Se adjudica al consorcio INORIN la construcción del Hospital de Bosa

Mediante un esquema de Alianza Público Privada (APP), la cual consiste en que el Distrito no desembolsa un solo peso hasta que el contratista entregue la obra en las condiciones acordadas, se adjudicó la construcción del Hospital de Bosa al consorcio español INORIN. 

La inversión de $1 billón beneficiará a más de 400 mil personas en Bogotá (de localidades como Bosa, Kennedy, Puente Aranda y Fontibón), quienes tendrán a su alcance 215 camas en las que recibirán servicios de mediana y alta complejidad orientados a la atención de pacientes crónicos con enfermedades cardiovasculares, renales, diabetes, detección temprana del cáncer, Epoc y osteoartritis, entre otras. 

La ubicación de este hospital será en la calle 73 sur #100 a 53, y su área de construcción será cercana a los 30.000 metros cuadrados. Se prevé que las obras inicien en el año 2021 para que, en 2023, esté en operación este nuevo centro de salud. 

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“La estructura de este proyecto hospitalario estuvo a cargo de la Financiera de Desarrollo Nacional – FDN, mediante la conformación de un equipo multidisciplinario con los más altos estándares internacionales. El contrato establece que este consorcio se encargará, además, del mantenimiento del nuevo hospital de Bosa durante 15 años”, comunicó la Secretaría de Salud. 

Sumado a lo anterior, el contratista será responsable de garantizar el mantenimiento de toda la infraestructura y la reposición de equipos biomédicos y el mobiliario con el que será dotado el hospital, así como la prestación de los servicios de aseo, desinfección y vigilancia. 

La responsabilidad que le compete a la Subred Integrada de Servicios de Salud Sur Occidente será la de prestar directamente los servicios de salud. Así las cosas, tendrá que aportar especialistas, médicos, enfermeras y demás personal. La atención a los usuarios y pacientes, entonces, será totalmente pública. 

Esta no es la única inversión en salud que se ha realizado en la administración Peñalosa. Cifras manejadas por el Distrito dan cuenta de $1.8 billones repartidos en cerca de 30 obras de infraestructura de la red pública hospitalaria de la ciudad, entre estas se encuentran la construcción de 20 nuevos Centros de Atención Prioritaria de Salud (CAPS) y tres ‘mega hospitales’ (el de Usme, Santa Clara y Bosa).

La secretaría además destacó que este será “ el primer hospital público en Colombia diseñado, construido y dotado para la atención de pacientes crónicos. El equipamiento, la infraestructura y sus servicios estarán enfocados principalmente en la atención a personas con este tipo de enfermedades, las cuales casi siempre se presentan en adultos mayores”. 

Mediante un esquema de Alianza Público Privada (APP), la cual consiste en que el Distrito no desembolsa un solo peso hasta que el contratista entregue la obra en las condiciones acordadas, se adjudicó la construcción del Hospital de Bosa al consorcio español INORIN. 

La inversión de $1 billón beneficiará a más de 400 mil personas en Bogotá (de localidades como Bosa, Kennedy, Puente Aranda y Fontibón), quienes tendrán a su alcance 215 camas en las que recibirán servicios de mediana y alta complejidad orientados a la atención de pacientes crónicos con enfermedades cardiovasculares, renales, diabetes, detección temprana del cáncer, Epoc y osteoartritis, entre otras. 

La ubicación de este hospital será en la calle 73 sur #100 a 53, y su área de construcción será cercana a los 30.000 metros cuadrados. Se prevé que las obras inicien en el año 2021 para que, en 2023, esté en operación este nuevo centro de salud. 

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“La estructura de este proyecto hospitalario estuvo a cargo de la Financiera de Desarrollo Nacional – FDN, mediante la conformación de un equipo multidisciplinario con los más altos estándares internacionales. El contrato establece que este consorcio se encargará, además, del mantenimiento del nuevo hospital de Bosa durante 15 años”, comunicó la Secretaría de Salud. 

Sumado a lo anterior, el contratista será responsable de garantizar el mantenimiento de toda la infraestructura y la reposición de equipos biomédicos y el mobiliario con el que será dotado el hospital, así como la prestación de los servicios de aseo, desinfección y vigilancia. 

La responsabilidad que le compete a la Subred Integrada de Servicios de Salud Sur Occidente será la de prestar directamente los servicios de salud. Así las cosas, tendrá que aportar especialistas, médicos, enfermeras y demás personal. La atención a los usuarios y pacientes, entonces, será totalmente pública. 

Esta no es la única inversión en salud que se ha realizado en la administración Peñalosa. Cifras manejadas por el Distrito dan cuenta de $1.8 billones repartidos en cerca de 30 obras de infraestructura de la red pública hospitalaria de la ciudad, entre estas se encuentran la construcción de 20 nuevos Centros de Atención Prioritaria de Salud (CAPS) y tres ‘mega hospitales’ (el de Usme, Santa Clara y Bosa).

La secretaría además destacó que este será “ el primer hospital público en Colombia diseñado, construido y dotado para la atención de pacientes crónicos. El equipamiento, la infraestructura y sus servicios estarán enfocados principalmente en la atención a personas con este tipo de enfermedades, las cuales casi siempre se presentan en adultos mayores”.