, se reducen las zonas de expansión urbana y se prioriza la renovación (construcción en altura), se establecen nuevas ciclo alamedas y 416 kilómetros de ciclorrutas, así como dos nuevos Regiotram (tren de cercanías), cinco líneas de metro y siete cables aéreos.
Así mismo, se plantea la consolidación de 45 manzanas de cuidado, en las que se encontrarán equipamientos en salud, educación, integración y servicios sociales, y se definen nuevos lineamientos para la construcción de vivienda en la ciudad, entre los que están nuevas cargas para los constructores y responsabilidades como primeros pisos activos en los que se pueda incentivar el comercio.
Conozca otras propuestas por sectores en: Los puntos claves del proyecto POT que Claudia López llevó al Concejo
¿Cuáles serán las nuevas localidades?
Las nuevas localidades se llamarán unidades de planeación local (UPL) y serán 33. El cambio se hace con el fin de reducir el tamaño de las organizaciones hoy existentes dado que localidades como Suba o Kennedy hoy son mucho más grandes que ciudades intermedias como Bucaramanga.
De acuerdo con el Distrito, la división se hizo de acuerdo con las unidades de planeación zonal (UPZ), los arraigos patrimoniales y la escala de Manhattan, que define la proximidad de un punto a otro de acuerdo con los caminos que se debe tomar y otros valores que determinan la cercanía.
Explore como esta medida lo podrá afectar su casa en: Así se dividirán las nuevas localidades en Bogotá ¿Dónde quedará su barrio?
¿En qué cosiste la renovación urbana?
Es una de las alternativas para habilitar suelo para la construcción de nuevas viviendas. En este caso lo que hace el Distrito es determinar lugares de la ciudad, en donde los constructores podrán hacer edificios de apartamentos, para que no se tenga que recurrir a zonas rurales para hacer nuevas casas.
La polémica es que no es un proceso fácil, porque, por un lado, los propietarios muchas veces no están dispuestos a vender sus viviendas, lo que desincentiva a los constructores a optar por este tipo de opciones. El Distrito señala que apalancará estos proyectos con una política de moradores, pero al gremio le preocupa que estas dificultades puedan terminar reduciendo la oferta de vivienda en la ciudad.
En contexto: Renovación urbana en Bogotá: ¿qué es lo que no convence?
¿Cuándo se comenzará a aplicar el POT?
Hay aspectos, especialmente los relacionados con la norma urbanística que comenzarán a regir desde ya, por lo que la Secretaría de Planeación anunció que creará en enero mesas de trabajo con los curadores urbanos para aclarar dudas y explicar la nueva reglas.
Otros aspectos, como las nuevas localidades, planes de renovación y nuevas vías o líneas de metro, requerirán de otras reglamentaciones que deberán ser llevadas al Concejo o que se irán aprobando una vez se defina su ejecución, pero debe quedar claro que los cambios no se darán de un día para otro y que la ejecución del POT dependerá de la disposición de los alcaldes para cumplir los proyectos que allí se plantean.
Este ha sido uno de los temas más controversiales: La encrucijada por la ALO Norte
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