Revelan llamada que comprometería a Jonathan Torres con desaparición de Adriana Pinzón
En una conversación recuperada por la Fiscalía General de la Nación, la madre de Torres le indica a su hijo que debe asumir “su responsabilidad”. El imputado rendirá indagatoria ante el ente acusador el próximo martes.
Continúa la investigación en el caso de la desaparición de la psicóloga Adriana Pinzón, de quien no se conoce su paradero desde el pasado 7 de junio y en el cual el principal sospechoso en la investigación es Jonathan Torres, quien es su cuñado, es decir, pareja de una de sus hermanas, desde hace 6 años.
Este jueves se conoció un fragmento de una llamada entre Torres y su madre, que fue recuperado por la Fiscalía, y que presuntamente incriminaría al imputado y expolicía con los hechos. En el audio, relevado por el diario El Tiempo y que se convierte en prueba reina del proceso, se escucha a la madre de Torres indicándole que asuma “su responsabilidad”.
“¿Qué le pasa? ¿Qué tiene en la cabeza? ¿Por qué es tan irresponsable? Coja responsabilidad, usted ya está muy viejo, hermano”, le dijo la mujer a Torres en la llamada.
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Además, en la conversión le dice al sujeto que, si es responsable, que dé información sobre el paradero de Adriana. “Si él es responsable, sería bueno que dé esta información para la realización de un preacuerdo y para su beneficio”, indicó el abogado defensor, Jimmy Narváez, a City Noticias.
Esta nueva prueba se suma al material que ha reunido la Fiscalía contra Jonathan Torres, que rendirá indagatoria ante el ente acusador el próximo martes 28 de junio. Actualmente, los investigadores se encuentran revisando el teléfono celular, el computador y las cuentas bancarias del principal sospechoso del caso, que ha entregado versiones sobre sus acciones durante el día de la desaparición de la psicóloga, que han sido cuestionadas por los investigadores.
De esta manera, en el proceso de investigación se identificó que Adriana, de 42 años, no salió de su apartamento ubicado en el municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, contrario a la versión que entregó Torres en su primera indagación, quien afirmó haberla visto en el sector Tres Esquinas de Chía, luego de que supuestamente vendiera su auto y tomara un taxi.
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Esta versión fue ratificada por el dueño del concesionario donde se vendió el carro de Pinzón, que manifestó que ella nunca estuvo en el negocio y que Jonathan fue el que realizó la venta con un traspaso, que tenía algunas inconsistencias, supuestamente firmado por la psicóloga.
A través de grabaciones de las cámaras de seguridad del conjunto residencial en el que vivía Pinzón, se constató que, el día de su desaparición, su cuñado ingresó a su apartamento y, entre las 6:00 y 7:20 de la noche, salió en dos oportunidades. Lo peculiar de sus salidas es que en la primera llevaba un morral de color negro y, al parecer, se comportaba de manera sospechosa mirando con detenimiento si había movimiento en la zona.
Posteriormente, se alcanza a observar que llevaba unas grandes bolsas de basura que cargaba con sus brazos y en algunos momentos sobre el hombro, comportamiento que, según especialistas forenses, denotaría exceso de fuerza y urgencia para dejar dichas bolsas plásticas en el baúl del vehículo.
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Según afirmó el fiscal encargado, además de esto, en la inspección realizada por el equipo forense se encontraron rastros de sangre en varios ambientes de la vivienda. Versión que fue apoyada por el testimonio de la mujer que le colaboraba en servicios varios a Adriana Pinzón y su familia, quien luego de visitar el lugar mencionó que algunos productos de limpieza estaban en “lugares no asignados”.
Durante las audiencias preliminares, el fiscal reveló que existía el testimonio de un hombre que se acercó al ente investigador para manifestar que Torres le dio a guardar un maletín (el que se ve en su primera salida del apartamento) que contenía cuchillos ensangrentados y documentos como la licencia de conducción de Adriana, entre otros objetos. Cabe señalar que esta afirmación no fue aceptada por el sospechoso.
Jonathan Torres es investigado por los delitos de desaparición forzada y homicidio agravado y, en caso de ser condenado, podría enfrentar una pena que puede oscilar entre los 25 a 40 años de prisión, de acuerdo con el artículo 104 del Código Penal Colombiano.
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Según dio a conocer Jimmy Narváez, su abogado defensor, el señalado como principal sospechoso se desempeñó como explosivista y francotirador en la Policía Nacional. “Él trabajó en zonas rojas, vio morir a muchas personas. No creo que su estado de salud sea bueno. Creo que habrá que hacerle un examen psicológico en el proceso”, dijo Narváez.
Por su parte, la Fiscalía General de la Nación también anunció que se encuentra investigando a dos personas que tendrían información para esclarecer la desaparición de la psicóloga.
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Continúa la investigación en el caso de la desaparición de la psicóloga Adriana Pinzón, de quien no se conoce su paradero desde el pasado 7 de junio y en el cual el principal sospechoso en la investigación es Jonathan Torres, quien es su cuñado, es decir, pareja de una de sus hermanas, desde hace 6 años.
Este jueves se conoció un fragmento de una llamada entre Torres y su madre, que fue recuperado por la Fiscalía, y que presuntamente incriminaría al imputado y expolicía con los hechos. En el audio, relevado por el diario El Tiempo y que se convierte en prueba reina del proceso, se escucha a la madre de Torres indicándole que asuma “su responsabilidad”.
“¿Qué le pasa? ¿Qué tiene en la cabeza? ¿Por qué es tan irresponsable? Coja responsabilidad, usted ya está muy viejo, hermano”, le dijo la mujer a Torres en la llamada.
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Además, en la conversión le dice al sujeto que, si es responsable, que dé información sobre el paradero de Adriana. “Si él es responsable, sería bueno que dé esta información para la realización de un preacuerdo y para su beneficio”, indicó el abogado defensor, Jimmy Narváez, a City Noticias.
Esta nueva prueba se suma al material que ha reunido la Fiscalía contra Jonathan Torres, que rendirá indagatoria ante el ente acusador el próximo martes 28 de junio. Actualmente, los investigadores se encuentran revisando el teléfono celular, el computador y las cuentas bancarias del principal sospechoso del caso, que ha entregado versiones sobre sus acciones durante el día de la desaparición de la psicóloga, que han sido cuestionadas por los investigadores.
De esta manera, en el proceso de investigación se identificó que Adriana, de 42 años, no salió de su apartamento ubicado en el municipio de Zipaquirá, Cundinamarca, contrario a la versión que entregó Torres en su primera indagación, quien afirmó haberla visto en el sector Tres Esquinas de Chía, luego de que supuestamente vendiera su auto y tomara un taxi.
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Esta versión fue ratificada por el dueño del concesionario donde se vendió el carro de Pinzón, que manifestó que ella nunca estuvo en el negocio y que Jonathan fue el que realizó la venta con un traspaso, que tenía algunas inconsistencias, supuestamente firmado por la psicóloga.
A través de grabaciones de las cámaras de seguridad del conjunto residencial en el que vivía Pinzón, se constató que, el día de su desaparición, su cuñado ingresó a su apartamento y, entre las 6:00 y 7:20 de la noche, salió en dos oportunidades. Lo peculiar de sus salidas es que en la primera llevaba un morral de color negro y, al parecer, se comportaba de manera sospechosa mirando con detenimiento si había movimiento en la zona.
Posteriormente, se alcanza a observar que llevaba unas grandes bolsas de basura que cargaba con sus brazos y en algunos momentos sobre el hombro, comportamiento que, según especialistas forenses, denotaría exceso de fuerza y urgencia para dejar dichas bolsas plásticas en el baúl del vehículo.
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Durante las audiencias preliminares, el fiscal reveló que existía el testimonio de un hombre que se acercó al ente investigador para manifestar que Torres le dio a guardar un maletín (el que se ve en su primera salida del apartamento) que contenía cuchillos ensangrentados y documentos como la licencia de conducción de Adriana, entre otros objetos. Cabe señalar que esta afirmación no fue aceptada por el sospechoso.
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Por su parte, la Fiscalía General de la Nación también anunció que se encuentra investigando a dos personas que tendrían información para esclarecer la desaparición de la psicóloga.
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