Presuntos cabecillas del Tren de Aragua en Bogotá, a esperar el juicio en prisión

De los 19 detenidos la semana pasada, señalados como supuestos miembros de la banda criminal Tren de Aragua, 17 tendrán que esperar el juicio en prisión y dos, seguirán en libertad, pero vinculados al proceso.  Así lo decidió un juez de garantías, luego de escuchar la imputación de cargos y atender la solicitud de aseguramiento, que hizo la Fiscalía.

Le puede interesar: Así le han seguido la pista al Tren de Aragua en Bogotá, ¿dónde opera?

Razones hay de sobra, para mantenerlos tras las rejas y considerarlos un peligro para la sociedad, según el ente acusador. A los procesados estarían involucrados en homicidios selectivos, venta de estupefacientes, tráfico de armas, extorsión y cohecho. Para convencer al juez, el fiscal presentó abundante evidencia técnica sobre la posible “participación de varios de los procesados en, por lo menos, siete asesinatos ocurridos en el centro y suroccidente de la ciudad” , indicó José Manuel Martínez Malaver, director seccional de fiscalías Bogotá.

Los principales procesados son alias Osmer, presunto jefe de sicarios; alias Brayan, quien sería el cabecilla financiero y enlace con los articuladores del grupo ilegal en Venezuela, y alias La T, un teniente de la Policía Nacional, señalado de favorecer el actuar ilegal de la organización, en la localidad de Kennedy.

Le puede interesar: Policía que estaría vinculado con el ‘Tren de Aragua’ fue entregado por la misma banda

Además, alias Kimayer, alias Ricardito, alias Huesos, alias Careniña y alias Danilo, que estarían involucrados en actividades sicariales y homicidios, y alias William, alias Cachorro alias Eduard y alias Danilo, a quienes se les atribuye la venta de estupefacientes al menudeo y el control de los expendios.

“A estos se suman otros ocho judicializados, capturados en flagrancia, por tener en su poder armas de fuego, munición de distintos calibres, marihuana, bazuco, base de coca, celulares, 223 cédulas y tarjetas Sim Card. Seis de estas personas deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario y dos más seguirán vinculadas a la investigación”, agregó el ente acusador.

En total, “son más de 300 horas de análisis de videos y fotografías, entre otras evidencias obtenidas en el curso de la investigación, permitieron establecer que estas personas habrían participado en diferentes actividades delictivas como homicidios selectivos, venta de estupefacientes, extorsiones y distribución de licor adulterado en las localidades de Kennedy, Bosa y Santa Fe”, señaló el ente acusador. Entre las evidencias para vincular a varios de los detenidos durante el último operativo está la comunicación directa de algunos de sus integrantes con ‘Niño Guerrero’.

Más información: ¿Qué se sabe del “Tren de Aragua” banda que asocian con cuerpos hallados en Bogotá?

Con esta acción judicial, la Fiscalía avanza en el esclarecimiento de siete asesinatos ocurridos en 2022, que impactaron a la capital, entre ellos tres cometidos por sicarios, en la localidad Kennedy, como el de Maria Eugenia Lozada (colombiana), asesinada por sicarios el 15 de febrero, en el barrio Llano Grande; el de Juan José Martínez (colombiano), registrado el 22 de mayo, en el barrio Saucedal, y el de Leonard Alexánder López (Venezolano), cometido el 16 de julio, en el barrio El Tintal.

Además, el asesinato de Óscar Javier Reyes (colombiano), el 23 de julio, en el barrio Alcalá de la localidad de Suba. También, cuatro de las víctimas que encontraron en bolsas en las calles de la capital, como el de Jonhathan Esturar López (venezolano), al que encontraron el 18 de abril en el barrio Palmeras con signos de tortura y heridas con arma blanca.

Y, finalmente, los de Carlos José Guedes y Wilfre José Quevedo (ambos venezolanos), a quienes hallaron el 11 de mayo, en el barrio Palmitas. Y finalmente, el crimen de Franyer Javier Ojeda (venezolano), encontrado el 6 de agosto, en el barrio Tropezón de la localidad de Bosa, con signos de tortura.

¿Dónde opera el “Tren de Aragua” en Bogotá?

La banda del “Tren de Aragua”, con origen en Venezuela, es protagonista en el presente de inseguridad, no solo en Colombia, sino en los países de la región. Las autoridades indican que tiene casi 4.000 hombres y que su centro de operaciones está en la cárcel de Tocorón, en el hermano país. Hoy, dice un informe de la administración, tiene incidencia en siete países, partiendo de Venezuela y pasando por Colombia, Ecuador, Perú, Chile, Bolivia, Brasil e, incluso, Costa Rica.

Como cabecilla principal identifican a Héctor Rusthernford Guerrero Flórez, alias Niño Guerrero, de 38 años. En su trayectoria criminal tiene homicidios de policías y hurtos a residencias en Venezuela. Hoy está condenado por homicidio, fuga de presos, falsificación de documentos, ocultamiento de armas de guerra, usurpación de identidad, secuestro agravado, asociación para delinquir, entre otros.

A pesar de que está detenido desde 2013, en 2017 empezó la expansión de su organización y la consolidación del poder desde la cárcel. Su base de operaciones en Bogotá está en la localidad Kennedy, en inmediaciones de Corabastos, puntualmente en los barrios La 38, María Paz, El Amparo, Llano grande, Bellavista y Dindalito, por ser zonas que concentran actividades de reciclaje, comercio ambulante, bicitaxismo, y donde, además, viene creciendo la concentración de población extranjera y vulnerable.

Hoy, dicen las autoridades, expandieron su incidencia también a localidades como Chapinero, Los Mártires, Bosa, Ciudad Bolívar y Usme. Allí, hacen presencia y buscan adueñarse de rentas ilegales como el tráfico de estupefacientes, la extorsión, la venta de armas, licor adulterado y el control de pagadiarios. Lo hacen a sangre y fuego.

En la última operación capturaron a 19 supuestos integrantes, de los cuales, 15 son venezolanos. La operación incluyó 21 allanamientos en cinco localidades de Bogotá y en Soacha. En la operación incautaron 12.300 dosis de bazuco, 3.500 de marihuana y 123 de cocaína. También, dos armas de fuego, munición, 21 celulares, 223 cédulas y 41 tarjetas Edenred. Entre las evidencias para vincular a varios de los detenidos durante el último operativo está la comunicación directa de algunos de sus integrantes con Niño Guerrero.

Para conocer más noticias de la capital y Cundinamarca, visite la sección Bogotá de El Espectador.

De los 19 detenidos la semana pasada, señalados como supuestos miembros de la banda criminal Tren de Aragua, 17 tendrán que esperar el juicio en prisión y dos, seguirán en libertad, pero vinculados al proceso.  Así lo decidió un juez de garantías, luego de escuchar la imputación de cargos y atender la solicitud de aseguramiento, que hizo la Fiscalía.

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Razones hay de sobra, para mantenerlos tras las rejas y considerarlos un peligro para la sociedad, según el ente acusador. A los procesados estarían involucrados en homicidios selectivos, venta de estupefacientes, tráfico de armas, extorsión y cohecho. Para convencer al juez, el fiscal presentó abundante evidencia técnica sobre la posible “participación de varios de los procesados en, por lo menos, siete asesinatos ocurridos en el centro y suroccidente de la ciudad” , indicó José Manuel Martínez Malaver, director seccional de fiscalías Bogotá.

Los principales procesados son alias Osmer, presunto jefe de sicarios; alias Brayan, quien sería el cabecilla financiero y enlace con los articuladores del grupo ilegal en Venezuela, y alias La T, un teniente de la Policía Nacional, señalado de favorecer el actuar ilegal de la organización, en la localidad de Kennedy.

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Además, alias Kimayer, alias Ricardito, alias Huesos, alias Careniña y alias Danilo, que estarían involucrados en actividades sicariales y homicidios, y alias William, alias Cachorro alias Eduard y alias Danilo, a quienes se les atribuye la venta de estupefacientes al menudeo y el control de los expendios.

“A estos se suman otros ocho judicializados, capturados en flagrancia, por tener en su poder armas de fuego, munición de distintos calibres, marihuana, bazuco, base de coca, celulares, 223 cédulas y tarjetas Sim Card. Seis de estas personas deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario y dos más seguirán vinculadas a la investigación”, agregó el ente acusador.

En total, “son más de 300 horas de análisis de videos y fotografías, entre otras evidencias obtenidas en el curso de la investigación, permitieron establecer que estas personas habrían participado en diferentes actividades delictivas como homicidios selectivos, venta de estupefacientes, extorsiones y distribución de licor adulterado en las localidades de Kennedy, Bosa y Santa Fe”, señaló el ente acusador. Entre las evidencias para vincular a varios de los detenidos durante el último operativo está la comunicación directa de algunos de sus integrantes con ‘Niño Guerrero’.

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Con esta acción judicial, la Fiscalía avanza en el esclarecimiento de siete asesinatos ocurridos en 2022, que impactaron a la capital, entre ellos tres cometidos por sicarios, en la localidad Kennedy, como el de Maria Eugenia Lozada (colombiana), asesinada por sicarios el 15 de febrero, en el barrio Llano Grande; el de Juan José Martínez (colombiano), registrado el 22 de mayo, en el barrio Saucedal, y el de Leonard Alexánder López (Venezolano), cometido el 16 de julio, en el barrio El Tintal.

Además, el asesinato de Óscar Javier Reyes (colombiano), el 23 de julio, en el barrio Alcalá de la localidad de Suba. También, cuatro de las víctimas que encontraron en bolsas en las calles de la capital, como el de Jonhathan Esturar López (venezolano), al que encontraron el 18 de abril en el barrio Palmeras con signos de tortura y heridas con arma blanca.

Y, finalmente, los de Carlos José Guedes y Wilfre José Quevedo (ambos venezolanos), a quienes hallaron el 11 de mayo, en el barrio Palmitas. Y finalmente, el crimen de Franyer Javier Ojeda (venezolano), encontrado el 6 de agosto, en el barrio Tropezón de la localidad de Bosa, con signos de tortura.

¿Dónde opera el “Tren de Aragua” en Bogotá?

La banda del “Tren de Aragua”, con origen en Venezuela, es protagonista en el presente de inseguridad, no solo en Colombia, sino en los países de la región. Las autoridades indican que tiene casi 4.000 hombres y que su centro de operaciones está en la cárcel de Tocorón, en el hermano país. Hoy, dice un informe de la administración, tiene incidencia en siete países, partiendo de Venezuela y pasando por Colombia, Ecuador, Perú, Chile, Bolivia, Brasil e, incluso, Costa Rica.

Como cabecilla principal identifican a Héctor Rusthernford Guerrero Flórez, alias Niño Guerrero, de 38 años. En su trayectoria criminal tiene homicidios de policías y hurtos a residencias en Venezuela. Hoy está condenado por homicidio, fuga de presos, falsificación de documentos, ocultamiento de armas de guerra, usurpación de identidad, secuestro agravado, asociación para delinquir, entre otros.

A pesar de que está detenido desde 2013, en 2017 empezó la expansión de su organización y la consolidación del poder desde la cárcel. Su base de operaciones en Bogotá está en la localidad Kennedy, en inmediaciones de Corabastos, puntualmente en los barrios La 38, María Paz, El Amparo, Llano grande, Bellavista y Dindalito, por ser zonas que concentran actividades de reciclaje, comercio ambulante, bicitaxismo, y donde, además, viene creciendo la concentración de población extranjera y vulnerable.

Hoy, dicen las autoridades, expandieron su incidencia también a localidades como Chapinero, Los Mártires, Bosa, Ciudad Bolívar y Usme. Allí, hacen presencia y buscan adueñarse de rentas ilegales como el tráfico de estupefacientes, la extorsión, la venta de armas, licor adulterado y el control de pagadiarios. Lo hacen a sangre y fuego.

En la última operación capturaron a 19 supuestos integrantes, de los cuales, 15 son venezolanos. La operación incluyó 21 allanamientos en cinco localidades de Bogotá y en Soacha. En la operación incautaron 12.300 dosis de bazuco, 3.500 de marihuana y 123 de cocaína. También, dos armas de fuego, munición, 21 celulares, 223 cédulas y 41 tarjetas Edenred. Entre las evidencias para vincular a varios de los detenidos durante el último operativo está la comunicación directa de algunos de sus integrantes con Niño Guerrero.

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